El presidente y director ejecutivo de Barrick, Mark Bristow, informó que la necesidad de garantizar la viabilidad a largo plazo del complejo minero de oro Loulo-Gounkoto, en Mali, era de suma importancia para asegurar la sostenibilidad de la industria minera de Mali y mantener su contribución sustancial a la economía del país.
Bristow señaló que, en los últimos 29 años, Barrick ha invertido más de US$ 10.000 millones en la economía de Mali y que sus minas representan entre el 5% y el 10% del producto interno bruto (PIB) anual del país. Solo en el último año, Barrick ha aportado más de US$ 1.000 millones a la economía de Malí.
“Seguimos trabajando de manera constructiva para lograr una resolución global de nuestras diferencias y encontrar puntos en común en la cuestión clave de compartir los beneficios económicos de nuestras operaciones sin dañar la viabilidad futura de estos valiosos contribuyentes a la economía”, afirmó Bristow.
“Cabe destacar que Barrick desarrolló una asociación de distribución de beneficios muy exitosa para nuestras operaciones en Tanzania, que desde entonces también se ha utilizado como modelo para la reapertura de la mina Porgera en Papúa Nueva Guinea”, agregó.
Bristow advirtió que el clima económico y político actual en Mali había provocado que las empresas de exploración redujeran o suspendieran sus operaciones en el país, lo que afectaría la producción de oro a largo plazo.
“Por el contrario, Barrick ha estado trabajando con la Dirección Nacional de Geología y Minas (DNGM) para aumentar nuestra presencia de exploración aquí, asegurando nuestra capacidad de ofrecer valor real a Mali y a nuestros accionistas en el país”, completó el directivo..