Con el riesgo país en 1499 puntos, bonistas reclaman consistencia macroeconómica para que los títulos públicos dejen de caer
Los acreedores de la Argentina volvieron a quejarse por la demora en implementar medidas que ordenen la macroeconomía y ayuden a devolverle al país la confianza de los mercados. En un duro comunicado exigieron que el ministro Guzmán presente un plan macroeconómico y llegue a un acuerdo lo antes posible con el FMI.
"Un acuerdo con el FMI es la única fuente probable de anclaje de las políticas y marco de credibilidad de mediano plazo que pueda aportar estabilidad. Sin embargo, el Gobierno parece estar seriamente evaluando la postergación de un acuerdo con el FMI para tener más libertad para prolongar todavía más sus políticas insostenibles. Con las reservas en niveles ya peligrosamente bajos, esta estrategia da cuenta de una apuesta temeraria", se lee en el comunicado de los dieciocho fondos que integran el Ad Hoc Bondholder Group.
Los bonos argentinos volvieron a caer y el riesgo país rozó los 1500 puntos básicos otra vez. Es la marca que indica que los precios vuelven a estar a precios de defualt. Ya que fue la que se superó tras las PASO de 2019 con la confirmación de Alberto Fernández del "default virtual" y que los títulos públicos recién volvieron a cruzar tras la reestructuración de la deuda.
En el comunicado, los bonistas le remarcaron al gobierno que usó la pandemia para demorar la toma de decisiones difíciles, pero necesarias para ordenar la macroeconomía y lo responsabilizó por no estar cosechando el "viento de cola" de las bajas tasas internacionales, el rebote de las economías y de la demanda de bienes exportables con precios de los commodities récord.
En este sentido, remarcaron que bastaría con empezar a acumular reservas internacionales para poder frenar la salida de capitales. Para los bonistas, el problema no es que a Argentina le faltan dólares, porque hay 1.300 millones de dólares en billete en la economía y 300.000 millones de dólares en activos fuera del país, sin embargo la falta de credibilidad y de confianza hacen que estos dólares estén fuera del sistema financiero.
Y también hace, denuncian los acreedores, que los bonos rindan casi 16% cuando los últimos de Paraguay se emitieron al 2,74%.
Cabe recordar que, la política de estabilización del dólar paralelo de Miguel Pesce hace que los dólares que el Banco Central compra se destinen parcialmente al mercado bursátil para contener la brecha cambiaria. De hecho, el contado con liquidación cayó 2,3% y quedó en $147,71 gracias a las operaciones del BCRA que, como contrapartida, deprimen la cotización de los bonos.
Por todo esto, el grupo que le condonó al país 37.000 millones de dólares de intereses de deuda exigió que el gobierno cierre cuanto antes un acuerdo con el Fondo Monetario que le permita al país recuperar la confianza de los mercados.