Petróleo profundo
El País
Juan Oribe Stemmer
Afines del 2007 Brasil descubrió el yacimiento petrolífero de Tupi, en su plataforma continental, a unos 300 kilómetros al sudeste de Río de Janeiro. Sus reservas potenciales son de aproximadamente 8 - 5 billones de barriles. El primer petróleo de este yacimiento fue extraído el 28 de octubre de 2010.
Desde entonces se han hallado otros yacimientos submarinos en las cuencas de Santos y de Campos, incluyendo los de Carioca, Guará y Júpiter. Estos nuevos campos petroleros producen un hidrocarburo más liviano que puede ser procesado con mayor facilidad y que tiene una gran demanda.
Los yacimientos se encuentran a miles de metros debajo de la superficie del Atlántico, y, una vez alcanzado el fondo marino, a miles de metros dentro del subsuelo de la plataforma continental. Tomará tiempo, mucho capital y mucha tecnología convertir esas reservas potenciales en realidades. Pero, aunque por ahora la producción sea relativamente escasa, los descubrimientos cambiaron el escenario económico del Atlántico sudamericano y, también, su escenario estratégico.
A pocos años de haber firmado la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, Brasil estableció el "Plan de levantamiento de la plataforma continental brasileña" (Leplac) y un programa de gobierno (en 1989) con el propósito de definir jurídicamente el límite de su plataforma, mar afuera de las 200 millas. Ello en conformidad con el artículo 76 de la Convención. Los estudios se realizaron conjuntamente por Petrobras y la Armada, y fueron coordinados por la Comisión Interministerial para los Recursos del Mar.
El resultado fue la propuesta de límite exterior de la plataforma continental brasileña, presentada en el año 2004 a la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de ONU. Brasil fue el segundo país en iniciar ese procedimiento (el primero fue Rusia). Luego de prolongados estudios e intercambios de ideas, el 4 de abril de 2007, la Comisión aprobó un conjunto de recomendaciones que reconocían parcialmente los reclamos brasileños.
Brasil se enfrentó con un dilema. Una opción era aceptar las observaciones de la Comisión y declarar un límite exterior menor al que había propuesto en el 2004. La otra, era elaborar una nueva presentación. Este fue el camino tomado. Actualmente se está elaborando una nueva propuesta que será presentada en el 2012.
Entretanto, en agosto del año pasado, la Comisión para los Recursos del Mar resolvió que, independientemente de que aún no se haya establecido definitivamente el límite exterior de la plataforma, Brasil tiene el derecho de aprobar (avaliar) previamente los pedidos de autorización para realizar estudios en su plataforma continental, mar afuera de las 200 millas, y teniendo como base la propuesta de límite exterior presentada a la Comisión de Límites de la Plataforma Continental en el año 2004.
Así, el Brasil, como Estado costero, ha dado un paso trascendental para tutelar sus legítimos intereses y derechos en la plataforma continental adyacente a su litoral oceánico y ha fijado un precedente que merece ser tenido en cuenta.