La Cuenca Pérmica, situada entre Texas y Nuevo México, es el mayor campo de petróleo de EEUU. Según datos oficiales de la Agencia de la Energía (EIA por sus siglas en inglés) produce más de 2,6 millones de barriles al día, pero aún queda mucho crudo por extraer de joya petrolera.
Según un estudio de IHS Markit, la cuenca Pérmica aún tiene entre 60.000 y 70.000 millones de barriles de crudo que no han sido todavía extraídos, aún su producción se ha multiplicado por tres desde 2008. Con estos datos en la mano no es de extrañar que las petroleras se peleen por invertir en los campos de petróleo de esta región, según destacan desde la agencia Bloomberg.
Los llamados recursos recuperables de la región Pérmica serían suficientes para alimentar a cada refinería en Estados Unidos durante 12 años, mientras que el valor de mercado es de alrededor de 3,3 billones de dólares a precios actuales para el petróleo West Texas Intermediate, el crudo de referencia en EEUU.
Este campo de petróleo solo ya produce más crudo que las formaciones de Bakken e Eagle Ford juntas (o incluso más que toda Venezuela), un adelantamiento que se ha producido en medio del 'desmoronamiento' de los precios del petróleo, un crash que comenzó a mediados de 2014 y cuyos efectos aún colean. Desde junio de 2014 hasta hoy, Pérmica produce de media un millón más de barriles por día.
IHS ha pasado tres años estudiando los datos de producción de más de 440.000 pozos para calcular la cantidad de crudo que quedaba dentro de la formación rocosa, de 1,6 kilómetros de espesor, que bombea más petróleo que cualquier otro campo estadounidense. La estimación puede crecer a medida que los geólogos y científicos de IHS extiendan sus técnicas analíticas a zonas geológicas más profundas.
"La Cuenca Pérmica es la 'supercuenca' de EEUU en términos de su historia de producción de petróleo y gas y para los operadores presenta una gran variedad de objetivos que son rentables a los precios actuales del petróleo", asegura en un comunicado Prithiraj Chungkham, director de recursos no convencionales para IHS, recogido por Bloomberg.
La evaluación podría impulsar el argumento de Scott Sheffield, presidente de la junta de Pioneer Natural Resources, quien afirma que la región Pérmica es un yacimiento de 75.000 millones de barriles que puede competir con el gigantesco campo de Ghawar de Arabia Saudita.
En noviembre, el servicio geológico estadounidense estimó que sólo una capa de la formación Pérmica conocida como el Wolfcamp tiene 20.000 millones de barriles de crudo.
Estas ricas formaciones están apiladas en un espacio relativamente pequeño que convierten a esa zona en un 'caramelito' para las petroleras y perforadoras, que logran rentabilizar cada barril. El bombeo de petróleo en la Cuenca Pérmica se ha mantenido en crecimiento continuo durante los últimos años, a pesar de que los precios del petróleo cayeron por debajo de los 30 dólares el barril. El resto de regiones tuvieron que reducir su producción durante la parte más dura del temporal ante la complejidad de rentabilizar la extracción de crudo a unos precios tan bajos.
La composición de diferentes estratos con petróleo de esquisto permite extraer crudo de diferentes capas y zonas geológicas con un solo pozo. Esta región ha producido petróleo de forma estable durante décadas, pero ha sido la revolución del fracking (fracturación hidráulica) la que ha revitalizado la zona. Esto, junto con la capacidad local de refinación de crudo y la proximidad casual a las refinerías de la Costa del Golfo han hecho de la Cuenca Pérmica un lugar ideal para la extracción de oro negro y gas.
La técnica del fracking permite sacar petróleo de formaciones poco permeables. A grosso modo, esta técnica consiste en la perforación del suelo hasta alcanzar las capas rocosas que contienen el petróleo. Después se introduce en el pozo creado un conducto que producirá la fracturación hidráulica a través de la expulsión a presión de agua, arena y químicos. El agua a presión fractura las rocas, mientras que los granos de arena mantienen abiertas las fisuras de las rocas para que el crudo vaya fluyendo hacia el pozo.
"La excepcionalidad de Pérmica se ha manifestado después del colapso de los precios del petróleo a mediados de 2014. Al contrario que Bakken y Eagle Ford, la producción de petróleo siguió aumentando a pesar del descenso de pozos activos", destacan desde BBVA Reaserch.