MATT EGAN
Las consecuencias de gran alcance que produce el cambio climático tienen la capacidad de crear caos en el sistema financiero y afectar la economía estadounidense, según señaló un informe federal publicado este miércoles.
El reporte, el primero de su tipo que elabora una entidad gubernamental de EE.UU., pide al Congreso que imponga rápidamente un costo sobre el carbono e insta a los reguladores financieros a trabajar «de manera más urgente y decisiva» para comprender y mitigar el daño económico que se cierne debido al cambio climático.
«El cambio climático representa un gran riesgo para la estabilidad del sistema financiero estadounidense y para su capacidad de sostener la economía de EE.UU.», escribió la subcomisión climática de la Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos (CFTC, por sus siglas en inglés. )
La CFTC, que regula algunos mercados financieros, está conformada por tres comisionados republicanos y dos demócratas. El comité asesor sobre cambio climático, lanzado por Rostin Behnam, un comisionado demócrata, incluye representantes de bancos, grupos ambientalistas, inversores y una importante compañía petrolera. Una aclaración en el reporte enfatiza que sus conclusiones no reflejan necesariamente las opiniones de la CFTC o del gobierno de Estados Unidos.
Los científicos ya han señalado al cambio climático como el responsable de destructivos eventos climáticos en Estados Unidos, incluyendo incendios forestales, inundaciones severas y huracanes masivos.
El informe resulta destacado, en parte, porque contradice directamente la posición del presidente Donald Trump y otros republicanos que restan importancia a las consecuencias del cambio climático. El mandatario ha calificado el cambio climático como un «fraude», revocado regulaciones ambientales e incluso afirmado falsamente que los molinos de viento pueden causar cáncer.
Behnam, comisionado demócrata de la CFTC, espera que la amplia participación de la industria en el informe de este miércoles cambie el tono del gobierno.
“Les corresponde los responsables de políticas públicas, a los funcionarios electos y a los reguladores comenzar a establecer reglas sobre la resiliencia climática para que no suframos a largo plazo estos dramáticos eventos climáticos», señaló Behnam a CNN Business este miércoles. «Estos son eventos climáticos del mundo real que ocurren con mayor frecuencia y de manera más extrema».
El informe advierte sobre un potencial «estrés del sistema financiero» que podría afectar la economía al limitar el acceso al crédito.
«Con el tiempo, si no se toman medidas significativas para controlar el aumento de las temperaturas globales promedio», se lee en el informe, «los impactos del cambio climático podrían dañar la capacidad productiva de la economía y socavar su habilidad de generar empleo, ingresos y oportunidades».
Los grupos ambientalistas involucrados en el informe enfatizaron la urgente necesidad de acción.
«El hecho de que un grupo política y sectorialmente tan diverso emita un llamamiento así de fuerte para la acción reguladora da testimonio de cuán grave es la amenaza financiera sistémica que representa el cambio climático para los mercados de capitales de Estados Unidos, y cuán preocupados están al respecto las partes interesadas de todo el espectro político», sostuvo Mindy Lubber, presidenta ejecutiva de Ceres, una organización de sostenibilidad sin fines de lucro, en un comunicado.
Sin embargo, el presidente de la CFTC, el republicano Heath Tarbert, planteó un tono diferente sobre informe, al enfatizar la posible perturbación causada por el cambio hacia una energía más limpia.
«El informe de la subcomisión reconoce que los ‘riesgos de transición’ a una economía verde podrían ser tan perjudiciales para nuestro sistema financiero como las posibles manifestaciones físicas del cambio climático, y que actuar demasiado rápido y demasiado pronto podría generar tanta alteración como hacer muy poco y demasiado tarde», indicó Tarbert en un comunicado.
El informe sugiere que la crisis climática podría en última instancia convertirse en una crisis financiera.
«El cambio climático podría presentar riesgos sistémicos para el sistema financiero de Estados Unidos», aseveró el informe.
Eso podría ocurrir por medio de «fijar desordenadamente nuevos precios para los activos» que genere «efectos en cascada» sobre las carteras de inversión y los balances. Y esos impactos podrían amplificarse por el hecho de que el mundo empresarial de EE.UU. tiene montos récord de deuda, lo que podría dejar a algunas industrias vulnerables a un shock.
Otro riesgo es que el cambio climático provoque «conmociones subsistémicas», según el informe, que afecten a sectores y regiones geográficas específicas.
Otros reportes, fuera del gobierno federal, han advertido de manera similar sobre las nefastas consecuencias económicas del cambio climático.
En diciembre, Principles for Responsible Investment advirtió que el cambio climático, y las políticas diseñadas para combatirlo, podrían eliminar 2.300 millones de dólares de valor en las acciones globales.
El año pasado, investigadores de la Universidad de Stanford encontraron que el cambio climático empobrece a los países pobres y amplía la desigualdad global.
El subcomisión climática de la CFTC presentó 53 recomendaciones para enfrentar el riesgo climático, las cuales incluyen exigir a las empresas que revelen detalles sobre las emisiones de gases de efecto invernadero, realizar pruebas piloto de estrés climático y obligar a los bancos a abordar los riesgos financieros del cambio climático.
El informe también instó a los reguladores a incorporar los riesgos climáticos en sus mandatos, incluido el Consejo de Supervisión de Estabilidad Financiera, encargado de identificar las amenazas emergentes para la estabilidad financiera.
Pero la subcomisión climática de la CFTC enfatizó que el «paso más importante para gestionar el riesgo climático» es que Estados Unidos establezca un precio del carbono «justo, eficaz y en toda la economía». El objetivo sería orientar el capital hacia la energía limpia y garantizar que los mercados fijen los precios de manera adecuada ante las alteraciones causadas por el cambio climático.
Los legisladores y los líderes de la industria han debatido un precio sobre el carbono, como un impuesto al carbono, durante décadas. Incluso algunas grandes empresas de combustibles fósiles, como ExxonMobil, apoyan un impuesto de este tipo con la esperanza de aclarar el incierto panorama regulatorio.
«Los mercados financieros de hoy no están poniendo precio al riesgo climático. Los mercados financieros no pueden hacer eso por sí mismos», sostuvo Bob Litterman, presidente de la subcomisión de la CFTC, en el informe. «Hasta que se solucione esta falla fundamental, el capital fluirá en la dirección equivocada».
El informe pidió al Congreso que imponga un precio al carbono y cree otros incentivos apropiados para combatir la crisis climática.
«Sólo entonces el asombroso poder del sistema financiero podrá abordar a escala esta amenaza existencial», aseguró Litterman.
