El ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, aseguró que Bolivia tiene “bastante” potencial gasífero que se encuentra en el subsuelo; sin embargo, expertos y analistas sostienen que ese recurso no puede ser aprovechado por la falta de exploración, pues no se conoce dónde está y mucho menos se tiene una certificación de reservas probadas, probables y posibles con las que cuenta el país, porque las que existen ya se están acabando.
“Hemos visto por los medios de comunicación algunos datos y algunas imprecisiones respecto a que el gas se hizo gas. No es que el gas se hizo gas. En definitiva, el país cuenta con bastante potencial gasífero, pero está bajo el subsuelo, ¿no es cierto? Es decir, hay que desarrollarlos, hay que invertir, hay que ejecutar los proyectos exploratorios que YPFB tiene”, dijo el ministro a la televisora estatal.
Sobre el tema, el ex ministro de Hidrocarburos, Álvaro Ríos, coincide en que Bolivia tiene potencial gasífero, pero no son nuevas reservas, sino que se trata de un gas descubierto hace 25 años.
Señaló que, con el actual modelo de contrato, en el que el Estado tiene una mayor participación, es muy difícil que alguna petrolera privada se anime a invertir en exploración, porque YPFB no tiene los recursos para hacerlo.
Si en los próximos años esto sigue así, en 2029 Bolivia dejará de exportar gas natural y comenzará a importar ese combustible.
“Todavía tenemos reservas, estimó que alrededor de 3 trillones de metros cúbicos y una producción actual de 36 millones de metros cúbicos día. No es que el gas se ha hecho gas; el gas se está haciendo gas porque no hemos explorado lo suficiente en cuencas tradicionales y no tradicionales”, indicó.
Ríos considera que el régimen actual no funciona y no atraerá a empresas privadas. “Vamos a llegar a 2029 con 15 millones de metros cúbicos día de gas y ese día vamos a dejar de exportar y comenzaremos a importar. Si no reponemos las reservas, vamos a tocar fondo en 2029 o 2030, cuando no tengamos nada para exportar”, dijo.
Por su lado, analista de la Fundación Jubileo, Raúl Velásquez, lamentó que el potencial que se tenía no haya sido aprovechado porque, a la fecha, la producción de gas está en caída y no se conoce dónde están ubicadas esas reservas de gas de las que habla el ministro Molina.
Manifestó que, a pesar de que Bolivia tiene un potencial importante, la producción de gas viene cayendo por falta de exploración.
“Bolivia tiene un potencial gasífero, pero es sólo un potencial, hay que explorar para encontrar el gas y pasar de potencial a reservas para certificarlas y explotarlas, luego buscar mercado donde venderlas”, completó.