La factura por mantener el carbón asciende a 24.000 millones de euros
El economista
La minería recibirá esta año más dinero que el que recibirá el sector turístico.
Mantener la minería del carbón ha costado a las arcas del Estado más de 24.000 millones de euros durante los últimos 23 años. De ese dinero, las empresas mineras se han llevado un total de 5.492 millones. Durante este tiempo, el sector ha pasado de emplear a 45.000 personas a las 4.000 actuales, es decir la reducción es de algo más del 90%, mientras ha reducido su actividad un 67 por ciento.
La factura de la minería, cuya actividad se concentra en Asturias, León, Palencia, Lleida, Teruel y Ciudad Real, ha costeado ayudas de todo tipo en un sector que siempre ha sido deficitario. Así, se han dado subvenciones por explotación, por compensación de activos no amortizados en el momento del cierre de empresas mineras, por prejubilaciones e indemnizaciones, por transporte, reactivación de las cuencas mineras, formación y becas para los habitantes de los municipios mineros. Hasta su quema cuesta dinero al Estado, ya que las eléctricas reciben compensaciones por renunciar al mineral de importación, más barato y con menos poder calorífico.
Los recortes del Gobierno han llegado en un momento en el que la minería agotaba su último cartucho para reconvertirse y hacerse rentable. Europa quería haber acabado con ellas ya, pero por la presión de España accedió el pasado año a mantener las ayudas hasta el 2018 con la condición de que cerrasen las inviables y devolviesen el dinero las que consiguiesen hacerse rentables.
En realidad, el hachazo a las ayudas no las ha dado este Gobierno, sino el anterior. Zapatero fue el que se fue sin pagar 75 millones de euros, que ahora los sindicatos quieren descontar de los 186 millones que el actual Ejecutivo está dispuesto a pagar. La reducción de las ayudas este año no sería por tanto del 63 por ciento que se esgrime en las movilizaciones.
Lo que parece claro es que pese a la presión de las comunidades mineras, de los partidos de la oposición y de los sindicatos, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, no parece dispuesto a aumentar la partida de 186 millones de ayudas directas a las empresas que aparecen en los PGE (Zapatero comprometió 301 millones). En total, las subvenciones que recibirá el sector este año se elevan a 65 millones.
Ayer, Soria fue claro a la hora de asegurar que no hay "margen de maniobra" para hacer cambios en los recortes presupuestarios en las ayudas directas a las empresas.
En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Soria reiteró que el departamento que dirige ha sufrido un recorte presupuestario del 32 por ciento, al tiempo que volvió a llamar a la negociación entre sindicatos y empresarios del carbón con Industria para sacar adelante el Plan del Carbón 2013-2018.
El ministro reconoció que la mengua de las ayudas al carbón es una "disminución importante", aunque ha recalcado que no se ha reducido la dotación para prejubilaciones de mineros, informa Efe.
Soria comparó los fondos que recibirá esta industria con los que se destinarán al turismo. En este sentido, ha subrayado que la minería, un sector que emplea a 4.000 personas, tiene una dotación de 655 millones de euros (montante en el que se engloba también la reactivación y el resto de ayudas), mientras que el turismo, que genera más del 10 por ciento del PIB y ocupa a dos millones y medio de personas, tiene un presupuesto "sensiblemente inferior", de 438 millones.
El ministro ha insistido en que el secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, plantea "todos los días" a sindicatos y empresarios del carbón la necesidad de sentarse a dialogar para diseñar el plan de ayudas al carbón entre 2013 y 2018.
Desde Castilla y León, el consejero de Economía, Tomás Villanueva, volvió a emplazar a Soria para que aumente las ayudas: "Ahí tiene recursos, aunque no suficientes, para que las empresas no acaben en un par de meses en un concurso de acreedores", dijo.