JAVIER MÁRQUEZ SÁNCHEZ
Aerolíneas y cadenas hoteleras podrían ser el objetivo de las próximas inversiones de Berkshire Hathaway, la firma capitaneada por Warren Buffett. Según apunta 'The Wall Street Journal', el multimillonario podría estar preparando la entrada en diversas compañías del sector turismo y ocio que han quedado especialmente dañadas por la pandemia mundial del COVID-19, convirtiéndose una vez más en el inversor más potente de la escena internacional.
Con 128.000 millones de dólares en efectivo sobre la mesa esperando a ser 'movidos', Berkshire podría aumentar así su participación en las aerolíneas American, Delta, United y Southwest Airlines, así como en varias compañías de cruceros. La cadena de hoteles Marriott o el fabricante de aviones Boeing son otras de las firmas que, según Business Insider, podrían recibir un refuerzo económico por parte del veterano inversor.
A lo largo de su dilatada trayectoria en Wall Street, Warren Buffett ha demostrado en sobradas ocasiones su buen olfato y capacidad para actuar en el momento adecuado; ser conocido como 'el Oráculo de Omaha' no es en vano. Pero el que ha sido durante muchos años el hombre más rico del mundo (ahora el cuarto, según la lista Forbes, con 74.700 millones de dólares), no es un tiburón más de las finanzas.
Sus inversiones se perfilan en muchas ocasiones con un doble objetivo: ganar dinero, sí, pero también apoyar a compañías cuya supervivencia considera importante, bien por su función directa bien por su relevancia en el tablero económico de Estados Unidos.
Así, en 2008 y 2009, durante los peores días de la última crisis financiera, Berkshire Hathaway invirtió miles de millones de dólares en firmas como General Electric y Goldman Sachs Group, y adquirió el 100% de Burlington Northern Santa Fe Corp, compañía ferroviaria que se precipitaba a la quiebra.
Más conocida aún, por otro lado, es la entrada de Buffett en 1973 en el capital de The Washington Post, periódico que por aquellos días afrontaba una peligrosa zozobra ante los duros ataques que despertaron sus investigaciones sobre los papeles del Pentágono -referentes a la guerra de Vietnam-, y el caso Watergate, que concluyó con la dimisión del presidente Nixon. El respaldo de Buffett a la propietaria del Post, Katherine Graham, permitió que ambas investigaciones pudiesen desarrollarse con solvencia, convirtiendo al diario en un referente del periodismo de investigación.
Todo indica que Buffett podría actuar una vez más como en aquellas ocasiones, aunque manteniendo siempre la debida prudencia. En el citado artículo del Journal, Charlie Munger, vicepresidente de Berkshire Hathaway y socio histórico de Buffett, explica que "Warren quiere que Berkshire se mantenga como una opción segura para aquellas personas que tienen el 90% de su patrimonio invertido ahí. Siempre vamos a estar en la orilla tranquila. Eso no significa que no podamos hacer algo bastante agresivo o aprovechar alguna oportunidad. Pero básicamente seremos bastante conservadores. Y emergeremos muy fuertes al otro lado del tifón".
Warren Buffett tenía cinco años cuando le escucharon decir por primera vez que quería hacerse rico. Y desde luego se lo tomó muy en serio. Tenía sólo 11 años cuando compró sus primeras acciones -tres para su hermana Doris y tres para él- por 38 dólares cada una. Durante algún tiempo la compañía cayó hasta los 27 dólares, pero Buffett aguantó estoico y pronto volvió a subir hasta los 40 dólares. Warren y Doris vendieron entonces esas participaciones.
Nacido en Omaha, Nebraska, el 20 de agosto de 1930, hijo de un corredor de bolsa, Warren Buffett demostró desde muy joven tener un talento innato para los negocios y las inversiones, tal vez porque él mismo se ha impuesto siempre una serie de reglas que le han ayudado a sufrir pocas decepciones. De ahí, por ejemplo, que haya apostado sin problemas por Coca-Cola pero jamás por una empresa informática: "No invierto en lo que no comprendo", afirmó en una ocasión.
