El 18,6% de los residuos sólidos generados en todo el país puede ser recuperado para su revalorización
LORELEY REQUEJO
Desde la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) saludaron la aprobación de la hoja de ruta hacia una economía circular en el sector industria. Enfatizaron, además, la necesidad de garantizar la sostenibilidad del sector.
“[Lo aprobado] está tomando en cuenta las recomendaciones de la industria para que no sea una traba para el desarrollo industrial, sino, por el contrario, que debe ser un mecanismo para impulsarlo”, comentó el presidente de la Comisión de Economía Circular de la SNI, Jesús Salazar, en conversación con este Diario.
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Asimismo, resaltó que el concepto de economía circular solo será “sostenible” si la sociedad civil, el Estado y el sector privado comprenden las implicancias de su implementación.
“Más que un tema de regulación, [la hoja de ruta] debía ser un tema de incentivar a la industria nacional a una reconversión a un modelo de economía circular”, expresó.
Como se recuerda, el Ministerio de la Producción (Produce) aprobó ayer dicha medida que busca promover la generación de soluciones sostenibles para el desarrollo productivo empresarial.
“Nuestra meta es contar, en un plazo de cinco años, con productos diseñados para tener mayor durabilidad, reutilización y reciclaje, o productos nuevos hechos con materiales de productos antiguos”, manifestó el viceministro de Mype e Industria, José Salardi.
Para tal fin, lo recientemente dispuesto cuenta con cuatro enfoques: producción industrial sostenible, consumo sostenible, aprovechamiento de material de descarte y gestión de residuos industriales, e innovación y financiamiento.
Como parte de los enfoques establecidos en la hoja de ruta, se especificaron distintas líneas de acción para cumplir los objetivos planteados.
Entre ellas resalta incentivar la producción industrial bajo una orientación de economía circular, la generación de hábitos de consumo sostenible en la ciudadanía y la promoción del aprovechamiento de material de descarte.
Mediante la aplicación de este modelo, se busca que las empresas reutilicen y compartan sus residuos. De esa forma, ayuda a reducir la generación de nuevos residuos, así como la extracción de materias primas para elaborar nuevos productos.
Además, su implementación busca eliminar la explotación intensiva de recursos, promover el uso de energías renovables y priorizar el diseño ecológico, que toma en cuenta los efectos ambientales de la producción.
De acuerdo con cifras del Minam, el 18,6% de los residuos sólidos generados en todo el país puede ser recuperado para su revalorización.
