Petroperú lleva 30 días sin un directorio definitivo tras la renuncia del equipo liderado por Oliver Stark. A pesar de las expectativas generadas por el Ministro de Economía y Finanzas (MEF), José Arista, quien había anunciado que el directorio sería designado el pasado fin de semana, el proceso sigue en suspenso.

Arista justificó la demora señalando que "nos estamos tomando tiempo porque queremos poner un buen directorio. No nos gusta hacer cambios a cada rato, sino gente que está dispuesta a estar trabajando ahí por un buen tiempo".

Sin embargo, figuras como el sindicalista Óscar Vera y la presidenta Dina Boluarte han propuesto a Alejandro Narváez, ex presidente de la empresa entre 2003 y 2005, para liderar el directorio, opción que aún no encuentra consenso.

Esta indefinición preocupa a expertos como Aurelio Ochoa, expresidente de Perupetro, quien sostiene que es esencial un equipo directivo con experiencia que guíe la recuperación de la empresa.

PRODUCCIÓN Y REESTRUCTURACIÓN FINANCIERA EN MARCHA
A pesar de la falta de un directorio, la empresa estatal continúa su operación. Desde el 7 de agosto, la Refinería de Talara ha incrementado su producción hasta 75,000 barriles diarios, con el objetivo de alcanzar los 95,000 barriles para enero o febrero de 2025, según afirmó Arista.

Este incremento es crucial para la sostenibilidad financiera de la compañía, que ha visto mejorar su cuota de mercado del 25% al 30% en las últimas semanas, con expectativas de recuperar el 50% o 53% que tuvo en su mejor momento.

Además, se ha destacado la activación de la Unidad de Flexicoking de la Nueva Refinería de Talara (NRT) en agosto, lo que permitirá mantener las cifras en azul, como señaló el ex presidente de Perupetro, Aurelio Ochoa. Los márgenes de refinación también se han elevado significativamente, pasando de 10 a 21 dólares por barril, lo cual es un indicativo positivo para la estabilidad financiera de Petroperú.

EL IMPACTO DEL OLEODUCTO EN LORETO Y LA VENTA DEL EDIFICIO DE PETROPERÚ
El ministro Arista también resaltó la importancia de impulsar la exploración y explotación petrolera en la región de Loreto, que ha sufrido un aumento en los niveles de pobreza debido a la falta de actividad en ese sector.

El oleoducto, cuyo costo anual es de 100 millones de dólares, es clave para esta reactivación. El ministro subrayó que con el petróleo pesado de Loreto, es posible alimentar la Refinería de Talara y generar empleos en la región.

En paralelo, el gobierno ha anunciado su intención de trasladar parte del edificio de Petroperú a Talara, una decisión que ha generado críticas. Mientras que Arista afirmó que el edificio en Lima será destinado a la venta de activos para reducir costos, el secretario general del sindicato de trabajadores, Lenin Cabanillas, expresó su desacuerdo, argumentando que la sede debe mantenerse en Lima para garantizar la operatividad financiera y logística de la empresa.

RECUPERACIÓN ECONÓMICA Y REESTRUCTURACIÓN PENDIENTE
El apoyo financiero estatal de 750 millones de dólares a Petroperú, destinado a su recuperación, no será un "salvavidas gratuito".

Arista fue enfático en que la empresa debe devolver ese dinero una vez que su situación mejore, y subrayó que este año Petroperú debe reducir sus costos en un 10% y el próximo en un 30%. Además, la empresa se encuentra en un proceso de reestructuración, que será supervisado por una firma especializada, lo que debería consolidar su reflote financiero.