Barrick Gold aseguró que las puertas de sus operaciones están abiertas para quien desee ir y comprobar la calidad del agua en sus operaciones y la realidad de los ríos de los alrededores, “en vista de la avalancha de desinformación” en torno a la calidad del agua en sus instalaciones y en los recursos de Cotuí.
“Siempre hemos tenido una política de puertas abiertas para cualquier persona que quiera ingresar a la mina, visitar las fuentes de agua dentro y fuera de la operación, y conocer la planta de tratamiento de aguas de la empresa y todo el trabajo de remediación que hemos hecho desde el inicio de las operaciones”, indicó en un comunicado.
La minera insiste en asegurar que “hay mucha desinformación sobre las condiciones de los ríos en la operación y en la mina debido al pasado oscuro que por muchos años caracterizó la minería en el país”.
“Esas viejas prácticas quedaron en el pasado”, reiteró, y afirmó que desde el inicio de sus operaciones Barrick ha invertido para garantizar la calidad del agua.
Precisó que la empresa realiza un monitoreo “continuo y diario de la calidad del agua tratada” y cuenta con el Monitoreo Ambiental Participativo, que durante el 2021 fue realizado junto con el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), quienes toman muestra de aguas, las analizan y aseguran su cumplimiento, según informó Minería y Desarrollo.
“Los resultados de las 39 muestras tomadas en 2021 confirman que el agua monitoreada es apta para uso en el riego de agricultura, ganadería, entre otros usos, de acuerdo con las normas nacionales. Asimismo, se confirmó que los niveles de ruido alrededor de la empresa minera están muy por debajo de los límites máximos establecidos por la normativa para los sectores residencial e industrial”, aseguró en el comunicado.
La explotación minera que realiza Barrick Pueblo Viejo en Cotuí, provincia Sánchez Ramírez, cumple con los criterios de protección del agua, y los parámetros permitidos para el trato del aire y el sonido, según certificó el Servicio Analítico de Estudios Ambientales del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec).
Durante un recorrido de monitoreo, el cual es el número 41, con profesionales de estudios ambientales de Intec y de Barrick, se hicieron pruebas al río Maguaca, próximo a donde conecta con el arroyo Vuelta, los cuales cruzan por la mina de sur a norte.
Los expertos del Intec estuvieron coordinados por el ingeniero industrial Alfredo Vicioso y Adriana Roja, encargada del Servicio Analíticos de Estudios ambientales y del Sistema de Gestión de Calidad del centro de estudio.
Por Barrick participó un equipo de técnicos a cargo de Adalberto Quezada, quienes tomaron las muestras del agua en conjunto, pero para analizar por separado, según dijeron. El proceso se realizó en compañía de periodistas y dirigentes comunitarios que viven en el distrito municipal Zambrana en la zona de Pueblo Viejo, donde está localizada la mina.
En el lugar se tomaron muestras para estudiar el el PH, niveles de turbidez, de metales disueltos o sustancias químicas en el agua y su temperatura. Además los niveles de sal y oxígeno disueltos entre otros componentes, informó el diario El Nacional de República Dominicana.
Al concluir la toma de muestras en el río Maguaca, el cual, según se informó, ya tiene peces, además en sus alrededores se observaron cultivos de cacao y plátano. Acto seguido la comitiva abordó un autobús siguiendo de manera estricta los protocolos de seguridad con cascos protectores y chalecos de seguridad.
Se desplazaron a la parte este de la mina y en ese lugar visitaron la zona de descarga donde Barrick deposita en el río Margajita las aguas que han sido tratadas, donde los profesionales del Intec y los técnicos del laboratorio ALS de monitoreo de Barrick tomaron muestras para analizar los niveles de PH, conectividad, oxígeno disuelto, salinidad, conductividad, temperatura del agua, para comprobar que cumpla con las normas establecidas, según las disposiciones del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Pero en caso que se compruebe que el agua liberada no está cumpliendo con los procedimientos establecidos de inmediato se suspende el proceso, según confirmó Adalberto Quezada, de Barrick.
Concluida la toma de muestra en este lugar la delegación se trasladó a la parte oeste de la mina donde se concentran la mayores operaciones de vehículos de cargas transportando materiales a los depósitos para el proceso de extraer oro y otros metales. En el lugar se tomaron muestras para analizar la calidad del aire y los decibeles de sonido utilizando un sonómetro.
Una vez en el lugar, en medio de un sol radiante a la 1:10 de la tarde, los expertos activaron sus equipos y tardaron 30 minutos hasta que pudieron tomar las muestras ambientales como indican las normas.