La Fed prevé dejar la tasa en 0% al menos hasta 2022
Las principales acciones de Wall Street rebotaron este viernes en la apertura de las cotizaciones, tras el derrumbe del jueves, aunque luego experimentaron cierta volatilidad. El Dow Jones Industrial Average empezó subiendo 3%, pero luego recortó el alza a 0,6%, hasta los 25.287 puntos; el índice Standard & Poor’s 500 trepó 2,4%, pero luego cedió a 0,3%, hasta 3.008; y el Nasdaq creció 2,4%, pero luego descontó a 0,3%, hasta 9.522.
Después de oscilar en ambos sentidos en la apertura, también suben levemente las principales bolsas de Europa. El índice paneuropeo STOXX 600 crece 0,4%, recuperándose de su peor pérdida en un solo día desde el 23 de marzo en la sesión anterior. El índice Ibex español sube 0,2%, el francés CAC 40 0,6% y el alemán DAX 30 sube 0,1%.
En el Reino Unido, el índice de referencia FTSE 100 sube 0,1% y el índice de mediana capitalización centrado en el país, el FTMC, 0,9%. Los indicadores rompen una caída de cuatro sesiones consecutivas, pero igualmente estaban en camino de registrar su peor derrumbe semanal en unos tres meses. La preocupación por una segunda ola de infecciones en los Estados Unidos después de que se acelerara el ritmo de crecimiento de nuevos casos se sumó al sentimiento de cautela con la perspectiva de una rápida recuperación económica.
La Bolsa de Valores de Frankfurt, Alemania, el 12 de junio de 2020 (REUTERS/Kai Pfaffenbach)
“Basándose en la fuerte venta del jueves, los inversores van a ser mucho más cuidadosos ahora y están atentos a cómo se desarrolla la segunda ola de infecciones de coronavirus”, dijo Michael Baker, analista de mercado de ETX Capital.
El Cronista
La dinámica negativa en la que se había visto atrapada la renta variable local parecería haber llegado a su fin. O al menos, parece haber intercalado un respiro. Las acciones de las empresas locales rebotaban este viernes tras tres jornadas consecutivas de bruscos retrocesos , provocados por la decisión del Gobierno de intervenir la agroexportadora Vicentin , primero, y por el derrumbe de los mercados financieros internacionales , después.
En línea con las mejoras que exhibieron los mercados financieros de Nueva York, donde los índices de referencia trepaban hasta 0,8% tras haber hundido hasta casi 7% ayer, y de Europa, donde las mejoras llegaron hasta 0,5%, los papeles de las empresas argentinas volvían a operar con mejoras en el inicio de la última rueda de la semana.
En Wall Street, los anuncios locales trepaban 3% en promedio . Las acciones de las compañías argentinas avanzaban hasta el 8,4%, lideradas por los papeles del sector financiero. El Banco Supervielle encabezó las mejoras . Detrás, con un alza de 5,8%, se ubica el Banco Francés, mientras que con un aumento de 5,2% completa el podio de mejores rendimientos del Banco Macro.
La misma tendencia se encuentra en el inicio de la rueda en la plaza bursátil local . Sin embargo, a medida que los mercados externos fueron perdiendo impulso, la Bolsa porteña imitó esta desaceleración. De esta manera, el índice S&P Merval , que tuvo éxito la jornada con un alza superior al 4% , se mantuvo efectivamente neutro en 43.035 unidades, luego de despliegue grueso 7,35% en la ronda previa .
"Si bien hasta ahora no hubo novedades se espera que una nueva oferta oficial del mar presentado durante las próximas horas o más tarde el fin de semana", dijo la correduría Portfolio Personal Inversiones . "La idea central es que el Gobierno está dispuesto a mejorar y repetir el diseño original del canje , pero siempre respetando un aspecto esencial en la relación con la sostenibilidad de la deuda", agregó.
