Existe un importante riesgo de alza de precios debido a la disparidad entre demanda y oferta
Estrategas de Rabobank advirtieron en su último informe respecto a la situación actual del petróleo y una visión a futuro para el Brent. Los expertos creen, de hecho, que tiene posibilidades de llegar de aquí a final de año a los US$ 100 por barril, y estiman que incluso podría mantenerse por encima a principios de 2024.
"El Brent se ha enfrentado a una fuerte resistencia en torno a los US$ 94-95 el barril", aunque aún tiene espacio para seguir subiendo. Según comentan los analistas del banco holandés, "el factor destacado que fija el techo sigue siendo el sentimiento macroeconómico y los temores de una recesión mundial", y la situación no ha cambiado.
Comentan que "los diferenciales temporales han seguido fortaleciéndose", lo que en su opinión "apuntala la rigidez física y fundamental del mercado". Prevén que esta tónica continúe en el cuarto trimestre, y afirman que el Brent "tiene el impulso para tocar los US$ 100".
Sin embargo, ven "más fuerza en el primer trimestre de 2024 para mantenerse por encima de la marca de los US$ 100 el barril". Y es que "todavía existe un importante riesgo de alza de precios debido a la disparidad subyacente entre la demanda y la oferta", que cada vez es más escasa en lo que Rabobank considera "el mercado más tenso del mundo", según informó Virginia Mora en Bolsamanía.
Se prevé que la demanda mundial de todas las formas de energía aumentará un 25% hasta 2045, según el secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Haitham Al Ghais.
“Para 2045, se espera que la demanda mundial de energía aumente un 25 por ciento con respecto a los niveles actuales, ya que se prevé que la población mundial crecerá en aproximadamente 1.600 millones de personas. Esto indica que el mundo necesitará más energía en el futuro”, dijo Al Ghais a la Agencia de Noticias de Emiratos (WAM).
Al Ghais añadió que “ninguna fuente de energía por sí sola puede satisfacer las crecientes necesidades del mundo a medida que la economía se expande y la población aumenta. Por eso la OPEP apoya la inversión tanto en petróleo como en energía renovable".
Al Ghais enfatizó que varios países líderes, en particular Emiratos Árabes Unidos (EAU), Arabia Saudita, Kuwait y varias naciones africanas, han utilizado con éxito la tecnología en la industria petrolera. "Estos países han invertido en tecnologías de captura de carbono, hidrógeno verde y economías circulares y están trabajando eficientemente para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero".
Asimismo, subrayó la necesidad de que la industria petrolera continúe aportando soluciones a los desafíos del cambio climático, y señaló que Emiratos Árabes Unidos es un país líder en la reducción de emisiones de carbono y la inversión en energía renovable.
No solo el petróleo está presionado al alza, sino también sus derivados, como son la gasolina y el diésel, que también han experimentado fuertes subidas. Y la situación ante la limitación de la oferta lleva a los expertos de la firma holandesa a preguntarse "de dónde van a salir los inventarios cuando las refinerías ya estén produciendo a su máxima capacidad".
"Dado que los precios de la gasolina y el diésel se han disparado en los últimos cuatro meses, esperamos que la inflación reanude una marcha ascendente y, lamentablemente, esto seguirá presionando a los bancos centrales para que suban aún más los tipos", pronostican.
Sin embargo, aunque creen que estos nuevos aumentos de los tipos para combatir la inflación "serán inútiles", sí que afectarán a la inversión. En su opinión, "la nueva oferta de petróleo crudo y gas natural disminuirá a medida que aumente el coste de capital de las empresas". Como dicen, las empresas "ya detestan invertir en nuevos campos, exploración y producción", por lo que es de esperar que "sigan devolviendo capital a los accionistas" y no inviertan en nuevas refinerías, lo que influirá en los precios.
"Las refinerías en Estados Unidos y Europa están en declive controlado. El número de plataformas sigue disminuyendo tanto para el petróleo como para el gas, pero la producción de petróleo de Estados Unidos está aumentando, principalmente debido a la finalización de pozos perforados pero no terminados", indican desde Rabobank.
Su previsión es que "el relleno se convertirá en un gran problema en la próxima década", a medida que los nuevos pozos experimenten una caída en la producción. En conclusión, remarcan, el aumento de los tipos de interés "deprime el gasto en infraestructura y desalienta las inversiones de capital", por lo que al final estamos ante un "problema circular".
Y es que Rusia y la OPEP, en este escenario, "tienen las de ganar". De hecho, sus decisiones sobre la producción, que han recortado hasta finales de año, ya han afectado a los precios. Los estrategas de Rabobank creen que "la verdadera solución" es la energía verde, incluida la energía nuclear, porque solo con ella se logrará la tan ansiada independencia energética.
Pero, reconocen, "el principal problema durante la próxima década es la velocidad de su adopción". "Si la energía verde se retrasa, entonces el petróleo y sus productos derivados se enfrentarán a un enorme abismo entre la oferta y la demanda", vaticinan.
"La oferta de petróleo irá a la zaga de la demanda en el futuro previsible y, por tanto, cualquier debilidad, conocida o desconocida, no durará mucho", comentan los estrategas de la firma holandesa. En cualquier caso, inciden, "será la lenta curva del futuro alejamiento de la gasolina y el gasóleo en la década de 2030 lo que finalmente hará bajar los precios, pero hasta entonces reinarán la volatilidad y el riesgo".