DAMIÁN DI PACE * 

Para que las pymes crezcan es importante darle volumen de producción en su intervención en la cadena de valor en diferentes rubros de la economía. Argentina tiene en tres sectores claves de la economía, como el campo, la industria automotriz y servicios de la economía del conocimiento, un gran flujo exportador generador de divisas con gran participación de las pymes.

Uno de los sectores aún con enorme potencial en Argentina es el sector de la minería, que este gobierno a través de la gestión del ministro Sergio Massa y de la secretaria de Energía, Flavia Royón, está intentando proyectar a futuro.

La gran estrella de los minerales de Argentina hoy es el Litio, que va a tener un papel fundamental en la transición hacia matrices energéticas limpias sustituyendo combustibles fósiles. Argentina posee el 21% de las reservas mundiales de litio y, junto con Chile y Bolivia, concentran el 67 % de las reservas del planeta.

De acuerdo a datos de Abeceb, el sector minero supo tener más de 1.200 pymes dedicadas a la explotación de minerales no metalíferos, rocas de aplicación y piedras semipreciosas.

La potencialidad de crecimiento depende de varios factores, entre ellos:

+ Accesos a financiamiento a tasas competitivas.

+ Disponibilidad de Garantías para acceso a crédito.

+ Desarrollar una banca de inversión y no comercial como la actual que pueda evaluar y entender las especificidades del sector.

+ Costos laborales.

+ Desarrollo de mercados (investigación y desarrollo).

+ Costos de logística. Diseño de transporte multimodal.

Si tomamos como parámetro un proyecto para la extracción de cobre, la participación de pymes es enorme y su nivel de densidad y crecimiento también le permiten saltar con su desarrollo a otros sectores de la economía por la experiencia y trabajo desarrollado en el sector minero.

La exploración, minado, servicios técnicos, molienda, flotación, relaves y dique, más servicios de soporte de operación y administración, requieren de la participación de pymes pertenecientes a casi 100 subsectores de nuestra economía con el impacto en la producción y empleo que esto implica.

En la década de 1990, Estados Unidos era el mayor productor de litio, en marcado contraste con el presente representando más de un tercio de la producción mundial de litio en 1995. A partir de entonces y hasta 2010, Chile asumió el cargo de mayor productor con un auge de la producción en el Salar de Atacama, uno de los depósitos de salmuera de litio más ricos del mundo.

La producción mundial de litio superó las 100.000 toneladas por primera vez en 2021, cuadruplicándose desde 2010. Además, aproximadamente el 90% provino de solo tres países. Argentina tiene un potencial enorme aunque a un requiere aún de sentar bases firmes a nivel legislativo y previsibilidad para las inversiones en el sector.

Solo el yacimiento de litio de Catamarca abarca unas 35.000 hectáreas por lo que es uno de los depósitos de salmuera de litio más grandes y de mayor grado del mundo. A su vez, en esa misma provincia se ubica una de las grandes promesas de minería metalífera del país, el Proyecto MARA, de cobre, molibdeno, oro y plata, que se encuentra en etapa de exploración avanzada. Catamarca fue la única provincia desde donde se produjo cobre durante 20 años, en la mina Bajo de la Alumbrera, y ahora está en camino de volver a hacerlo.

Ahora, el Proyecto MARA planea integrar el yacimiento Agua Rica con la infraestructura que quedó de Alumbrera, que terminó su operación en el 2018. Esta integración reduciría en un gran porcentaje la huella ambiental del emprendimiento y reviviría una infraestructura que hoy se encuentra bajo cuidado y mantenimiento. Solo en el caso de ese proyecto que excede a la producción de litio, se estima hoy una inversión de más de US$ 3.000 millones y más de US$ 1.500 millones de exportaciones anuales durante, al menos, 28 años.

Solo con este proyecto, uno de los 25 más importantes del mundo, Argentina volvería a formar parte de la mesa mundial del cobre, el llamado mineral verde por su extrema necesidad para la transición energética. Y como MARA, son varios los proyectos de cobre que podrían desarrollarse en nuestro país dentro de esta década.

De acuerdo a la Secretaría de Energía, cuenta con un potencial de inversiones en explotaciones mineras de litio de US$ 6.473 millones. El horizonte de producción es de 373,5 mil toneladas adicionales a la capacidad actual de 37,5 mil toneladas por año.

La demanda de litio hoy se focaliza en las baterías recargables. En 2010, la cerámica y el vidrio representaron la mayor parte del consumo de litio con un 31% del total. En cerámica y cristalería, el carbonato de litio aumenta la resistencia y reduce la expansión térmica, que a menudo es esencial para las placas de cocción vitrocerámicas modernas.

El litio también se utiliza para fabricar grasas lubricantes para las industrias del transporte, el acero y la aviación, junto con otros usos menos conocidos. La colada continua se trata de un proceso metalúrgico que permite el control continuo de la transformación del metal líquido a alta temperatura a sólido para la obtención de productos semi-terminados, como hilos cilindros tubos perfiles rectangulares secciones especiales.

A medida que el mundo produce más baterías y vehículos eléctricos, se prevé que la demanda de litio alcance 1,5 millones de toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE) para 2025 y más de 3 millones de toneladas para 2030.

Para lograr el desarrollo del sector minero en general aún falta mucho trabajo y política pública por delante para generar los incentivos necesarios para avanzar en este camino. Con la misma cordillera en forma compartida, en 2021, Chile exportó por US$ 58.700 millones.

En el caso de Perú, lo hizo en US$ 29.100 millones y Australia en US$ 318.000 millones, un poquito menos que la deuda externa argentina. Sin embargo, nuestro país en ese mismo año exportó minerales por sólo US$ 3.300 millones, 9 veces menos que Perú; 18 veces menos que Chile, y 97 veces menos que Australia. Sin embargo, todavía estamos debatiendo el cómo y el cuándo.

En 2021, la actividad minera aportó le aportó al Estado US$ 100.000 millones. Es el segundo mayor aportante de divisas junto al agro y la tecnología. De acuerdo a datos de Abeceb, Argentina es la segunda reserva mundial de litio y cuarto productor internacional, tiene potencial para ubicarse en los 10 principales productores de cobre.

En el caso del oro en 2021 fue la principal exportación minera. Dos de las 25 mayores minas del mundo se encuentran en Argentina. En el caso de la plata es el décimo productor mundial.

Desde la asunción de Massa se proyecta para el sector triplicar exportaciones a US$ 12.000 millones en los próximos 10 años con un potencial de inversiones por US$ 20.000 millones. Hoy, a lo largo y ancho de nuestro país, hay sólo 13 yacimientos en producción, 18 en construcción y 95 en construcción y exploración avanzada. Las pymes están a la espera.

* Analista Económico, conferencista, consultor de empresas, periodista, investigador y escritor