Agencias
Wall Street se hundió en su peor jornada en casi tres meses, en un mercado inquieto por la incertidumbre sobre economía y salud en Estados Unidos.
El Dow Jones Industrial Average se derrumbó 6,90% a 25.128,17 puntos, el Nasdaq perdió 5,27% a 9.492,43 unidades y el S&P 500 5,89% a 3.0002,10.
"Comenzamos la semana con un mercado sobrevaluado y una corrección era esperable", comentó Karl Haeling, responsable de estrategia de mercados de LBBW.
Desde su brusca caída de marzo luego del comienzo del azote de la pandemia de coronavirus en Estados Unidos, los índices neoyorquinos no pararon de avanzar, hasta 40%. El Nasdaq incluso cerró el miércoles en un récord, por encima del nivel simbólico de 10.000 puntos por primera vez en su historia.
Pero la decisión de la Reserva Federal (Fed, banco central de Estados Unidos) el miércoles de mantener sus tasas casi en cero y sus primeras estimaciones económicas desde el inicio de la pandemia, dieron razón a los inversores para un repliegue.
La Fed señaló que el camino a recorrer antes de una recuperación será largo y prevé una caída del PIB de 6,5% en 2020 en Estados Unidos.
"La Reserva Federal se equivoca tan seguido. (...) Tendremos un muy buen tercer trimestre, un excelente cuarto trimestre y uno de nuestros mejores años en 2021", dijo en Twitter el jueves el presidente Donald Trump.
La segunda razón de la caída del jueves, según Haeling, "es que el mercado decidió interesarse en el alza de los casos de contaminación con coronavirus fuera del noreste de Estados Unidos", indicó.
Cuando Estados Unidos cuenta con más de 113.000 muertos por la pandemia y más de dos millones de personas infectadas, en Texas y Carolina del Norte el número de enfermos hospitalizados aumentó sobre el mes pasado.
"Es difícil decir si eso representa un verdadero aumento del número de casos o si se debe al hecho de que fueron realizados más test", cuestionó Haeling.
Sin embargo, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dijo que Estados Unidos no cerrará su economía nuevamente en caso de una segunda ola de covid-19.
"No podemos cerrar la economía de nuevo. Creo que hemos aprendido que si uno cierra la economía está creando más daños", dijo Mnuchin a la cadena CNBC.
Las medidas de contención dispuestas por el gobierno federal y por los estados para detener la propagación del virus afectaron gravemente a la economía más grande del mundo, generando decenas de millones de despidos desde mediados de marzo y una tasa de desempleo del 13,3% en mayo, una cifra que recuerda a la Gran Depresión de hace 90 años.
La mayoría de las bolsas europeas abrieron con pérdidas al 3% al continuar con la toma de ganancias iniciada el martes y después de Wall Street perdiendo en la víspera el 1% tras la Reserva Federal ( Fed ) riesgos para la recuperación económica estadounidense , según datos del mercado.
En la apertura de hoy se destacaba la caída del 3,51% de Madrid, mientras que París bajaba el 2,88%; Fráncfort el 2,81%; Milán el 2,72%; Londres y el índice Euro Stoxx 50 el 2,61% y Zúrich el 1,96%.
Así, con esas sombras sobre la recuperación de la primera economía del mundo, el índice Dow Jones de Industriales cedió el 1,04% y el S&P 500 el 0,53%, mientras que el tecnológico Nasdaq subió el 0,67% y confirmó un nuevo máximo histórico.
Las bolsas europeas también abrían a la baja por la caída de los futuros sobre los índices estadounidenses, alrededor del 1,7% a esta hora.
Además, el precio del barril de petróleo Brent, la referencia en Europa, el 3,6% y se negoció a 40,25 dólares.
La cotización del euro descendió levemente y se situó en 1.135 dólares, mientras que el rendimiento de la deuda alemana a largo plazo bajaba hasta el -0,38%.
