SUINA CHAHUÁN *

El cambio climático es un tremendo desafío a nivel mundial, para Chile, no obstante, representa además una gran oportunidad. No sólo porque podemos proveer globalmente de minerales críticos como el cobre o el litio, fundamentales para la electromovilidad y la necesaria transición energética, sino que también por la posibilidad de constituirnos en este contexto, como un modelo para el desarrollo de una industria minera sostenible económica, medioambiental y socialmente.

Conocemos cuál es la potencia de nuestro país, pero debemos también hacernos cargo de las dificultades que enfrentamos para no perder esa oportunidad. En este sentido, al tiempo en que nos desplegamos como Gobierno en el avance de la agenda de descarbonización, la consolidación de la Estrategia Nacional del Litio y la mantención de nuestro liderazgo como principales productores mundiales de cobre, estamos también concentrados en promover la inversión minera revisando limitaciones que también se observan para la inversión general en virtud de la denominada "permisología".

El problema de la "permisología" no es nuevo, distintos gobiernos han hecho esfuerzos para abordar este desafío, sin embargo, ninguno lo había asumido hasta ahora de modo tan ambicioso.

El gobierno del Presidente Gabriel Boric ha relevado la importancia de avanzar en una senda de crecimiento económico cimentada en el aumento de la productividad y de la inversión. Para ello se han implementado diversas medidas en la agenda de productividad y pro-inversión, pero adicionalmente se está trabajando en el tema de los permisos de manera integral.

Primero, el Ministerio de Economía está afanado en una reforma estructural a los permisos sectoriales – no ambientales – que espera ingresar a fines de este año al Congreso, y que proponer regular y crear un sistema para agilizar y disminuir los plazos de tramitación de permisos sectoriales. Iniciativa que es ampliamente apreciada por el sector privado.

Segundo, desde la cartera de Medioambiente se avanza en la modernización de la Ley N°19.300, que busca perfeccionar el sistema ambiental mediante modificaciones al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, entre otras materias.

Tercero, y para el caso especial del sector minero, como parte del protocolo de acuerdo que Hacienda firmó luego de la aprobación de la ley de royalty minero, se acordó constituir una mesa técnica para adoptar medidas dirigidas a reducir en un 30% los tiempos de tramitación de los permisos en la industria, sin que ello afecte el cumplimiento de la normativa ambiental u otras normas. Iniciativa que resulta relevante si consideramos que la cartera de proyectos mineros para el periodo 2022-2031 contempla 53 proyectos que suman US$ 73.655 millones.

Asimismo, interministerialmente se están impulsando diversas iniciativas para modernizar el Estado y agilizar los sistemas de permisos que existen en Chile. Esto requiere de transversalidad política, apoyo desde los distintos sectores en el Congreso para lograr una meta que es transversal.

Todas estas reformas se están construyendo en colaboración entre el sector público y privado, conociendo los inconvenientes que tienen los inversionistas y modificando el sistema en función de los requerimientos. Hoy el Estado no tiene cómo saber qué le duele al inversionista y el inversionista por su parte, no tiene cómo reconocer las dificultades que tiene el Estado si no se comparte esa información y se hace un trabajo en común.

Agilizar los procesos no sólo van en beneficio de la gran minería, pues también se están introduciendo cambios para la pequeña y mediana, tal como lo anunciara el Presidente Boric en la cena anual de Sonami, instancia en la que informó la instrucción de modificar el Decreto Supremo N°30 para cambiar los requisitos de elaboración de los Proyectos de Exploración y Cierre (PEC), con el fin de que los productores de menos de mil toneladas mensuales sólo tengan que presentar los datos relevantes del proyecto de la faena y un plan de seguridad, y, de esta forma, impulsar el inicio de nuevas iniciativas de menor escala.

Asimismo, se buscará habilitar una plataforma única de tramitación de solicitudes para la pequeña minería que integre y simplifique los procesos de Sernageomin y Enami para los pequeños proyectos mineros.

Hoy queremos cambiar de forma estructural el sistema para que funcione y se agilicen las inversiones y como Gobierno estamos avanzando proactivamente porque tenemos la convicción de que un Estado fuerte es también un Estado más eficiente. 

* Subsecretaria de Minería de Chile