Insólito: la jefa del Indec cuestionó su propio índice
La Nación
La directora del
Indec,
Ana María Edwin, cuestionó la cobertura periodística de la pobreza y sorprendió con una declaración sobre el propio organismo: dijo que la canasta básica alimentaria que mide -y que sirve para calcular el nivel de indigencia- no tenía ahora "ningún valor".
Las palabras de Edwin fueron difundidas ayer por
La Paco Urondo, una agencia de noticias que se define a sí misma como "periodismo militante", a través de un video en que la socióloga critica una nota del diario Clarín que consignaba que, según el Indec, una persona podía vivir con $ 6 por día.
Ese cálculo surge en rigor de la información difundida el viernes pasado por el Indec y publicada por todos los diarios: la canasta, dijo el organismo, costó en julio $ 688,37 para una familia de cuatro miembros. Si esa cifra se divide por los 30 días del mes, y luego, por los cuatro miembros de una familia, se concluye en los $ 6 requeridos para no ser indigente.
"El Indec nunca ha difundido ni difundirá que se necesitan seis pesos para que una persona coma por día -cuestionó Edwin-. Aquí hay una vieja historia con la canasta básica alimentaria que ha sido un invento del año 1987 de quien fuese secretario de Política Económica, gran crítico del Indec y fundamentalmente de nuestro organismo, cuando Domingo Cavallo era ministro. A partir de 1992, como a ellos les daba demasiado alto el valor de la canasta, lo que hicieron fue tomar los precios mínimos de todos los productos y, a partir de eso, para los productos que integran esa canasta, no se hace un revisión de cuál es el precio de cada uno, sino que los que se toman son los precios promedio. De esta manera, son variaciones de precios las que aparecen, pero no un exacto monto con el que cada uno tiene que contar para no ser indigente."
"Nosotros somos sumamente críticos de esa canasta. Estamos estudiando metodologías", agregó, y se dirigió al cronista: "Vos me podrías preguntar «¿por qué no discontinúan la canasta?». No la discontinuamos porque sirve como serie para ver cómo va evolucionando la condición de vida. Esto en los 80 era francamente innovador, hoy en día lo cierto es que sirve para poco. Era un indicador interesante en los 80, hoy no tiene ningún valor para saber cómo está viviendo el pueblo, pero lo seguimos para no discontinuar una serie que nos permite ver si hay mejora".