El niño que quería ser rico se reafirmaba con trece años al asegurar que ganaría su primer millón antes de los 30 "o saltaré del edificio más alto de Omaha". Por aquel entonces se hizo con su primer empleo, por 175 dólares al mes, como repartidor de ejemplares del Washington Post (diario del que llegaría a poseer el 19% del accionariado algunas décadas más tarde).
Con 17 años, compró junto a un amigo una máquina usada de pinball y decidieron ponerla en una barbería. La iniciativa les dio tan buen resultado que no tardaron en tener varias de estas máquinas recreativas repartidas por distintos negocios de la ciudad.
Buffett proseguía a pesar de todo repartiendo periódicos, con lo que había podido ahorrar ya 5.000 dólares, cantidad que rondaba los 10.000 en 1949. En la Universidad de Columbia conoció al destacado analista Ben Graham, que se convertiría en su mentor. Fue él quien convenció a un Buffett de 21 años de no poner rumbo a Wall Street, al menos hasta haber obtenido más experiencia.
Y el joven se lo tomó en serio: volvió a Omaha, se convirtió en corredor de bolsa y en 1956 fundó Buffett Associates Ltd. Comenzaron entonces las inversiones en todo tipo de proyectos y la creación de otras empresas. Tardó un año más de lo previsto: Warren Buffett ganó su primer millón a los 31 años gracias a una compañía que fabricaba molinos de viento.
The Motley Fool
James Brumley
Es ciertamente difícil de hacer mientras la pandemia de coronavirus todavía está en su apogeo. Pero los inversores deberían considerar esta turbulencia de la misma manera que el legendario inversor Warren Buffett considera todos los tropiezos del mercado como una oportunidad.
Eso no sugiere que el Oráculo de Omaha comprará ninguna acción simplemente porque ha sido derrotada, por supuesto. Sigue creyendo en la idea de que solo debe invertir en negocios que entienda, y que debe elegir empresas con las que se sienta cómodo manteniendo a largo plazo. Esa es una función de la administración tanto como lo es el modelo de negocio.
Y, por supuesto, Berkshire Hathaway 's ( NYSE: BRK.A ) ( NYSE: BRK.B ) semi-retirado jefe sigue recomendando las acciones de compra que están verdaderamente infravaloradas en lugar de las poblaciones que no son más baratos de lo que eran hace unas pocas semanas.
Con eso como telón de fondo, aquí hay tres empresas que actualmente no están en la cartera de Berkshire Hathaway, pero que parecen pertenecer allí, según las reglas básicas de selección de valores de Buffett. Incluso si no está comprando, otros inversores que buscan agregar algunas nuevas participaciones pueden considerar alguna o todas estas compañías.
Sí, el corte de cable está afectando lentamente el negocio de la televisión por cable, y Comcast ( NASDAQ: CMCSA ) es posiblemente la potencia en ese espacio cada vez más reducido. No es el tipo de negocio "construido para durar" que Buffett prefiere.
La televisión por cable, sin embargo, es en realidad uno de los segmentos comerciales menos importantes de la organización. El año pasado, el cable solo representó un poco más de una quinta parte de sus ingresos totales. Las subsidiarias NBC y Universal proporcionaron casi un tercio de sus ingresos, y su subsidiaria británica de telecomunicaciones, Sky UK, contribuyó con casi un quinto de su línea superior. El servicio de Internet era aproximadamente otra quinta parte de su negocio. Si bien la industria de la televisión por cable puede estar muriendo lentamente, está muriendo porque los consumidores están eligiendo opciones de transmisión de video que requieren conexiones de banda ancha de alta velocidad, que solo Comcast y algunos de sus pares pueden proporcionar.
