A pocos días de finalizar el año, Murilo Ferreira, presidente ejecutivo de la minera Vale, dijo en una entrevista a Valor que espera un 2013 menos volátil, con los precios del mineral de hierro entre u$s 110 y u$s 140 por tonelada, en un ambiente de crecimiento más vigoroso de China, a tasas de entre 8% y 8,5%.
A pesar del escenario “más benigno”, Ferreira no ve razones para que Vale abandone “la política de austeridad” adoptada en los últimos meses.
“El superciclo (de commodities) terminó y nuestra filosofía es que no vamos a generar más excedentes financieros tan generosos en un futuro próximo”, advirtió.
Vale continuará cortando activos no estratégicos y buscando socios para nuevos negocios con el objetivo de reducir gastos y garantizar la caja para seguir adelante con sus proyectos, afirmó.
En las próximas semanas, la compañía anunciará la venta de dos activos de petróleo y gas. En total, son 19 bloques exploratorios en cuatro cuencas petrolíferas de Brasil desde 2008. En enero, dará a conocer el nombre de los socios financieros y estratégicos de Valor de Logística Integrada - VLI, de logística, que reúne algunos activos de ferrovías (FCA y Norte-Sur) y puertos (puerto de Mearim, en Marañón).
En búsqueda de socios estratégicos para el megaproyecto de potasio de Rio Colorado, en Argentina, de u$s 5.000 millones, Vale está contratando bancos. Y hará lo mismo para el proyecto Kronau, de níquel en Canadá.
“Vamos a promocionar Kronau este año”, informó Ferreira, quién confirmó la venta de las acciones que Vale posee en Norsk Hydro, gigante de aluminio de Noruega, correspondientes a 22% del capital de la empresa. “Se venderá en un momento más adecuado para la industria del aluminio”, aseguró.
Además de tener en el foco la venta de activos, los planes de Vale para 2013 priorizan la implantación “con mucha eficiencia” de todos los proyectos del nuevo presupuesto de inversión, por u$s 16.300 millones, anunciado en el Vale's Day, en Nueva York.
La mayoría es de ferruginosos, como el Serra Sul (S11D) en Carajás y los "Itabiritos", en Minas Gerais. También el proyecto de cobre de Salobo II, siderúrgica de Ceará, de Biodiesel y el de carbón de Mozambique.
“Solamente el S11D, con producción de 90 millones de toneladas de mineral de hierro en 2016, costará R$ 40.000 millones (u$s 19.500 millones)”, evaluó el ejecutivo. “Para sacar del papel esos proyectos tenemos que apretar el cinturón, recortar costos”, señaló, manifestando su preocupación. “El costo es como la uña, si no se corta, crece”, bromeó.
Pero la disminución de los costos que pretende Vale no significan despidos, garantizó el ejecutivo. La empresa emplea 140.000 personas en 37 países. En Brasil tiene 68.000 empleados. “Vale no despedirá”, afirmó a Valor. “No tenemos ese propósito, a pesar de que vamos a seguir menos proyectos. Garantizo que no abriremos nuevos puestos en Rio y Belo Horizonte, pero vamos a precisar mucha gente en Canaa dos Carajás”. El proyecto del S11D empleará 30.000 personas en su etapa de obra. Después de entrar en operación, en 2016, contará con 3.000 empleos directos y 6.000 indirectos.
Ferreira negó presiones del gobierno para que Vale invierta. La estrategia del corte ahorró inversiones en Brasil. De los 19 proyectos enumerados, 12 están en el país y demandarán u$s 4.000 millones en el año. En total, suman u$s 27.600 millones.
En su balance de 2012, Ferreira señaló que fue un año “de desafíos”, con volatilidad en los mercados de mineral de hierro, cobre, níquel y carbón metalúrgico “mucho mayor de lo que cualquiera podría suponer”. Pero, indicó, que cerró con saldo positivo. “Obtuvimos 186 licencias y autorizaciones ambientales, un record, y conseguimos reducir peleas judiciales con el gobierno federal y los gobiernos estaduales”.
Vale terminó de cerrar el pago de R$ 1.400 millones de royalties atrasados con el Departamento Nacional de Producción Mineral (DNPM): R$ 300 millones se están pagando y R$ 1.100 millones se desembolsarán en enero. También quitó R$ 673 millones en tasas de minería que debía a los estados de Minas Gerais y Pará. Para 2013 resta el litigio judicial con el Fisco Federal referente al cobro de impuestos de renta de las subsidiarias vinculadas.
Además de buscar cerrar los litigios judiciales el próximo año, el presidente de Vale está empeñado en mejorar la imagen de la minera. Quiere esforzarse para que tenga nota diez en seguridad del trabajo y prepararla para disputar el título de “mejor empresa para trabajar” .
