IAPG ENCABEZADOPAN AMERICAN ENERGY (CABECERA
WEGTGN
SECCO ENCABEZADOALEPH ENERGY ENCABEZADO
PRELASTKNIGHT PIÉSOLD ENCABEZADO
SACDE ENCABEZADOINFA ENCABEZADO
RUCAPANELMETSO CABECERA
Induser ENCABEZADOSAXUM ENGINEERED SOLUTIONS ENCABEZADO
GSB CABECERA ROTATIVOFERMA ENCABEZADO
METROGAS monoxidoMilicic ENCABEZADO
PIPE GROUP ENCABEZADGRUPO LEIVA
cgc encabezadoGenneia ENCABEZADO
PWC ENCABEZADO ENER
WIRING ENCABEZADOWICHI TOLEDO ENCABEZADO
CRISTIAN COACH ENCABEZADOCINTER ENCABEZADO
NATURGY (GAS NATURAL FENOSA) encabezado
OMBU CONFECATSERVICIOS VIALES ENCABEZADO ENER
Tensión Mundial
COREA DEL NORTE Y SU PROGRAMA NUCLEAR
21/09/2005
Tensión Mundial

COREA DEL NORTE Y SU PROGRAMA NUCLEAR

Diario La Nación, Buenos Aires
Editorial Diario La Nación
COREA DEL NORTE Y SU PROGRAMA NUCLEAR

En forma casi simultánea con el reconocimiento del propio secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, del rotundo fracaso de la reciente cumbre de la ONU en materia de no proliferación nuclear porque -según sus propias palabras- se trata de "la amenaza más alarmante que enfrentamos en el futuro inmediato, atento al peligro de que esas armas sean obtenidas por terroristas", desde Pekín llegan muy buenas noticias.

En efecto, pasados tres años desde que Corea del Norte expulsó a los inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica y luego de dos años de negociaciones, las conversaciones entre los seis países -los Estados Unidos, Corea del Sur, Corea del Norte, China, que ejerce la coordinación, Rusia y Japón- integrantes de la mesa de diálogo sobre el programa nuclear de Corea de Norte llegaron, en su cuarta rueda de negociaciones, a un trascendental acuerdo. Este es un éxito de todos quienes, ante la insistencia china, apostaron a la viabilidad de la alternativa diplomática, esto es, la de las negociaciones pacíficas.

El comunicado oficial subraya que Corea del Norte se ha comprometido expresamente a abandonar todas sus armas nucleares y a desmantelar sus actuales programas nucleares. También a regresar al régimen del Tratado de No Proliferación Nuclear y a las salvaguardias específicas de la Agencia Internacional de Energía Atómica.

Ciertamente, una excelente noticia para la paz y la seguridad internacionales, que hasta podría llegar a ejercer positiva influencia sobre la cuestión similar que la comunidad internacional mantiene abierta con Irán. Siempre y cuando, claro está, este anuncio optimista -no obstante, George W. Bush lo recibió con cierta reticencia- se llegase a concretar en los hechos.

Los norteamericanos, por su parte, afirmaron que no tienen armas nucleares en Corea del Sur y que tampoco están animados por la intención de atacar a Corea del Norte. Corea del Sur, a su vez, reafirmó su compromiso de no recibir ni desplegar armas nucleares en su territorio.

Así, de manera amable y diplomática, se ha logrado revivir la Declaración de Desnuclearización de la Península de Corea, de 1992, esperando que de aquí en adelante sea puesta en práctica y respetada por todas las partes interesadas.

Japón y Corea del Norte convinieron, asimismo, en comenzar a normalizar su complicada relación bilateral.

Esa reunión debe continuar a comienzos de noviembre próximo. En su agenda aguarda tratamiento la negociación de los términos y condiciones del suministro de un reactor de agua liviana a Corea del Norte, que ha supeditado su renuncia a que se le facilitase el acceso a esa tecnología y a otras modalidades del empleo pacífico de la energía nuclear. De acuerdo con las manifestaciones de los expertos más escépticos, tras esa demanda se oculta el hecho de que Corea del Norte accedió al acuerdo porque necesita paliar su notorio déficit de energía con suma urgencia y, además, requiere cooperación económica y ayuda energética que le permitan salir de la grave crisis en que está sumida. Esa interpretación, salta a la vista, hace hincapié en que Corea del Norte, pese a padecer el acoso del hambre, catástrofes naturales y las consecuencias de decisiones políticas y económicas erróneas, es uno de los interlocutores más veleidosos del mundo y suele cambiar de opinión con alarmante frecuencia.

Además, en las reuniones venideras se aspira a estructurar un régimen permanente de paz para toda la península coreana. Requisito indispensable, porque la Guerra de Corea, que tuvo lugar en el siglo XX, durante la década del 50, aún no ha concluido formalmente.

En tanto información pura, sin entrar en indagaciones hondas o en prevenciones justificadas por numerosos tropiezos previos, aquel principio de acuerdo induce a reconciliarnos con la esperanza de que el género humano esté reingresando en el campo de la sensatez. Pruebas a la vista: representantes de países que hasta no hace mucho eran irreconciliables ahora han llegado a un acuerdo para, aunque más no fuere en parte, aventar el riesgo de una confrontación nuclear que, sin duda, sería terminal para la mayor parte de los seres humanos.

Vuelva a HOME

;