El presidente Santiago Peña criticó a Sergio Massa por el peaje que le cobran por la Hidrovía y advirtió que retiró el 100% de la energía de la represa en represalia
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, explicó que su gobierno decidió llevarse toda la energía que le corresponde de Yacyretá -decisión que afectó a la Argentina- en represalia por el peaje que impuso el gobierno de Alberto Fernández en la Hidrovía. “Nosotros la economía argentina más que verla la sufrimos”, dijo Peña en declaraciones a Luis Majul, por LN+.
Peña, además, sostuvo que ese peaje “es unilateral” y va en contra del tratado que los países involucrados tienen firmados.
“El peaje es una posibilidad siempre y cuando sea consensuado. Brasil, Uruguay y Paraguay sacaron un comunicado hoy rechazando de nuevo ese peaje”, añadió. Según Peña, Paraguay “puede convertirse en la Nación más desarrollada de la región”.
“Más que verla la sufrimos a la economía argentina, sufrimos el desequilibrio que tiene. El tipo de cambio alienta la mercadería de contrabando, que perjudican a nuestra industria nacional. Además, tenemos atrasos en los pagos, que hoy lastimosamente por la falta de dólares, no se están pudiendo hacer, y otros temas que imposibilitan un comercio mas fluido. Sufrimos la economía argentina. Si a la Argentina le va bien, le va bien a todos en la región”, dijo.
“La Argentina aplica una medida unilateral desde 2022, que es rechazada por los otros países, nosotros levantamos nuestra voz y pedimos que recapacite”, agregó.
“La decisión que tomamos es unilateral en el uso de la energía. Paraguay retira poca energía para que la Argentina tenga mayor disponibilidad. La decisión de retirar el 100 por ciento de la energía disponible de Paraguay fue adrede y la Argentina tuvo que comprarle a Brasil a un costo mas alto. Hemos dado enormes gestos para recomponer la relación y pese al desembolso del FMI siguen los atrasos enormes con Paraguay, no sabemos por qué no se ha cumplido”, se quejó Peña.
LA DECISIÓN DE PARAGUAY
Una medida extrema y que generó máxima tensión entre los socios binacionales de Yacyretá, Paraguay abrió de forma unilateral el vertedero de Aña Cuá al máximo y dejó correr el agua que se necesita para hacer funcionar la represa, vaciando parcialmente el embalse.
El vertedero de Aña Cuá es un brazo del río Paraná por donde corre un caudal ecológico de 1.000 metros cúbicos por segundo con unas enormes compuertas que pueden regular ese paso. Los técnicos paraguayos de Yacyretá lo abrieron primero para dejar correr 2.000 metros cúbicos por segundo y luego 4.000 metros cúbicos por segundo.
Según pudo averiguar LA NACIÓN, también efectivos de la Armada paraguaya se hicieron presentes en la central, ubicada a la altura de la ciudad correntina de Ituzaingó, para apoyar esa decisión unilateral.
El hecho ocurrió el jueves (7/9) entre las 19 y las 23 y recién el sábado (9/9) cerca de las 17, tras la intimación y el reclamo del titular de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) por Argentina, se logró restablecer el funcionamiento del vertedero.
“Ayer recibimos una comunicación que ellos, por una medida unilateral, decidieron abrir las compuertas del brazo Aña Cuá. Eso tiene una fuga de agua que normalmente es de 1.000 metros cúbicos por segundo, por el caudal ecológico, primero lo llevaron a 1.500, después a 3.000 y finalmente a 4.000 metros cúbicos”, explicó el titular de la EBY lado argentino, el formoseño Fernando de Vido.
De Vido explicó que tras el reclamo de la parte argentina al flamante titular de la EBY por el lado paraguayo, Luis Benítez Cuevas, las compuertas volvieron a quedar en su posición correcta. Pero advirtió que si se hubiera mantenido la situación en el tiempo hubiera afectado la generación de energía.
“La apertura genera una descompensación en el embalse. Nuestro producto para transformarlo en energía es el agua y el salto, con eso generamos energía. Al haber una fuga del caudal más allá de lo previsto iba a tener un impacto, al final no se corroboró, pero hubiera pasado si se mantenía esa apertura en el tiempo”, graficó De Vido.