Los precios y demanda de minerales para la electromovilidad, como el litio, aumentarán, mientras que el retiro anticipado de centrales de combustibles fósiles puede acarrear unos US$1,4 billones de ganancias perdidas en los próximos 15 años
El Bank of America (BofA) publicó recientemente un estudio titulado 'Greenflation, pague ahora o pague más después' que proporciona un análisis riguroso de los impactos económicos de la adopción de prácticas sostenibles.
Centrándose en Estados Unidos, el estudio detalla la intrincada relación entre las políticas de descarbonización y las presiones inflacionarias, destacando los efectos de controles más estrictos sobre la producción de combustibles fósiles, el aumento de los precios del carbón y la mayor demanda de minerales.
La intersección de la descarbonización y la inflación
El informe indica que las políticas de descarbonización están exacerbando los problemas inflacionarios. El cambio a combustibles energéticos más limpios está impulsando la demanda de metales esenciales, cuyos precios han experimentado un notable aumento después de la pandemia. Por tanto, la descarbonización es un arma de doble filo: si bien ayuda a mitigar la crisis climática, al mismo tiempo contribuye a aumentar las presiones económicas.
Chile: ¿un beneficiario de la inflación verde?
Curiosamente, el estudio sugiere que países como Chile, ricos en materias primas esenciales necesarias para la transición a la energía limpia, se beneficiarán de estos desarrollos. Este cambio hacia la sostenibilidad podría traducirse potencialmente en prosperidad económica para las naciones dotadas de esos recursos.
El cambio hacia la energía limpia está aumentando la demanda de metales esenciales, los que han subido de precio pospandemia. Este punto podría ser una buena noticia para Chile, que posee algunas de esas materias primas esenciales para esta transición. “Por ejemplo, la adopción de vehículos eléctricos (EV) está aumentando la demanda de cobre, níquel y litio, y la demanda de este último, podría cuadruplicarse para 2030. Así, la demanda de platino, crucial para el almacenamiento de hidrógeno, podría multiplicarse por 24, según los estrategas de metales de BofA”, dice el estudio.
El compromiso de Morgan Stanley con la sostenibilidad
El gigante de la banca de inversión Morgan Stanley muestra su dedicación a la sostenibilidad y la inversión de impacto. La firma ha estado liderando con soluciones financieras innovadoras, fomentando una cultura de diversidad y fomentando los avances tecnológicos. Su enfoque en la inversión sostenible refleja la creciente importancia de integrar consideraciones ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) en las estrategias de inversión.
Integrando la sostenibilidad: oportunidades y desafíos
A medida que las grandes empresas se enfrentan a las implicaciones de invertir en prácticas sostenibles, deben navegar por el panorama cambiante de los precios de la energía, la demanda de recursos y los cambios de políticas. Esto presenta tanto oportunidades como desafíos, ya que se esfuerzan por alinearse con los objetivos de sostenibilidad mientras gestionan los impactos económicos.
Impulsando el éxito a través de la diversidad y la inclusión
Los esfuerzos de Morgan Stanley para promover la diversidad y la inclusión son encomiables. La firma apoya activamente a diversos emprendedores, promueve mujeres líderes multiculturales y valora diversas perspectivas dentro de la firma. Este enfoque en la inclusión no solo impulsa la innovación sino que también ofrece valor a los clientes.
En resumen, el estudio de BofA y el compromiso de Morgan Stanley con las prácticas sostenibles subrayan la compleja interacción entre las políticas ambientales, la economía y las finanzas. Destacan los desafíos y oportunidades asociados con la transición hacia prácticas sostenibles y el papel de la diversidad y la inclusión en la configuración del futuro de la industria financiera.