La destrucción de los bosques a causa de la minería ilegal son el causante de las inundaciones, luego de más de una semana de lluvias
El Gobierno peruano declaró estado de emergencia por un período de 60 días en la Región Madre de Dios luego de graves inundaciones que habían causado daños a infraestructura y obligado a 15.000 personas a abandonar sus hogares.
El ministro del Ambiente, Gabriel Quijandría, dijo a la radio local RPP que había unos 15.000 afectados de varios pueblos de la región Madre de Dios.
"Los problemas principales son las lluvias fuertes con la falta de planificación en el uso del espacio'', dijo Quijandría. Explicó que un enorme grupo de afectados viven en zonas bajas donde los cauces de los ríos han sido aplanados por años debido a las consecuencias de la minería ilegal de oro.
Defensa Civil informó que alrededor de 1.700 casas quedaron inhabitables y 166 kilómetros de caminos y 20 puentes quedaron afectados, así como nueve puestos sanitarios y 14 escuelas.
Madre de Dios es una región sureña fronteriza con Brasil y Bolivia donde la explotación ilegal de oro atrajo a miles desde hace décadas. La falta de planificación urbana provocó que los mineros habiten en zonas cercanas a los ríos cuyos cauces fueron destruidos para extraer el oro.
Perú, al igual que otros países de la región, tiene diversos puntos donde se extrae oro de forma ilegal, lo que contribuye a la deforestación de la Amazonía. El alto precio de la onza de oro en el mercado internacional estimula la búsqueda del metal dorado, según expertos.
El país sudamericano es el principal productor de oro de Latinoamérica y el sexto a nivel mundial. Expertos calculan que 25% de la producción de oro anual proviene de la minería ilegal.