Como estaba previsto, la Cámara de Senadores finalmente le dio sanción definitiva a la ley nº5.682, número que se le asignó al nuevo Código de Procedimientos Mineros que impulsó el Poder Ejecutivo. Sin embargo, llamó la atención la inesperada y sorpresiva confesión del senador por Belén, Jorge Solá Jais (FT), quien a la hora de defender el proyecto reconoció que tuvo participación en la especulación con los pedimentos mineros, e incluso involucró al Juzgado de Minas.

Solá Jais fue el miembro informante del despacho y destacó que los cambios que propuso el Gobierno tienden a "modernizarlo, actualizarlo y que el mismo sea acorde a los tiempos que corren". Además, remarcó que la intención del nuevo Código "es romper con la especulación de los pedimentos mineros".

"El modelo anterior, en el 99% de los casos provocó especulación con las concesiones y muy poco de desarrollo. Lo digo con conocimiento de causa", lanzó el expresidente provisorio del Senado.

"Yo he participado personalmente en la especulación minera en algún momento, en conversar con el Juzgado de Minas para que un expediente esté guardado en una caja fuerte y no tenga los tiempos ni los procesos de caducidad que dice el Código Nacional, y tenerlo guardado y no decir nada, y especular un año, dos años, diez años, veinte años sin desarrollar un proyecto, y mantenerlo para la especulación financiera y vaya a saber de qué cosas", se sinceró el belicho.

Desde la oposición no hubo mayores planteos y solo repararon en que no era necesario tratar con tanta celeridad el proyecto, que ayer ingresó a la Cámara alta y se aprobó sobre tablas. "Tienen los números para aprobarlo, podíamos darnos más tiempo para revisarlo, más allá de que ya lo estudiamos", dijo Ariel Cordero (JCP), aunque igualmente acompañó la aprobación.n

SE RECAUDÓ MÁS POR CANON 

Tras su confesión, Solá Jais destacó que con la propuesta del nuevo Código, las empresas mineras "comenzaron a ponerse al día con el pago del canon, con deudas que tenían y que eran superiores a los $2 millones".El gobernador Raúl Jalil, en sus consideraciones sobre el primer año de gestión, destacó que con la reforma propuesta "hemos quintuplicado el cobro del canon que las empresas o los privados no pagaban". "Está bien que tengamos una empresa minera que sea socia de los grandes emprendimientos y eso va a ser fundamental para la economía de los catamarqueños", remarcó.

Cuando el Gobierno decidió que sea el ARCA el que intervenga en el cobro del canon, había una deuda acumulada de más de $100 millones solamente divida entre cinco concesionarios.