Alejandro Armenta, senador de Morena, dijo que se reunirán con los embajadores de Argentina, Chile, Canadá, Rusia, Alemania, China e Indonesia, todas ellas potencias en la materia
Infobae
El senador Alejandro Armenta, de Morena, el partido en el poder, dio a conocer este lunes que ya se trabaja, junto con la Secretaría de Economía, en una propuesta para crear el Instituto Nacional del Litio, “tema imprescindible para lograr la soberanía energética en México”.
El legislador morenista, presidente de la Comisión de Hacienda en la Cámara Alta, precisó que, una vez que inicie el próximo periodo ordinario de sesiones, presentará a su Grupo Parlamentario la iniciativa correspondiente. Es decir, para el perido entre septiembre y diciembre habrá iniciativa sobre el tema, que ya se ha discutido largamente en el Senado.
Armenta recordó que México es el país con el yacimiento más importante y de mayor cantidad de litio en el mundo, lo que, posiblemente, lo convertirá en la principal potencia en esta materia durante los próximos 100 años. Es por ello que el gobierno mexicano, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, busca blindarlo e incluso “nacionalizarlo”.
Armenta explicó que países como Bolivia, Argentina, Chile y Corea, que son potencias en materia energética, agregó, cuentan con instancias que se encargan de la investigación de sus recursos. En este sentido, informó que una vez terminado el proceso electoral se tendrá una reunión con los embajadores de Argentina, Chile, Canadá, Rusia, Alemania, China e Indonesia, todas ellas potencias en materia de litio.
Porque, añadió Armenta, el propósito es conocer los modelos de desarrollo industrial para saber con precisión cuál debe ser el papel del gobierno federal. El senador recordó que actualmente se explotan yacimientos de litio que fueron concesionados a empresas extranjeras por el gobierno anterior, quien les otorgó más de 159,000 hectáreas a empresas privadas de Canadá, Estados Unidos, Inglaterra y China.
Sin embargo, a través de una solicitud de información que realizó la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado, se dio a conocer que, de 31 concesiones mineras, ninguna de ellas fue entregada a mexicanos. Armenta dijo que el 22 de enero, López Obrador destacó que en esta administración no se han entregado más concesiones para explotar litio.
En este sentido, recordó que ya se presentó la iniciativa para modificar el artículo 27 de la Constitución, a fin de establecer que el litio es un bien de la nación, pero está pendiente su dictamen.
La propuesta plantea reformar la Constitución para considerar al litio como “propiedad exclusiva de la nación”. El metal es uno de los productos más requeridos en el mundo debido a que se usa para el desarrollo de baterías de dispositivos electrónicos e incluso de automóviles, así como en el sector médico.
Con este cambio, indicó Armenta, el Estado tendrá la propiedad de las tierras y aguas donde se encuentre este metal blando y decidirá la mejor opción para la inversión extranjera, que beneficie a todas las mexicanas y mexicanos, por lo que el concepto de “nacionalización” no consideraría dejar fuera a empresas foráneas.
“Sólo el Estado tendrá en su poder los medios para su investigación, exploración, explotación y venta, no se excluye a la inversión extranjera, pero las ganancias beneficiarán a todas las partes”, concluyó.
Yacimientos de litio, con bajo potencial, asegura la cámara minera
BRAULIO CARBAJAL/Jornada.com
Fernando Alanís, presidente de la Cámara Minera de México (Camimex), aseguró que el país está lejos de convertirse en potencia mundial en la extracción de litio, llamado a ser el petróleo del futuro debido a su importancia en la fabricación de baterías para autos.
En entrevista con La Jornada, el representante de más de 120 mineras que aportan 90 por ciento de la producción de minerales del país, explicó que los yacimientos de litio en estados como Sonora y Zacatecas, pese a ser extensos, tienen una muy baja concentración del metal, lo que hace complicada su extracción al no existir la tecnología necesaria.
Además, apuntó Alanís, el tema se ha llevado al debate político, sobre todo luego de la reciente visita de Luis Arce, presidente de Bolivia. Ese país, sostuvo, sí es potencia en la producción de litio, pero sus yacimientos son distintos a los de México, dado que contienen alta concentración del mineral, lo que hace que su extracción sea menos compleja y más barata.
El presidente de la Camimex explicó que en el mundo existen tres tipos de yacimientos de litio: los tradicionales de roca, los cuales contienen 5 por ciento de litio por cada tonelada de roca extraída. De éstas, expresó, hay pocas en el mundo, principalmente en Australia y Estados Unidos, de ellas se obtiene 26% de la producción mundial.
El segundo tipo son los salares, de donde sale 74 por ciento de la producción global de litio. Estos yacimientos se encuentran principalmente en Argentina, Chile y Bolivia (el triángulo del litio), pero a diferencia de los tradicionales, por cada tonelada de mineral extraído, la concentración de litio es de sólo 0.1 por ciento.
Sin embargo, dijo, Alanís, pese a la baja concentración, son muy rentables, dado que por medio de un método de evaporación se logra concentrar el litio de una forma rápida y económica, lo que hace que esas tres naciones sean potencias en este mineral.
Por último, existen los yacimientos de arcilla, los cuales tienen una concentración de litio de sólo 0.001 por ciento por cada tonelada y cuya extracción necesita una gran cantidad de energía; por el momento no existe tecnología en el mundo que permita que este tipo de exploraciones sea rentable, aseguró.
Precisamente de este tercer tipo de yacimientos, aseguró el presidente de la Camimex, son los que tiene México en Sonora, Zacatecas, y algunos otros estados.
“Desgraciadamente el litio que hay en México posee una concentración de sólo 0.001 por ciento por tonelada, y para llevarlo a un porcentaje de 30, que es lo que se necesita para una batería, la cantidad de energía es grandísima, incosteable. Hoy no hay un proceso comercial en el mundo para esto, estamos lejos de ser potencia en litio”, apuntó.
Sobre la ayuda que el gobierno mexicano ha solicitado al gobierno boliviano para desarrollar su mercado de litio, Alanís apuntó que los técnicos de aquel país podrán hacer poco, dado que encontrarán que los yacimientos son muy diferentes a los de su nación.
Mineras ofrecen poca información
Para Alanís, la industria minera ha sido satanizada y las recientes declaraciones del gobierno sobre daños al medio ambiente no ayudan; sin embargo, aceptó que parte de la culpa es de las empresas, debido a que por años han operado un sector cerrado, con poca información, lo que intentan cambiar.
Enfatizó en que el sector minero abona 2 puntos porcentuales al PIB, es de las industrias que mejor pagan a los trabajadores y ha contribuido con 180 mil 700 millones de pesos en impuestos en los pasados siete años.
Del total de utilidad bruta que se genera anualmente, 16 por ciento va a las arcas públicas, mientras que 12 por ciento se entrega a los inversionistas, aseveró.