El presidente de Naturgy destacó la necesidad de acelerar en renovables para alcanzar los objetivos marcados
El presidente de Naturgy, Francisco Reynés, ha puesto en valor la importancia del "trilema energético" para alcanzar los objetivos de la transición energética.
En su participación en una jornada organizada por la Fundación Naturgy, Reynés destacó que en su sector se cuenta con la "importante misión" de "tratar de ofrecer energía a los clientes de la mejor manera", para lo que debe haber "un equilibrio entre tres objetivos importantes", lo que se denomina el trilema energético.
En este sentido, señaló que el primer objetivo pasa por asegurar el suministro energético, "lo que significa que cada uno debe tener acceso a la energía de una manera muy estable y asegurar que la energía está garantizada".
Esta meta debe estar acompañada de otra igual de importante como es "avanzar en la descarbonización", ya que "no hay ninguna duda de que se debe hacer algo para luchar contra el cambio climático", dijo.
Finalmente, añadió que el trilema se completa con la necesidad de que ese suministro y esa apuesta por la sostenibilidad sea a unos precios "adecuados" para la energía.
En este sentido, Reynés subrayó que Naturgy, con 180 años de historia, está "muy comprometida" con estos objetivos y ha demostrado su "resiliencia" a lo largo de toda su historia, "transformándose a través de los años". "La energía es nuestro negocio y la transformación es realmente nuestra alma", dijo.
ACELERAR DE MANERA "URGENTE" LAS RENOVABLES.
Por su parte, el director general de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), Francesco La Camera, destacó la necesidad de acelerar de manera "urgente" el desarrollo de las energías renovables.
"En la transición energética hemos demostrado que el objetivo de los 1,5 grados centigrados del acuerdo de París en principio sigue siendo asumible, pero realmente necesitamos un cambio urgente y una corrección del curso", aseguró.
A este respecto estimó que el ritmo récord de los últimos años sigue quedándose lejos de lo necesario para alcanzar los objetivos a 2030 de descarbonización, por lo que hay que ser "más ambiciosos".
Asimismo, alertó de que, a pesar de que la pasada COP28 puso en la senda para enfilar el camino hacia el fin de los combustibles fósiles, esto no está sucediendo y existen muchas inversiones que siguen yendo a este sector. "Esto es algo que nos preocupa mucho", añadió.
Igualmente, llamó a abrir el espectro de tecnologías, más allá de la eólica y la solar, para alcanzar los objetivos, y consideró que el hidrógeno podría jugar un papel importante a este respecto.
En la misma línea, Arnaud De Giovanni, líder mundial en Energías Renovables de EY, coincidió en esa necesidad de "acelerar" en el mundo el despliegue de las energías 'verdes' si se quiere alcanzar esa meta de 11 teravatios (TW) de capacidad de energías renovables al final de la década.
De Giovanni también valoró el papel como "líder mundial" de España en energías renovables, siendo el quinto país con más potencia eólica instalada y el octavo en solar a nivel mundial, y el segundo en Europa.