Argentina es un actor clave en la industria minera mundial, en particular en lo que respecta al cobre y al litio. Estos dos productos básicos son cruciales para la transición energética, lo que convierte a las reservas argentinas en un recurso sumamente valioso.

En un reciente seminario web, expertos de diversos sectores compartieron sus ideas sobre por qué Argentina está preparada para liderar el mercado y cómo los actores clave navegan el singular panorama regulatorio del país.

El grupo de oradores incluyó a: Mariana Plaza, embajadora de Argentina en el Reino Unido, Rob McEwen, CEO de McEwen Mining, José Luis Manzano, presidente de Integra Capital, Saúl Feilbogen, socio senior de Vitale, Manoff & Feilbogen, Ignacio Celorrio, vicepresidente ejecutivo de asuntos legales y gubernamentales de Lithium Argentina, James McKeigue, editor de metales básicos europeos de Fastmarkets, Albert Mackenzie, reportero de precios del cobre de Fastmarkets y Callum Perry, editor de mercados estratégicos de Fastmarkets.

Argentina posee la tercera reserva de litio más grande del mundo y la sexta reserva de cobre más grande. Según Mariana Plaza, embajadora de Argentina en el Reino Unido, el país está estratégicamente ubicado junto a Chile, el principal productor mundial de cobre, en la cordillera de los Andes, lo que lo convierte en un lugar privilegiado para las inversiones mineras.

PROYECTOS AVANZADOS EN TRAMITACIÓN
El país cuenta con alrededor de 180 proyectos mineros avanzados, 50 centrados en litio y 32 en cobre. “Sólo los gastos de capital en el sector del litio superan los 8.000 millones de dólares, con recursos estimados en alrededor de 70 millones de toneladas”, afirmó Ignacio Celorrio, vicepresidente ejecutivo de asuntos legales y gubernamentales de Lithium Argentina.

En el caso del cobre, el gasto de capital es de aproximadamente 17.000 millones de dólares, con recursos que totalizan alrededor de 75 millones de toneladas. “La capacidad potencial de productividad del cobre se estima en un millón de toneladas por año”, afirmó Rob McEwen, CEO de McEwen Mining. Esta importante inversión subraya el potencial de Argentina para convertirse en un líder mundial en la minería de estos productos básicos.

PANORAMA REGULATORIO DE LA MINERÍA EN ARGENTINA
Argentina ha implementado recientemente el nuevo Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI), que otorga incentivos financieros a diversos sectores, incluida la minería.

Saúl Feilbogen, socio senior de Vitale, Manoff & Feilbogen, señaló: “Los proyectos con inversiones de 200 millones de dólares o más pueden beneficiarse del plan RIGI”.

Esto ha hecho de Argentina un destino atractivo para las inversiones mineras. El régimen RIGI otorga varios beneficios fiscales, como una tasa reducida del impuesto a la renta del 25%, períodos de amortización más rápidos y la posibilidad de trasladar pérdidas a ejercicios futuros sin restricciones.

“Los impuestos de retención a las exportaciones y los impuestos a los dividendos también se reducen o eliminan con este régimen”, agregó Feilbogen. Además, las empresas pueden importar maquinaria y componentes libres de impuestos y licencias en la aduana.

El régimen brinda estabilidad fiscal, aduanera, cambiaria y regulatoria durante 30 años. Las empresas deben invertir el 20% de su inversión localmente, lo que garantiza que los beneficios de la minería se sientan dentro del país. Cualquier disputa puede resolverse a través de paneles de arbitraje internacional, lo que brinda una capa adicional de seguridad para los inversores.

EL AUGE DEL SECTOR DEL LITIO
El sector del litio en Argentina ha experimentado un auge gracias a sus favorables condiciones geológicas y a los derechos mineros que lo protegen. “La producción de litio en Argentina sigue siendo competitiva en términos de costos, incluso en un entorno de precios bajos”, afirmó Celorrio.

Esta resiliencia convierte a Argentina en una fuente confiable de litio, esencial para los vehículos eléctricos y el almacenamiento de energía renovable. Varios proyectos clave de litio están entrando en funcionamiento, incluidos los de Ganfeng, Posco, Livent y Lithium Argentina. Los nuevos cambios regulatorios benefician tanto al sector del cobre como al del litio, lo que facilita que las empresas operen e inviertan en Argentina.

“Estos cambios son un punto de inflexión para la industria”, afirmó Callum Perry, editor de mercados estratégicos de Fastmarkets. “Argentina no es solo un centro minero; se está convirtiendo en un actor fundamental en la cadena de suministro global de tecnologías ecológicas”.

PERSPECTIVAS DEL SECTOR DEL COBRE
Uno de los proyectos más importantes que se discutieron fue el proyecto Los Azules de Rob McEwen, uno de los 10 principales depósitos de cobre sin desarrollar del mundo. McEwen destacó el potencial del proyecto: “Los Azules está llamado a convertirse en un actor importante en el mercado mundial del cobre”.

Se espera que la inversión en el sector del cobre de Argentina crezca, con más empresas buscando capitalizar los abundantes recursos del país y el entorno regulatorio favorable.

“El potencial de crecimiento es inmenso”, afirmó José Luis Manzano, presidente de Integra Capital. “Con las alianzas e inversiones adecuadas, podemos aprovechar oportunidades sin precedentes que no solo beneficiarán a nuestra industria, sino que también contribuirán significativamente a la economía de Argentina”.

Si bien las oportunidades son enormes, hay desafíos que superar, incluidas las limitaciones de infraestructura y las preocupaciones ambientales. Sin embargo, el gobierno y el sector privado están trabajando juntos para abordar estas cuestiones y garantizar un crecimiento sostenible para la industria.

ESCASEZ DE COBRE Y PERSPECTIVAS DE LA INDUSTRIA
Durante el seminario web, los expertos destacaron la creciente demanda mundial de cobre, impulsada en gran medida por la transición a la energía renovable y el creciente mercado de vehículos eléctricos. Destacaron que el cobre es esencial para una conductividad eléctrica eficiente, lo que hace que su escasez sea un problema acuciante.

“A medida que avanzamos hacia una economía más verde, la necesidad de cobre sólo aumentará”, señaló Rob McEwen.

Los participantes analizaron la posible escasez de suministro y la importancia de invertir en las abundantes reservas de Argentina para satisfacer la demanda futura. Abordar esta escasez es vital para garantizar una transición energética sostenible, y las iniciativas estratégicas de Argentina la posicionan como un actor fundamental para cerrar esta brecha.