El diputado socialista Rubén Giustiniani rechazó ayer el pedido de YPF de una audiencia y la solicitud de mantener bajo confidencialidad algunos puntos del contrato que hace tres años la estatizada petrolera firmó con Chevron para la explotación conjunta de Loma Campana (un área del megayacimiento neuquino Vaca Muerta), y que la Corte Suprema ordenó en noviembre último que la empresa haga público, entregando una copia al legislador por Santa Fe.
A través de un escrito de 29 páginas presentado el viernes, los abogados de Giustiniani no aceptaron la decisión de la jueza Cristina Carrión de Lorenzo, de correr el traslado de la nota presentada por YPF. Con otro documento más extenso, también se opusieron a la petición de audiencia y reforzaron los criterios por los que la demanda esgrime que "el juicio ya está terminado y que el fallo de la Corte está firme y es claro en su resolución de que la compañía debe entregar un duplicado del contrato completo".
"Están dilatando el cumplimiento de la Justicia y desde el principio no lo cumplieron porque la propia YPF en el escrito que presentó en el juzgado junto con el contrato, reconoce que no entregó una copia completa del mismo y que hubo partes que tachó", explicó el diputado a El Cronista. "Acá no es un problema de Rubén Giustiniani; hay un fallo de la Corte que considera que el documento debe ser público, que pertenece a una empresa que es sostenida con fondos públicos", disparó el santafesino, enojado, en respuesta a las declaraciones que el todavía presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, formuló al diario La Nación. Galuccio insistió con el argumento de que el documento debe ser privado.
El punto de conflicto revela una cuestión de interpretaciones. En YPF entienden que la ley de acceso a la información pública, en la que se amparó la demanda y que suscribió la Corte, contempla algunas excepciones para cuestiones técnicas, y que incluyen secretos comerciales y financieros.
La jueza tiene ahora tres días para responder a la presentación hecha por el diputado.