DANIEL BOSQUE*
Fue un sábado intenso para petroleros y mineros de la Argentina. MIentras millones se lamentaban del fiasco de la selección con Islandia, el team gubernamental preparaba su anuncio – sorpresa: La salida de Juan José Aranguren, quien llegó como un ícono del sector, y de Francisco Cabrera, de lo más selecto del riñón de Cambiemos, revolvió las redes y llenó de inquietud el corto plazo.
¿Pero usted se quedará hasta el final? Le preguntaban hace poco al ex Shell viejos conocidos del oil&gas en el road show del IAPG en Houston. La respuesta ha superado cualquier promesa y el empresario - ministro vuelve al llano tras dos años agotadores, signados por tensiones de las empresas acerca de la renta del Estado y privada, y del contexto macro que devino de los ajustes tarifarios y el precio de la energía en la Argentina
Si Mauricio Macri buscaba un cambio de escenario, la designación del movedizo y ascendente Javier Iguacel aparenta tener todos los condimentos: no parece petrolero, a pesar de sus curriculum en YPF y Pluspetrol. y más bien se presenta como un tecnócrata que cobró brillo en Vialidad Nacional, tanto por los planes carreteros que desplegó el macrismo, como por las denuncias de los desaguisados de la familia Kirchner y su club de la construcción en los cuales descollaban obras carísimas y otras pagadas y no ejecutadas, como las del encarcelado Lázaro Baéz
Iguacel tendrá un corset, el que le deja Aranguren, a quien cada vez le costaba más respetar el catecismo del libre mercado y el camino hacia la internacionalización de precios al compás de los problemas de la economía argentina, como se vio en el último pulso con las petroleras cuando la aplicación del impuesto llevó a la ultima remarcación de combustibles en los surtidores.
Mientras se van conociendo los próximos colaboradores del flamante ministro, queda el balance de dos años ásperos en los que cambiaron radicalmente las reglas de juego y los usos y costumbres que había instalado el hoy presidiario Julio de Vido. Los planes de Aranguren y su elenco han sido ambiciosos : RenoVar, sinceramiento de tarifas, Vaca Muerta, estrategia de precios. La gran pregunta es cómo evolucionará todo esto a luz de las dificultades del país que han permanecido ocultas y hoy han salido del armario con todo furor.
Con Aranguren se va una marca que duró muy poco, la del MINEM. El ahora Ministerio de Energía ya no entenderá en la cuestión minera, la que volvió a pasar a otra cartera.
La minería pierde en figuración pero probablemente se sienta más cómoda bajo el éjido de Dante Sica, quién ya la rigió durante el gobierno de Eduardo Duhalde a principios de siglo. Su consultora, Abeced, tiene entre sus clientes a la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) para la cual ha elaborado numerosos informes que sustentaron las líneas argumentales de la actividad en temas espinosos como cepo cambiario, promoción de inversiones, regalías y retenciones a la actividad
A izquierda y derecha de estos datos micros está la dificultosa andadura de la Argentina y la necesidad imperiosa de Cambiemos de mutar de clima y sujetar las riendas de un corcel desbocado. En pocos días terminará el Mundial de Fútbol y la puja distributiva y la política volverán a enseñorearse en la vida del país que se pregunta quién, cómo y con qué rumbo gobernará después de 2019.
*Director Mining Press y EnerNews
Julio villalonga*
EL DESGASTE DE ARANGUREN ERA NOTORIO PERO SU SUCESOR TIENE UNA TAREA DIFÍCIL: RENEGOCIAR CON LAS PETROLERAS TRAS LA DEVALUACIÓN. LO DE CABRERA ES EN BÚSQUEDA DE OXÍGENO.
El presidente Mauricio Macri es reacio a hacer cambios en sus equipos: esta característica de su personalidad ya fue exhibida, salvando las distancias, en la conducción de Boca y en los ocho años de gobierno en la Ciudad. En la Nación no ha sido distinto, por lo que la reorganización de su gabinete es un tema traumático derivado de una crisis que aún no declina y que amenaza derrumbar cualquier posibilidad de continuidad en 2019.
