Foto: Mezquita destruida en Khan Younis, en el sur de Gaza.Getty Images
El mundo está en alerta. Mientras crece la tensión entre Israel y el grupo terrorista Hamas, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pisó Medio Oriente para apoyar a Benjamin Netanyahu y evitar la avanzada terrestre sobre la Frontera de Gaza.
En este escenario, donde lo que más importa es el costo humanitario, los recursos escenciales y fijadores de precios como el petróleo podría llegar a los US$ 150, según pronostican expertos de Julius Baer.
Según informó Bolsamania, es cierto que los analistas del banco suizo dan a este escenario menos de un 5% de probabilidad. De hecho, recientemente en otro informe apuntaban que ven "muy improbable" que pueda producirse. Sin embargo, conviene tener en cuenta qué puede pasar para estar prevenidos en caso de que los peores augurios se cumplan.
En este escenario, si el conflicto se extiende, "Irán y otros se involucran directamente, y las acciones y ataques políticos interrumpen el comercio y los flujos de petróleo". Así, los precios del crudo "se disparan por encima de los US$ 150, la inflación regresa y la economía se tambalea".
Bajo este paraguas, la geopolítica "se convertiría en un shock exógeno masivo que restablecería la economía y los mercados financieros a mediados de 2024", afirman los expertos de Julius Baer. Sin embargo, remarcan, hoy por hoy "no hay indicios de una participación externa significativa y activa en los ataques, que es un requisito previo para una escalada tan drástica del conflicto".
Además, apuntan, las comparaciones con la crisis del petróleo de los años 1970 "son engañosas", ya que el mercado del petróleo y la situación política "son muy diferentes" en la actualidad.
Para estos estrategas, el escenario más plausible es el de un "choque temporal". De hecho, le otorgan un 65% de probabilidad. En él, el conflicto militar "sigue centrado en Israel, dentro de las divisiones conocidas". "Las relaciones entre Israel y Palestina se restablecen, pero los impactos dentro de la región son menores, aparte de la acalorada retórica", comentan.
Asimismo, "el ruido y la incertidumbre desaparecen y el aumento del precio del petróleo se revierte en cuestión de días y semanas". Como explican desde el banco suizo, los precedentes de este "manual geopolítico estándar de shock temporal" son la guerra del Líbano y las guerras anteriores en Gaza, aunque sus analistas reconocen que "el conflicto actual es más intenso".
No obstante, también señalan que "hasta ahora, la diplomacia estadounidense y las reacciones de los estados árabes parecen apoyar este escenario".
Aunque también hay otra posibilidad, la de un escenario de "reversión política" (30% de probabilidad). En él, el conflicto militar "se intensifica hacia el Líbano y Siria", y la normalización de las relaciones dentro de los Estados árabes en los últimos años "se estanca y se restablece parcialmente".
"Aparecen consecuencias políticas, como sanciones más estrictas contra Irán o una mayor división entre Estados Unidos y Arabia Saudí", dicen, y los flujos de petróleo "podrían frenarse parcialmente, o al menos la política petrolera excesivamente restrictiva actual de las naciones petroleras podría durar más de lo esperado".
Sin embargo, comentan los analistas de Julius Baer, "el gobierno estadounidense teme que alimente la inflación, China también es frágil y el mercado petrolero ha desarrollado una manera de comercializar petróleo sancionado fuera del alcance de Occidente durante el año pasado, lo que limita el impacto" de un escenario como el que se describe aquí.
En cualquier caso, comentan, en este caso "el shock sería más duradero y los precios del petróleo no se revertirían hasta finales de año".
"Hasta ahora, vemos evolucionar el manual geopolítico estándar. Puede que haya algunas consecuencias geopolíticas, pero por ahora no vamos a cambiar nuestras opiniones ni nuestras proyecciones. Prevemos que los precios del petróleo bajarán el próximo año", confirma Norbert Rücker, director de Economía e Investigación de Próxima Generación del banco suizo.