El desarrollo del Gas Natural Licuado (GNL) va creciendo como una apuesta del uso de energías más limpias en Chile.
En entrevista con MundoMaritimo, el secretario regional ministerial (seremi) de Energía, Mauricio Henríquez, quien indicó que actualmente “como país estamos exportando gas natural de Argentina. Hay 25 compañías en Chile que mantienen contrato de suministro de GNL por el paso Vaca Muerta, esos contratos están vigentes y hemos trabajado con nuestros pares del país trasandino”.
De igual manera en Chile, tanto en la Bahía de Concepción se lleva adelante el desarrollo de dos proyectos gasíferos y se sumaría un tercero en la Bahía de San Vicente.
“Sin perjuicio de ello nuestra región también está desarrollando sus proyectos de terminales marítimos de GNL, como GNL Penco Lirquén y tenemos GNL Talcahuano que hace poco se aprobó su concesión marítima parte de la Comisión Regional de Uso del Borde Costero (Crubc) de la región del Biobío y muy pronto va a ingresar a estudio de impacto ambiental otro proyecto de GNL Huachipato (CAP Acero)”, recalcó.
Considerando estas perspectivas, Henríquez dijo que el desarrollo de este tipo de iniciativas permitiría a Biobío enviar abastecimiento de GNL al resto de Chile.
“Nuestra región en términos de gas natural va a seguir una estación muy estable, tanto desde Argentina como a través de sus propios puertos, lo que lo haría más independiente de su suministro de energía y de esa forma hacer posible – a futuro- suministrar gas hacia el resto del país”, enfatizó.
Consultado por la importancia de esos proyectos en la matriz energética, Henríquez resaltó que “es muy relevante, ya que estamos creciendo en materia de energías renovables no convencionales, en parques eólicos y solares, también incorporamos energía limpia a la que producen las termoeléctricas que funcionan a carbón. Es importante como una nueva fuente de energía, hoy el GNL es una de las más bajas desde el punto de vista energético, en la medida que vayan aumentando los terminales creemos que un 10% o 20% de nuestra matriz energética podría estar compuesta de gas natural”.
Dicha mirada va en sintonía con lo anunciado en su última Cuenta Pública por parte del Presidente de Chile, Sebastián Piñera, quien afirmó que se apunta hacia el desarrollo de un país carbono neutral, política medioambiental que justamente promueve el proyecto GNL Talcahuano.
Sin duda, de los tres proyectos que se impulsa en Biobío, el que registra mayores avances es el de GNL Talcahuano, ya que además de su concesión marítima dentro de sus hitos anteriormente recibió en julio de 2018, por parte del Ministerio de Energía la concesión para transporte de gas y cuenta con su aprobación ambiental. En ese sentido se proyecta que a fines de este año pueda iniciar obras, una vez que se apruebe su ingeniería de detalles.
Cabe mencionar que dicho proyecto contempla para el traslado del gas a Talcahuano el uso de buques GNL Carrier, que recalarán cada dos semanas en la bahía de Concepción conectándose con la balsa de su terminal isla, para posteriormente realizar el envío de GNL hacia un gasoducto submarino flexible que se conectará con el Gasoducto del Pacífico.
“El proyecto parte de la estimación, que van a arribar dos barcos mensuales, los que durante 24 horas permanecerán en el terminal”, indicó el gerente de Asuntos Públicos de GNL Talcahuano, Francisco Ibieta en entrevista que concedió a MundoMaritimo en julio pasado.
Mientras que en lo respecta a GNL Penco Lirquén en enero de 2017 sufrió un revés tras el fallo desfavorable de la Corte Suprema, en que el máximo tribunal le revocó su permiso ambiental. En ese contexto en agosto de 2018 se inició una nueva participación ciudadana y la empresa informó de cambios voluntarios a su proyecto.
En esa oportunidad se propuso como medida de mitigación modificar el punto de llegada a la costa del gasoducto submarino y un desplazamiento del trazado de las obras de construcción. Esta modificación considera que el nuevo punto de llegada a la costa se encuentra aproximadamente 30 metros hacia el sur y 30 metros hacia el oriente, con respecto al eje del trazado original del gasoducto.
Posteriormente en octubre del año pasado, la empresa de transporte marítimo noruega Höeg LNG –que debía proveer el buque para el proyecto –anunció la cancelación del arriendo, según informó el Diario El Financiero.
