La unión de empresas Techint-SACDE ha culminado la construcción de un tramo crucial de 100 kilómetros del Gasoducto de Integración Federal Tío Pujio-La Carlota, en la provincia de Córdoba.
Este gasoducto, de 36 pulgadas de diámetro, forma parte del proyecto de reversión del Gasoducto Norte, que permitirá transportar gas desde Vaca Muerta a las provincias del norte argentino, sustituyendo las importaciones provenientes de Bolivia.
La obra, que se ejecutó bajo contrato con Energía Argentina (Enarsa) en la modalidad EPC (ingeniería, suministros y construcción), fue finalizada antes de las fechas establecidas en el contrato. Según comunicó la UTE Techint-SACDE, se alcanzó de manera anticipada la condición de Apto para Funcionar (APF), marcando un hito en la infraestructura gasífera del país.
Durante la construcción, se logró un ritmo de avance récord de 3 kilómetros diarios en la cuadrilla de soldadura, gracias al uso de tecnologías como la soldadura automática y la planta de doble junta, que permitieron realizar más soldaduras por día, minimizar errores y dar mayor previsibilidad al ritmo de producción. Estas tecnologías habían sido empleadas previamente en la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner.
El proyecto de reversión del Gasoducto Norte incluye, además de la construcción del tramo finalizado, una ampliación (loop) de 62 kilómetros y el cambio de sentido de flujo de cuatro plantas compresoras ubicadas en las provincias de Córdoba, Santiago del Estero y Salta.
Con esta infraestructura, se espera poder transportar inicialmente 19 millones de metros cúbicos diarios de gas en dirección norte-sur, con la posibilidad de incrementar este volumen en el futuro.
Los desafíos técnicos de la obra fueron significativos, incluyendo más de 30 cruces especiales de rutas, arroyos y ríos. En el pico de la construcción, participaron más de 1.100 personas y se movilizaron 500 equipos de construcción.
Para el transporte de los materiales necesarios, se utilizaron más de 8.000 tubos de 12 metros, lo que representó más de 2.000 viajes de camiones desde Buenos Aires a Córdoba, acumulando un recorrido total de 1.300.000 kilómetros sin incidentes.
La finalización de este tramo es un paso fundamental para la reversión del Gasoducto Norte, una obra que no solo permitirá llevar el gas de Vaca Muerta a las provincias de Córdoba, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Salta y Jujuy, sino que también favorecerá la conexión de hogares a la red de gas natural, la generación de electricidad, y el desarrollo de actividades industriales, incluyendo la minería de litio.
El proyecto, que demandó una inversión aproximada de US$ 700 millones, es vital para el desarrollo energético de Argentina, ya que contribuirá a un ahorro significativo en importaciones de gas, estimado en unos US$ 2.000 millones anuales a partir de 2024.
Además, se está evaluando la posibilidad de extender la red hacia Brasil, aprovechando la capacidad ociosa existente en el sistema boliviano para incrementar el envío de gas argentino al país vecino.