En el mercado de materias primas, el precio del crudo Brent -el de referencia en Europa- baja un 3,59%, hasta los 40,23 dólares, después de que hayan aumentado hasta niveles récord las reservas comerciales de crudo en Estados Unidos la semana pasada.
Financial Times
Jay Powell, presidente de la Reserva Federal, hizo un llamado de atención a los mercados de acciones. Su declaración, tras la reunión del comité de fijación de tasas de interés de la Fed, fue una fuerte respuesta a la idea de que el coronavirus y su impacto económico se resolvió rápidamente, y las empresas de EE.UU. podremos repuntar desde donde quedarán antes de que la cuarentena suspenda la actividad en grandes zonas del país. Presentó un diagnóstico con toda razón nefasto para la economía norteamericana.
Los empleados del banco central señalan que la economía estadounidense se contraerá un 6,5% este año, con una tasa de desempleo del 9,3%. Si bien fueron una grata sorpresa las cifras de empleo de la semana pasada que ocurrieron una baja de la desocupación, Powell dijo que sigue preocupado por el daño a largo plazo que sufrirá la economía: "Muchos millones de personas" no podrán volver a trabajar inmediato
A eso se sumó el mensaje sobre las tasas de interés. Powell indicó que el banco central no aumentará las tasas hasta al menos 2022. "No estamos pensando en subir las tasas. Ni siquiera estamos pensando en subir en las tasas", específicamente.
El intento de Powell de "normalizar" las tasas de interés al inicio de su mandato como presidente de la Reserva Federal fue dejado a un lado cuando la economía mundial comenzó a desacelerarse. El miércoles dijo que antes de que golpeara la pandemia, Estados Unidos tenía "el primer mercado laboral ajustado en un cuarto de siglo" y que eso empezaba a conducir hacia un crecimiento salarial para los grupos desfavorecidos. "Teníamos todas las expectativas puestas en que eso continuara, y luego sucedió ésto", señalaron, "y es desgarrador". Agregó que pesar el bajo nivel de desempleo anterior a la pandemia, la Reserva Federal venía viendo "movimientos casi invisibles en la infección" y la desocupación podría haber disminuido aún más.
El mensaje de Powell y las proyecciones de la Reserva Federal parecen haber investigado a los inversores: los mercados de valores cayeron ayer en cuanto abrió Wall Street. El extraordinario paquete de compras de activos y recortes de las tasas de interés ya lanzado para hacer frente a la crisis del coronavirus activado a impulsar los precios de las acciones. A principios de esta semana, el S&P 500 había recuperado todo lo perdido en el año.
Los inversores también parecen estar más preocupados por la posibilidad de una segunda ola de contagios. Varios estados de América están viendo un fuerte aumento de los casos diagnosticados desde que suavizan la cuarentena, entre ellos California, Florida, Georgia y Texas. Sin embargo, Steven Mnuchin, el secretario del Tesoro, descartó cualquier nueva medida de aislamiento, diciendo: "Hemos aprendido que si cierra la economía, lo que se crea es más daño".
Una posible segunda ola también presenta un problema para la Reserva Federal. En sus comentarios del miércoles, Powell puede descartar cualquier posibilidad de reducir las tasas de interés por debajo de cero. Eso deja la oportunidad de otra expansión monetaria o de control sobre la curva de rendimiento, donde el banco central interviene para mantener las tasas de interés a largo plazo en un nivel en particular, además de las tasas de interés a corto plazo que controla de manera directa.
Las advertencias de la Reserva Federal son acertadas, al igual que la decisión de mantener sin cambios las tasas de interés y comunicarlo con claridad a los mercados. Sin embargo, si fuera necesario, la Reserva Federal podría tener que encontrar alguna manera de hacer más, especialmente si el Covid-19 regresa en serio. En ese caso, la política fiscal también tendrá que dar un paso adelante. La Reserva Federal no ha dejado participar por la aparente caída del desempleo ni por el alza de los mercados. Estados Unidos solo puede esperar que su Congreso sea igual de claro.
