Sólo funciona al 15% la fábrica de Lugo.Las otras tres permanecen inactivas.Señalan la competencia desleal de Argentina e Indonesia.
La crisis despluma a la gallina de los huevos de oro. Los sectores aupados en épocas de bonanza caen derrotados como castillos de naipes. De la crisis no se salvan ni las energías renovables: los biocarburantes sucumben a la desbandada. Las plantas gallegas de biodiésel se crearon entre mediados de 2008 y principios de 2009, cuando todavía no se le veían demasiado las orejas al lobo. Pero ahora se encuentran prácticamente paralizadas, “por culpa de la competencia desleal de Argentina e Indonesia, y por el retraso en la aprobación del Real Decreto que regularía la entrada del biodiésel extranjero y potenciaría el nacional”.
La situación resulta desoladora en nuestra comunidad autónoma, al igual que en el resto de España. Galicia cuenta con cuatro plantas de biodiésel: Infinita Renovables (Ferrol) con capacidad de producción de 300.000 toneladas, Energía Gallega Alternativa (Cerceda) con 40.000 toneladas, Entabán Biocombustibles (Ferrol) con 200.000 y Biocarburantes de Galicia (Begonte, Lugo) con 35.000. Las tres primeras llevan más de un año totalmente paralizadas. Entabán no produce absolutamente nada desde mediados de 2010. Infinita permanece desactivada desde finales del pasado mes de febrero.
Únicamente la planta de Begonte funciona a un 15% de su capacidad.
En verano de 2008, la administración autonómica se frotaba las manos ante la perspectiva de que Galicia produjese el 50% del biodiésel en Galicia. Ese año se inauguraron las plantas de Entabán, Egal y Biocarburantes de Galicia. La de Infinita Renovables empezó a producir en 2009. ¿Por qué su actividad no ha durado más de dos años? Todos coinciden en denunciar “la competencia desleal de países que exportan a España el biodiésel a precios bajísimos mientras el Gobierno central no hace nada por remediarlo”. La solución a esta encrucijada se vislumbraba en el Real Decreto de Especificaciones Técnicas de los Carburantes, prometido por el Gobierno central desde hace dos años para proteger la producción española. Pero el Ministerio de Industria mantiene paralizada su aprobación. “Creemos que no le dará luz verde antes de las elecciones, y si gana el PP habrá que reiniciar otra vez el proceso”, indican las productoras.
En el panorama de cierre absoluto en las plantas gallegas, Begonte destaca como caso aparte. Actualmente se encuentra a una producción del 15%. “Abrimos en 2008, los primeros de Galicia, con unas perspectivas buenísimas de funcionar al 100% … pero ahora sólo sobrevivimos gracias a la diversificación”, indica el director de planta, Luis Rodrigo Poch. Biocarburantes de Galicia mantiene su actividad “gracias a la distribución al por mayor de gasóleo A y mezclas, somos una operadora de hidrocarburos al por mayor, si no fuera así estaríamos perdidos”.
Al igual que los otros directivos de las empresas españolas, aglutinadas en la Asociación de Productores de Energías Renovables (Appa), Luis Rodrigo Poch atribuye el descenso de producción “a las importaciones desleales de Argentina, Indonesia, Malasia”. Pero también a un incremento “desmesurado” en los precios del aceite como base del biodiésel. La planta ferrolana de Entabán se inauguró “aprovechando el boom”, como reconoce la asesora jurídica de la empresa, Pilar Lorén. Permanece paralizada desde mediados de 2010. Como recuerda Lorén, “en el primer trimestre de 2010 se frenó el dumping de EEUU pero después llegó el de Argentina y Malasia, España es un coladero del biodiésel”.
Pese a la apuesta política de la UE por las energías renovables, con subvenciones millonarias, “al final las plantas y sus puestos de trabajo se han ido a pique”. Las instalaciones de Begonte necesitaron 3 millones de euros para su ejecución y crearon 20 puestos de trabajo. “No sufrimos un ERE, somos más pequeños que las otras empresas gallegas y tenemos mayor margen de maniobra”, afirma su director. Pero si operasen al 100% de su capacidad, tendrían trabajo para tres turnos. Desde 2008, “pocas han sido las ganancias, vivimos al límite y gracias a nuestra diversificación”. Entabán necesito una inversión superior a los 40 millones de euros para su planta de Ferrol. Ahora quedan trabajando cinco personas de las 40 contratadas inicialmente, tras un ERE.