En otras palabras, Internet es ahora lo que era el teléfono hace un par de décadas. La gente no va a renunciar.Y Comcast se está adaptando. Dirigida por el inteligente CEO Brian Roberts, la compañía se está sumergiendo en las mismas aguas de transmisión de video que fluyen contra la televisión por cable. En julio, lanzará por completo un servicio de transmisión llamado Peacock que ofrece acceso a una cantidad sustancial de contenido de las bibliotecas Universal y NBC, muchas de las cuales no estarán disponibles a través de ninguna otra plataforma. (A la luz de la pandemia, Comcast lanzó previamente Peacock para sus clientes de cable la semana pasada, aunque sin la programación original que había planeado). Tener el control tanto del medio como de los medios posiciona a Comcast para un control significativo dentro del negocio de entretenimiento televisivo, que a su vez le da poder de fijación de precios.
FUENTE DE DATOS: THOMSON REUTERS / REFINITIV. GRÁFICO POR AUTOR.
Buffett ha tenido un momento particularmente difícil con su posición en Kraft Heinz ( NASDAQ: KHC ) , que ahora ha bajado un 70% desde su máximo en febrero de 2017. Además de los desafíos de costos y precios que enfrentó en común con la mayoría de las empresas de alimentos envasados, Kraft Heinz experimentó un cambio de CEO el año pasado que condujo a algunos cambios radicales en sus estrategias comerciales.
Sin embargo, el negocio de alimentos en sí no es el culpable. Es cómo se han gestionado estas empresas, o quizás mal administradas, en el pasado lo que ha hecho que muchas de ellas sean tan problemáticas ahora. Kraft Heinz, por ejemplo, podría haber sufrido más que beneficiado por la participación de 3G Capital en el acuerdo que convirtió a la compañía en lo que es hoy.
Sin embargo, Tyson Foods ( NYSE: TSN ) ha logrado evitar los problemas que parecen obstaculizar a los rivales. Los ingresos han crecido de manera confiable (aunque lentamente) en porcentajes de un solo dígito durante la mayor parte de los últimos años, y los analistas anticipan que continuará en el futuro previsible. El crecimiento de los ingresos ha sido (y debería seguir siendo) casi tan consistente.
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¿Tyson Foods es aburrido? Absolutamente. Pero ese es el punto. La empresa tiene poco crecimiento, pero los productos básicos de consumo (y especialmente los alimentos) son perpetuamente comercializables. El dividendo constante, que actualmente rinde 2,63%, tampoco es demasiado malo.
Finalmente, agregue Tractor Supply Company ( NASDAQ: TSCO ) a su lista de nombres que a Buffett probablemente no le importaría tener en su cartera a largo plazo.
Es un minorista tradicional de ladrillo y mortero durante un período que se ha denominado apocalipsis minorista, pero es diferente de la mayoría de sus pares de una manera significativa. Tractor Supply, como su nombre lo indica, sirve en gran medida a agricultores, jardineros y aficionados al bricolaje.
Ese es un mercado que no lo abandonará pronto. Si bien estos compradores podrían encontrar gran parte de lo que Tractor Supply vende en sitios de comercio electrónico como Amazon , el crecimiento constante de las ventas de Tractor Supply sugiere que sus clientes principales prefieren comprar esos suministros en persona. Además, gran parte de su inventario es demasiado voluminoso, pesado o frágil para venderse y enviarse en línea de manera fácil o económica.
De hecho, una vez que finalizan los cierres de negocios necesarios para la pandemia, muchos consumidores pueden comenzar a comprar artículos que los ayudarán a ser más autosuficientes durante la próxima crisis, sea lo que sea. Eso juega directamente en la mano que Tractor Supply está sosteniendo. Y aquellos que aún no quieren aventurarse apreciarán el hecho de que todas las tiendas de Tractor Supply ahora ofrecen entregas el mismo día.
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Buffett probablemente también sea fanático del equipo de gestión del minorista. Hal Lawton solo se convirtió en CEO a principios de este año. Es un ex chico de Macy , que no es necesariamente una experiencia relevante. Pero también es un ex ejecutivo de Home Depot y eBay. Está bastante claro que tiene una buena comprensión del consumismo moderno y cómo se pueden abordar varios desafíos.