El Cronista
JULIÁN YOSOVITCH
Al igual que en 2008, la Fed volvió al salir al rescate del mercado inyectando liquidez en el mercado y bajando fuertemente la tasa para así poder calmar la tensión y nerviosismo en el mercado financiero.
Además anuncio los paquetes de compra de bonos de grado de inversión así como también los bonos de alto rendimiento. Desde allí el mercado inició una clara recuperación sabiendo que detrás de las potenciales caídas del mercado iba a estar la Fed con un poder de fuego “ilimitado” para evitar que los activos financieros vuelvan a derrapar.
Esta cierta protección bajista de la Fed puede ser aprovechada en la bolsa local mediante los Cedear.
En este 2020 vimos una de las caídas en la bolsa más bruscas desde 1930 seguido de una de las recuperaciones más importantes de la historia. Hubo un antes y un después desde que la Fed anunciará que dispondrá de todo el capital y poder de fuego necesario para calmar los nervios en Wall Street.
Entre febrero y marzo pasado los índices bursátiles americanos derraparon entre un 30% y 35%, evidenciando una de las caídas mas rápidas de la historia de Wall Street . En el medio, la Fed trabajó fuertemente para calmar al mercado y las expectativas y desde finales de marzo las acciones despegaron. El Dow Jones y el selectivo s&p 500 subieron más de 44% y recuperaron el 70% de toda la ultima caída, mientras que el Nasdaq subió 35%, superando los máximos previos al inicio de la crisis.
Ayer mismo la Fed predijo un escenario difícil desde el punto de vista económico para los próximos años aunque a la vez resaltó que mantendrá intacta la política monetaria laxa, manteniendo las tasas de interés en niveles bajos hasta al menos 2022.
Martin Saud, senior Trader de Balanz considera que lo que ha demostrado la Fed en los últimos años es que la Reserva Federal están presente en el mercado como una especie de seguro contra la caída de los mercados.
“Últimamente, cada vez que hay una fuerte caída en los mercados, la Fed sale con un plan de liquidez y los vuelve a poner en tendencias positivas. En este sentido, si entendemos que este comportamiento de la Fed es lineal, sería algo para aprovechar, ya que pareciera que la baja estaría limitada; aunque también habrá que estar precavidos por si en un futuro la Fed cambia y deja de intervenir en escenarios de baja”, explicó.
Por su parte, Joaquín Bagues, estratega de Portfolio Personal Inversiones (PPI) también remarca que importante participación que tuvo la Reserva Federal en esta crisis, proporcionado liquidez masiva para calmar los mercados desde el estallido de COVID-19 en los Estados Unidos.
“En su anuncio de abril, la Fed dijo que podría inyectar u$s 2300 millones en la economía a través de varios programas, lo que resultaría en una inyección de liquidez total que excedería el rescate del 2008. La investigación académica descubrió que la liquidez es un factor relevante que afecta el rendimiento de las acciones. No obstante, si bien la liquidez es un elemento muy importante, no es la única variable a considerar. En un mundo de exceso de liquidez, y reflación de activos, la volatilidad en la renta variable se amplifica. Además, vale la pena recordar que las subas no son lineales por lo que hay que ser cautelosos a la hora de invertir”, dijo el estratega de PPI.
Desde el inicio de la crisis, el balance de la Reserva Federal aumentó a u$s 7,100 millones. La Fed sumó u$s 2.900 millones tan solo en los últimos tres meses. Esta clase de medidas fueron llevadas a cabo durante 2008 cuando la hoja de balance de la Reserva Federal creció 151%. A comienzo de 2020 se encontraba en u$s 4166 millones por lo que si la Fed replicase dicho crecimiento porcentual, la misma se dispararía por encima de los u$s 10.000 millones.