Cuando Infinita Renovables echó a rodar en Ferrol, “llegamos a producir un 60% de nuestra capacidad”. David Acea, director de Mercados de la empresa, indica que “el parón se ha producido como consecuencia de la competencia desleal del biodiésel argentino e indonesio, sumada a la falta de medidas que nos permitan a los españoles competir en igualdad de condiciones”. La aprobación del Real Decreto permitiría que el 50% del biodiésel que se consuma en España sea fabricado dentro de la Unión Europea, con las consecuentes facilidades para las empresas españolas. Además, el biodiésel se lleva obligatoriamente un 7% del consumo de combustibles en nuestro país. Si se aplicase la Orden ministerial, las empresas españolas no darían abasto incluso funcionando al 100% y habría que seguir recurriendo a la importación (o a la creación de nuevas fábricas).
En el caso de Infinita Renovables, tanto la planta de Ferrol como la de Castellón se encuentran paralizadas “a la espera de que el Gobierno apruebe el decreto para competir en igualdad de condiciones”. David Acea recalca que desde el inicio de la actividad “las dos plantas han producido más de 300.000 toneladas anuales”. Pero ahora se han visto obligadas a la suspensión temporal de sus 100 puestos de trabajo. Algunos productores hablan de “presiones” por parte del Gobierno de Cristina Kirchner a José Luis Rodríguez Zapatero: si España sigue adelante con la Orden se tomarían “represalias” en Sudamérica contra grandes empresas como Repsol. Pilar Lorén, asesora jurídica de Entabán, define gráficamente esta situación: “Somos como David contra Goliath”.
La asociación Appa habla de “chantaje”
La Asociación de Productores de Energías Renovables (Appa) afirma tajantemente que “Zapatero cede al chantaje argentino, al mantener paralizada la aprobación de la Orden contra las importaciones desleales de biodiésel”. Según Alfonso Abuín, presidente de Appa, “que Argentina se atreva a amenazar al Gobierno español es indignante, pero aún lo es más que Zapatero bloquee la norma impulsada desde Industria”.
De las 49 plantas españolas, 34 están ‘out’
La industria española invirtió 1.400 millones de euros en crear 49 plantas de biodiésel, con más de 6.000 empleos entre directos e indirectos. Actualmente, 34 plantas se encuentran paralizadas “y el resto funcionan al ralentí”. La grave crisis en el sector ha causado en los últimos cuatro años “la pérdida de casi 3.000 puestos de trabajo directos, así como una merma acumulada de facturación de 1.800 millones de euros”.
“Presiones” recibidas desde América
Según los productores de biodiésel, el Gobierno de Zapatero ha recibido “muchas presiones por parte de Argentina”. Todo queda en manos de las elecciones: España elige el 20 de noviembre a su futuro presidente, pero Argentina también hará lo mismo el 23 de octubre. Kirchner ha pedido retrasar las negociaciones con España para después de las elecciones: si gana, saldría adelante el real decreto. Pero antes de la cita con las urnas, la hasta ahora presidenta no quiere arriesgarse a perder votantes.
Ante todo, las empresas españolas piden “protección gubernamental a nuestra fabricación, después ya competiremos en precios”. Entabán puntúa que “en otros países apoyan la producción propia, la esperada Orden ministerial ayudaría a controlar nuestras cuotas de mercado, el Gobierno español debe mirar por lo suyo”.
Como insiste David Acea, el director de Mercados de Infinita Renovables, “la inmediata entrada en vigor de la Orden sería imprescindible para evitar el cierre definitivo de un sector que ya tiene parado el 85% de su capacidad de producción”. Este porcentaje equivale a 4,3 millones de toneladas de biodiésel.
SITUACIÓN EN ESPAÑA
50% Dominio de Argentina Según la Asociación de Productores de Energías Renovables (Appa), Argentina domina el 50% del mercado Español de biodiésel.
1.400 Millones de euros invertidos en el sector El sector invirtió 1.400 millones de euros en sus plantas españolas, con subvenciones de las administraciones. Con la Orden, podrían facturar 7.000 millones el próximo cuatrienio.
4.000 Empleos directos en juego Appa recalca que “están en juego 4.000 empleos directos y el sector ya tiene completamente parado en España el 85% de su capacidad total instalada”.
David Acea director Mercados de Infinita Renovables
“Países como Argentina o Indonesia nos están hundiendo, nosotros no podemos competir si no se regula el sector”.