Pampa Energía y Total Austral cerraron convenios para exportar gas natural desde la cuenca neuquina a empresas de generación de energía eléctrica de Chile.

Pampa Energía acordó  1.500.000 m3/d de gas natural entre el 1 de octubre de 2021 y el 1 de mayo 2022 a  Colbun para la generación de energía eléctrica en la región centro de Chile.

El acuerdo de exportación establece que no podrá excederse de los 380.000.000 m3/d de gas natural durante el plazo de vigencia del contrato. Se fijó un precio de venta promedio para todo el periodo de U$D 4,370 por MMBtu, menos los derechos de exportación que resulten aplicables a la fecha.

El recurso gasífero será extraído de las áreas Río Neuquén, actualmente operada por YPF  en la cual Pampa Energía tiene una participación del 33.07%; Sierra Chata que es operada por el grupo empresario de Marcelo Mindlin; y el yacimiento El Mangrullo propiedad de los municipios de Plaza Huincul y Cutral Co y operado el 100% por Pampa Energía.

 Total Austral solicitó un permiso de exportación por 500.000 m3/d de gas natural proveniente de las áreas San Roque, Aguada Pichana Este, Aguada Pichana Oeste y Rincón La Ceniza para la misma ventana de tiempo (octubre 2021/mayo 2022).

El destino del gas producido en las áreas No Convencionales de la provincia del Neuquén será utilizado por ENEL Generación Chile  para abastecer parte de las 20 unidades de generación térmica que operan a gas, carbón o petroleo. La empresa chilena entrega energía al sistema interconectado nacional del vecino país y tiene una capacidad de generación térmica de 2.454 Mw

El gas natural a exportar no proviene del Programa de Estímulos a las Inversiones aprobado por la Resolución Nº 46, lo que significa que las moléculas extraídas por Total Austral no deberán ser computadas como parte de la producción incluida en dicha norma.

Los contratos fueron armados en forma privada y deberán pasar por la aprobación de la autoridad de aplicación para que, en octubre, el país retome la senda exportadora. La ventana de oportunidades que se abre bajo la modalidad de contrato en firme permite a la industria trabajar variables más allá del mercado local, reconstruir la confianza con empresas energética de los países limítrofes y generar divisas en un momento económico difícil para el país.