No obstante, cada caso es distinto: Javier Iguacel reemplaza a Juan José Aranguren en Energía porque el ministro saliente estaba muy desgastado, y se avecina una dura negociación con las petroleras para moderar el impacto de la devaluación del peso en las tarifas.
Lo de Dante Sica en Producción, en lugar de Francisco Cabrera, es una búsqueda de contener a los sectores industriales y mejorar el vínculo con algunos sectores del peronismo, aunque lo primero tiene más posibilidades de concretarse que lo segundo.
En la visión de Macri, nadie había logrado aportar más a la reducción del déficit fiscal que Aranguren a través de los aumentos de tarifas, los que paralelamente generaron los mayores ruidos políticos, tanto dentro de Cambiemos -con "Lilita" Carrió- como en la oposición, por el enorme costo social que tuvieron y el impacto en los sectores más vulnerables.
En cuanto a la llegada de inversiones privadas, las que se concretaron con las licitaciones de energía eólica y por los desembolsos que se hicieron en Vaca Muerta, no están exentas de controversias: en las primeras, varios grupos de orígen chino se quedaron con la mayor parte de los proyectos pero ahora reclaman certeza sobre el horizonte tarifario. Y Vaca Muerte es el futuro energético del país pero para eso habrá que esperar hasta 2021.
Iguacel, que dispuso de un enorme presupuesto en Vialidad Nacional, cuyas obras publicitaba diariamente en su cuenta de Twitter, será el encargado de darle malas noticias a la industria petrolera, de la cual proviene ya que trabajó en YPF y en Pluspetrol.
Los aumentos de los precios mayoristas del gas está establecido en dólares y el último ajuste se dio cuando esa divisa estaba a 20,50 pesos. La devaluación llevó al peso por encima de los 28 pesos y en la Casa Rosada descartan una difícil negociación con los privados para demorar el ritmo de los aumentos.
Sica, por su parte, es economista y contador público, fue secretario de Industria, Comercio y Minería durante el interinato presidencial de Eduardo Duhalde y es director de la consultora Abeceb, que asesora a empresas e instituciones nacionales e internacionales en temas de gestión empresaria, análisis económico y políticas públicas.
Su consultora emitió en las últimas semanas dos informes que evalúan el reciente acuerdo que el Gobierno cerró con el FMI.
En primer lugar, consideran "muy bueno" el crédito "stand-by" otorgado por el Fondo, "sobre todo por el monto de la asistencia obtenida, que superó todas las expectativas del mercado".
Pero, por otro lado, advierten que "habrá que ver cuál es el nivel de tipo de cambio al que se converge", luego de retirarse la oferta permanente de dólares que venía sosteniendo el Banco Central. El viernes tuvo una primera respuesta: el dólar cerró a más de 29 pesos, lo que encendió de nuevo las alarmas del Gobierno y aceleró los cambios en el gabinete.
En cuanto a las metas de inflación, Abeceb dice que "es una buena noticia no haber vuelto atrás a un esquema de control de los agregados monetarios", pero advierte que "el hecho de haber establecido nuevamente una meta puntual en lugar de un rango-meta es una apuesta osada ya que se corre el riesgo de que un desvío respecto de la meta puntual termine impactando negativamente sobre las expectativas y la credibilidad del BCRA, que ya viene deteriorada".
Claro que una cosa es la relativa independencia con la que se mira la actividad económica y la actividad del gobierno desde una consultora, y otra la obligada alineación que exige integrar una Administración. En líneas generales, Sica adhiere al gobierno macrista porque, de lo contrario, no hubiera aceptado la designación.
Como ministro de Producción deberá enfrentar los reclamos de los industriales que se dividen entre los exportadores -grandes beneficiarios de la devaluación los que pagan en pesos acá y venden en dólares afuera- y los otros, que importan en dólares y deben pagar sueldos e insumos en pesos. No la tiene nada fácil.
* Director de gacetamercantil.com