En las últimas semanas, antes de fin de mes, índices como el S&P 500 y metales como la plata y el oro comenzaron a perder fuerza. El impulso para la caída de los precios de las acciones y los metales preciosos fueron los recientes comentarios de la Reserva Federal sobre tasas de interés más altas en el futuro previsible.

Mientras tanto, otros índices como el petróleo y los bonos del Tesoro a 10 años y 2 años se han mantenido preparados para ver precios más altos. Desde entonces, los bonos del Tesoro han alcanzado nuevos máximos, aumentando un total del 38% desde el mínimo de mayo de 2023.

Esto indica un entorno riesgoso para los inversores en índices. Desde que el máximo histórico de los bonos del Tesoro de octubre se disparó al alza, una mayor tendencia alcista de los precios podría recibir un impulso de múltiples factores. Los más notables incluyen una caída del mercado de valores, un débil impulso de los compradores dentro de los mercados de metales y posibles nuevos datos gubernamentales.

El índice del dólar estadounidense también alcanzó nuevos máximos este mes. Al finalizar la temporada de verano, el índice dólar rebotó desde una zona de soporte histórica a largo plazo. Esto ayudó a impulsar los precios más allá de los límites máximos de precios a corto plazo, creando una tendencia alcista que seguirá presionando a los activos frente al dólar. De hecho, desde julio, los precios del índice han aumentado más del 6%, empujándolos un poco más allá del máximo de mayo de 2023.

Al igual que el dólar y los bonos del Tesoro, los precios del petróleo también subieron al finalizar el verano. En total, los precios aumentaron poco más del 25% en los últimos meses, alcanzando potencialmente el máximo de noviembre de 2022. Muchos analistas consideran que el petróleo está formando estructuras alcistas a corto plazo y superando los techos de precios, lo que indica una continuación de la tendencia alcista.

Dicho todo esto, más datos gubernamentales ayudarán a aclarar las tendencias del mercado en índices, materias primas y varios otros pares frente al índice del dólar. Aun así, teniendo en cuenta los comentarios y datos publicados recientemente por la Reserva Federal, es importante señalar que la volatilidad y la incertidumbre siguen siendo un alto riesgo para los inversores en todos los mercados.

CÓMO SE CORRELACIONAN LOS PRECIOS DE LOS METALES Y LOS PRECIOS DEL PETRÓLEO
Numerosas variables afectan los precios de las materias primas, desde la oferta y la demanda y los acontecimientos geopolíticos hasta las circunstancias del mercado financiero. 

Sin embargo, según varios estudios, sigue existiendo una asociación favorable entre los precios de los metales y del petróleo. Independientemente de si son metales básicos o preciosos, la mayoría de los precios de los metales tienen tendencias generalmente similares, a menudo correlacionándose positivamente entre sí. 

Una investigación publicada en ScienceDirect indica que el aumento de los costos de la energía aumentará el precio de producción de metales preciosos, principalmente debido al aumento de los precios del petróleo. Esto significa que la producción de metales preciosos disminuiría durante este tiempo, lo que resultaría en una reducción de la oferta y un nuevo aumento en los precios de los metales preciosos.

Aunque la mayoría de los metales tienen una asociación positiva con los precios del petróleo, la intensidad de la correlación de cada metal difiere. Por ejemplo, un estudio reciente descubrió que el precio del cobre tenía una ligera asociación positiva con el precio del petróleo crudo. 

El estudio también descubrió que los precios del maíz y los precios del petróleo crudo están más correlacionados positivamente que los precios del cobre.

CORRELACIONES ENTRE LOS PRECIOS DEL PETRÓLEO CRUDO Y LOS METALES PRECIOSOS
MetalMiner Insights indica que, en general, las correlaciones de los precios del oro y del petróleo crudo no siempre son positivas. Sin embargo, por el momento mantienen una correlación negativa muy fuerte. Tanto las correlaciones muy fuertes como las muy negativas merecen mucha atención.

En los últimos 50 años se ha visto una conexión positiva entre los precios del oro y los del petróleo más del 80% de las veces. Sin embargo, esta asociación no siempre es confiable. Varias variables, incluidas las tensiones geopolíticas, la turbulencia económica y la inflación, pueden afectarlo significativamente. 

Los precios del petróleo crudo suelen aumentar junto con el aumento de los precios del oro, y ocurre lo contrario. Esto ocurre principalmente porque los inversores frecuentemente recurren a ambos activos durante períodos de imprevisibilidad económica, ya que ambos se consideran inversiones de refugio seguro. De hecho, existe una clara correlación entre los precios del oro y del petróleo crudo más del 60% de las veces .

Aún así, varios factores pueden afectar esta correlación. Por ejemplo, los disturbios políticos o los conflictos armados en los países productores de petróleo tienden a hacer subir los precios del petróleo crudo, lo que también puede impulsar los precios del oro. La inflación es otro elemento que puede afectar la relación entre los precios del oro y del petróleo crudo.