Con esta compra, la petrolera estatal argentina incrementa su participación en el bloque al 54%, mientras que Pampa Energía, el actual operador, mantiene su parte restante
En una operación estratégica para consolidar su liderazgo en Vaca Muerta, YPF adquirió el 100% de la participación de ExxonMobil Argentina y Qatar Energy en la concesión no convencional del área Sierra Chata.
Con esta compra, la petrolera estatal argentina incrementa su participación en el bloque al 54%, mientras que Pampa Energía, el actual operador, mantiene su parte restante.
Sierra Chata, ubicada a 150 kilómetros al noroeste de Neuquén y con una extensión de 864 kilómetros cuadrados, es considerado uno de los activos de gas con mayor potencial dentro de Vaca Muerta.
La operación refuerza la estrategia de YPF de concentrar sus esfuerzos en el desarrollo de recursos no convencionales, alineando su portafolio con el proyecto Argentina LNG, que busca posicionar a Argentina como un exportador clave de gas natural licuado (GNL).
Esta adquisición se enmarca en un contexto de expansión del mercado del gas en Argentina. Por un lado, la puesta en marcha de nuevos gasoductos, como la reversión del Gasoducto Norte, permitirá mayor bombeo hacia provincias que anteriormente dependían del gas boliviano, cuya producción ha declinado.
Por otro lado, el desarrollo de infraestructura para la exportación de GNL abre nuevas oportunidades internacionales, con YPF buscando liderar este segmento en la próxima década.
La compra también refleja una apuesta clara por el gas como un recurso estratégico para la transición energética. En un mercado donde otras petroleras han priorizado proyectos de shale oil, YPF ha identificado en Sierra Chata un activo clave para apuntalar sus planes de exportación de gas, tal como lo impulsa el presidente y CEO de la empresa, Horacio Marín.
Aunque YPF ahora posee la mayoría en el bloque, Pampa Energía continuará siendo el operador. Esta asociación combina la experiencia operativa de Pampa con la capacidad estratégica de YPF para financiar y liderar grandes proyectos energéticos, estableciendo un modelo de colaboración que podría replicarse en otras áreas de Vaca Muerta.
ExxonMobil, por su parte, continúa su estrategia de desinversión en la Cuenca Neuquina para concentrarse en activos clave como Guyana y la región Permian en Estados Unidos.