Los pronósticos sobre el final de la era del crudo sobrevuelan los pozos petrolíferos desde hace décadas. El último informe de la británica BP pone fecha de caducidad a las reservas mundiales y asegura que en el año 2067 dejará de producirse petróleo.
Según los datos recopilados por la compañía, actualmente existen unas reservas de unos 1.687 billones de barriles que valdrían para cubrir la demanda de los próximos 53 años. Venezuela y Rusia son los que más asegurado tienen el suministro, aunque el avance del fracking en países como EEUU podrían cambiar el mapa geopolítico.
Aún así, el documento de BP subraya que no se tienen en cuenta los descubrimientos de nuevos yacimientos gracias a las mejoras tecnológicas que están desarrollando estas empresas. Solo en la última década y gracias a la investigación se han encontrado yacimientos que han aumentado las reservas un 27%.
A pesar del tirón de los coches híbridos y del desarrollo de los eléctricos, la creciente clase media de países emergentes como Brasil, China e India empujan el consumo de combustibles para vehículos. En el último medio siglo el consumo de petróleo se ha triplicado y solo en China se ha duplicado desde el año 2000.