Nicolás Grandoso, portfolio mánager de Quinquela afirmó que los bancos centrales, y sobre todo la Reserva Federal, ejecutaron una plan expansivo muy agresivo para neutralizar la recesión provocada por el covid19 y la cuarentena global.
“Como aprendizaje de las crisis anteriores y en un contexto de baja inflación más fortaleza del dólar, el plan monetario se implementó rápidamente y en magnitudes nunca vistas. Si bien esto no fue suficiente para proteger a los sectores más afectados, si lo fue para ponerle un piso a los mercados a nivel general, viéndose beneficiadas sobre todo las grandes acciones tecnológicas del S&P y Nasdaq que recuperaron rápidamente los valores de pre-crisis”, dijo Grandoso.
Hacia adelante, el especialista agrega que esta expansión monetaria probablemente no sea gratis y en el mediano plazo puede debilitar al dólar si el mercado en su conjunto interpreta que las medidas, en combinación con un déficit fiscal creciente, fueron excesivas o mayores que las de otras economías desarrolladas.
Además, el especialista destaca que, en este escenario, las grandes acciones como Google, Facebook, Amazon y Apple (al igual que el oro) pasan a ser el nuevo refugio en un mundo reflacionario que motiva al inversor a estar expuesto a acciones con mucha generación de cash, o bien líderes en la frontera tecnológica, en lugar de poseer dólares o cualquier otra moneda que sufra la acción de los bancos centrales.
En este contexto de tasas bajas y en la que los bonos de grado de inversion rinden menos de 1% a un año, encontrar rendimientos en el mercado es todo un desafio. A ello hay que sumarle la cierta protección a la baja que otorga la Fed, lo que torna a las acciones americanas como un vehículo de inversión a considerar a mediano y largo plazo.
En la Argentina estas opciones pueden ser canalizadas a través de los Cedear, los cuales son certificados de acciones americanas cotizando en BYMA. De etsa manera, el inversor local puede invertir en acciones de primera línea como Coca Cola, Apple , Microsoft , Google , Amazon , etc.
Adrián Yarde Buller, economista jefe de Grupo SBS afirmó que los anuncios de la Fed confirman un escenario en el cual los enormes estímulos monetarios se sostienen durante un período prolongado, alentando un nuevo descenso de las tasas de interés reales y ve un escenario positivo para las acciones en Wall Street, las cuales podrían ser capturadas a través de los Cedears.
“El escenario de mayor estímulo monetario y descenso de tasas reales, sumado al pedido de mayores estímulos fiscales, representan en conjunto un catalizador interesante para la inversión en acciones norteamericanas a través de Cedear, ya que permite imaginar un escenario más favorable para las ganancias de las empresas y tasas de descuento aún menores”, dijo Yarde Buller.
Si bien los Cedear son un activo dolarizado, es decir, ofrece cobertura ante posible rally en el tipo de cambio, distintos analistas remarcan la necesidad de diversificar y de ser selectivo a la hora de invertir en esta clase de activos debido a que, en el fondo, no dejan de ser un activo de riesgo muy volátil como lo es típicamente una acción.
Martin Saud destaca que más allá de la cobertura a la baja que puede llegar a ofrecer la Reserva Federal a la hora de detener las grandes caídas en las acciones americanas, es de suma importancia de la selectividad a la hora de invertir en esta clase de activos.
"Hay que ser selectivo porque la Fed inyecta liquidez, pero después cada acción es un mundo y si bien los índices a la larga terminan yendo a sus niveles, si se elige la acción incorrecta se pierde igual por más que la Fed intervenga”, dijo Saud.
Finalmente, a la hora de detectar valor en los Cedear, Bagues señaló que los mismo permiten diversificar del riesgo argentino al involucrarse en la renta variable americana y al ritmo de las decisiones de política monetaria. Sin embargo, también advirtió que también hay que ser consciente, tomarse el trabajo de valuar la compañía y entender en que ciclo se encuentra el activo.