LA ENERGÍA, EL TALÓN DE AQUILES DEL MUNDO
Karin Ebensperger
Abastecimiento debe ser abordado con criterio estratégico y como causa nacional.
Las crecientes tensiones que la energía y sus costos están causando entre las grandes potencias, sirven para recalcar la urgencia de llegar cuanto antes a un acuerdo en Chile, que permita planificar esta materia. El abastecimiento energético en todos los países desarrollados es analizado con criterio estratégico: es una causa nacional, pues incide no sólo en la economía, sino en la soberanía, el medioambiente y la seguridad.
La energía es el talón de Aquiles del modelo de desarrollo europeo. El último capítulo es que Rusia aumentó las tarifas de suministro de gas a Ucrania, como represalia por el distanciamiento político de Kiev frente a Moscú. El gobierno ucraniano se opuso y Rusia amenazó con cortar el gas, creando gran alarma en Europa: el gasoducto que abastece de gas a Ucrania es el mismo que sigue rumbo al resto del continente, donde Alemania es el principal comprador de gas ruso.
Pero Alemania se adelantó: hace tiempo impulsa un modelo que combina tipos de energía tradicionales y renovables como eólica, biomasa, incluso se estudian nuevas plantas agrícolas para lograr energía con ciertos vegetales. Aún el costo es alto, porque es energía muy subsidiada. Alemania calendarizó el cierre de sus centrales atómicas de aquí al 2022. Pero hay discusión sobre una prórroga, pues se está produciendo un cuello de botella agravado por el riesgo del abastecimiento ruso. Sin embargo, el modelo renovable en sí no está en discusión. Incluso EE.UU. se está sumando a la tendencia, para no depender tanto de zonas conflictivas como Medio Oriente: California inició un programa de colectores solares y molinos de viento de última generación.
Chile es un país muy vulnerable en materia energética, lo que incide en todos los aspectos de la vida nacional, y pesa en la relación con los países vecinos. Por eso el proyecto Endesa de instalar represas en ríos de la Patagonia debiera motivar un debate nacional para dar a conocer las tecnologías y soluciones aplicadas en otros países, las alternativas posibles, y el impacto medioambiental medido en forma técnica y no política. Y en esa discusión hay que considerar que la energía hidráulica es renovable y limpia, aunque con un costo ecológico en su construcción. Por eso es una discusión emblemática: implica definir criterios sobre desarrollo y su nexo con el ecosistema, ambos claves para el futuro. La energía es uno de los desafíos más cruciales que enfrenta el país.
