Los planes de inversión estarán enfocados en hacer el negocio más rentable y no habrá espacio para proyectos político
En un documento presentado ante la Comisión Nacional de Valores (CNV), el Mercado Abierto Electrónico (MAE), y Bolsas y Mercados Argentinos (ByMA), YPF anunció la aprobación de su plan de desinversión en 55 campos maduros, con el objetivo de centrar su producción en los yacimientos más productivos, como los de Vaca Muerta, en Neuquén.
La "Estrategia de Optimización de Portafolio. Consideración de cesión y reversión de áreas convencionales" tiene como objetivo "realizar una asignación eficiente del capital que priorice activos de escala que aporten mayor rentabilidad y resiliencia ante distintos escenarios".
La iniciativa se centra en la optimización, ya sea mediante cesión o reversión, de un conjunto de activos conocidos como campos maduros (aquellos que ya pasaron su pico “óptimo de producción”). Este grupo abarca un total de 55 áreas que forman parte del Upstream Convencional de YPF.
Según explicaron, para empresas como YPF no resulta eficiente ni rentable producir petróleo en este tipo de yacimientos, los cuales en general son operados por empresas más pequeñas que puedan dar continuidad a la actividad.
La empresa, además, recalcó que esta medida está alineada con los nuevos planes de gestión, donde la optimización del portafolio Upstream convencional es una palanca fundamental de su estrategia. El enfoque se orienta hacia actividades e inversiones en campos no convencionales, con el fin último de maximizar el valor para la empresa, sus accionistas e inversores.
Según explicaron, el revalúo se debe a que la nueva gestión de la empresa revisó la rentabilidad esperada de algunas áreas en función de otras variables, y por eso pasaron a tener un peso menor en el estado contable.
Además, YPF informó que, de acuerdo con las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), la decisión implica una evaluación de recuperabilidad del valor contable de estos activos.
En consecuencia, la empresa realizará un ajuste al valor contable estimado en aproximadamente US$ 1.800 millones (o cerca de US$ 1.200 millones después de impuestos). Este ajuste, sin impacto en caja, será reflejado en los estados contables de YPF al 31 de diciembre de 2023, que se informarán oportunamente según la normativa aplicable.
"Sin embargo, a la fecha, la compañía considera que dicho estimado es razonable sobre la base de las informaciones y análisis a la fecha, y no tiene conocimiento de factores que podrían afectar materialmente el estimado actual", aclararon.