Días después del fenómeno astronómico, se adjudicarán las ofertas de esta breve pseudo-compulsa concretada para cubrir una cartelización
Rubén Etcheverry*
Luego de un sinnúmero de anuncios, amagues, idas y vueltas, finalmente se formalizó la convocatoria a concurso de precios del Plan Gas.Ar. Con la publicación de la Resolución 317/2020, la Secretaría de Energía de la Nación lanzó el llamado a subasta de un cupo de 70 millones de m3 diarios de gas natural de las distintas cuencas y por cuatro años, con un sistema que premia con prioridad y mayor volumen a las productoras que oferten el precio más bajo.
Con un esquema muy similar a los programas anteriores de promoción de la producción de gas natural y las mismas empresas intervinientes, se lograron menores precios (pre-acordados) en gran medida debido a los aprendizajes de los planes precursores (sobre todo en conocimiento de Vaca Muerta), menores tasas de interés a nivel internacional, menores costos de extracción en dólares debido a la enorme devaluación y una oferta flat a lo largo de todo el año.
Previo a lanzar el plan, el gobierno debió reunirse y acordar con el grupo Techint a quienes imputa públicamente de haber obtenido precios excesivos con Macri. Hoy, puertas adentro celebra que el clan Rocca haya comprometido una inversión de us$ 1.400 millones en el Plan Gas.Ar a través de Tecpetrol en Fortín de Piedra.
Resultan curiosos los plazos y los resultados. Luego de casi un año de preparativos, en un tiempo récord de menos de un mes se desarrolló el proceso licitatorio, desde la publicación del Decreto 892/20 del 16 de noviembre que lanza el “Plan de Promoción de la Producción del Gas Natural Argentino”, donde se licita el 2 diciembre la convocatoria y hasta la fecha que se prevé la adjudicación el 15 de diciembre. Al decir de Fantino: ¡Pará, pará pará..! ¡¿Vos me estás diciendo que todo ese proceso de comprometer cientos de millones de dólares se hizo sin ninguna impugnación, ningún pedido de prórroga, nada de nada, y se logró en sólo en 13 días?! Milagros de la burocracia acordada. Para todo aquel que trabajó en una gestión pública sabe que esto es casi imposible sin un arreglo previo. Mucho menos en los promedios de los tiempos de gestión de la actual administración.
Al menos no alcanzó al nivel de bochorno del proceso de Chevron-YPF en Loma Campana cuando símil “Volver al Futuro” el fiscal de Estado de la provincia de Neuquén el día 23 de julio de 2013 presta conformidad al Acuerdo que “suscribieron el ministro de Energía de Neuquén con el apoderado de YPF el día 24 de julio”.
En cuanto a los resultados: se lograron los objetivos. Funcionó a corto plazo, pero no hubo ofertas adicionales para el período de mayor consumo. Resta resolver el grave problema del abastecimiento del invierno. Revés para el gobierno según algunos especialistas y medios, y se piensa ya en lanzar un segundo plan gas para el invierno.
Según Ian Fleming una vez es casualidad. Dos veces es coincidencia. Tres veces es acción enemiga. No hubo volúmenes ni precios ofertados muy diferentes de los prefijados por el gobierno. Precios algo menores: 3,66 y 3,65 us$/MMBTU propusieron los mayores productores sobre un máximo de 3,70 y un volumen total ofertado de 70,5 millones de m3. Y pareciera cumplirse con una ley del calor de hogar: “Cuando más próxima la relación con el gobierno, mejores precios logran las empresas”: YPF, Tecpetrol, Pampa, PAE. “Y todas las empresas que se presentaron, van a poder colocar su producción”. Pareciera un acuerdo de antemano que debía ser plasmado mediante este dibujo.
Estados Unidos se cuida de no acordar con la Opec por las graves consecuencias que podrían acarrearle cartelizar la oferta mundial de crudo. Aquí, promovidos por el regulador se estrecharon las manos no sólo la oferta, sino también la demanda de gas natural. Hubiera resultado interesante y sano conocer y obtener las mejores propuestas fruto de una real competencia.
¿Se expedirá la Autoridad Nacional de la Competencia al respecto? Cuando este proceso parece darse de bruces con el artículo primero de la ley 27.442 (Ley Defensa de la Competencia): “Están prohibidos los acuerdos entre competidores, los actos o conductas, de cualquier forma manifestados, relacionados con la producción e intercambio de bienes o servicios, que tengan por objeto o efecto limitar, restringir, falsear o distorsionar la competencia o el acceso al mercado, de modo que pueda resultar perjuicio para el interés económico general” y todo el resto de su contenido.
Hoy 15 de diciembre, un día después del fenómeno astronómico, se adjudicarán las ofertas de esta breve pseudo-compulsa concretada para cubrir una cartelización. Un plan prometedor, que genera profusas expectativas, eclipsado por las formas.
*Ingeniero. Exsecretario de energía de Neuquén. Coordinador Energía & Ambiente, equipos técnicos de Cambiemos Neuquén.