El gobierno de Bolivia anunció una alianza estratégica con Brasil para la producción de fertilizantes derivados de los hidrocarburos y sales, luego de una reunión técnica binacional que se desarrolló en La Paz, la capital administrativa del país.
"El gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva ve en Bolivia un aliado para las inversiones en plantas industriales e incluso una petroquímica, y esto se explica por la creciente demanda de fertilizantes", afirmó el ministro boliviano de Hidrocarburos, Franklin Molina, en contacto con la prensa local.
La autoridad boliviana se reunió esta semana en La Paz con el viceministro de Agricultura del Brasil, Irajá Lacerda, quien le manifestó el interés de poner en marcha una agenda binacional de trabajo "sobre el desarrollo de los biocombustibles y la producción de etanol y metanol".
Molina también destacó el interés de Brasil "para invertir en nuevas plantas de urea, clorhidrato de potasio y fertilizantes NPK [sodio, fósforo y potasio]", estos últimos producidos a partir de las sales que existen en los salares del país.
La urea, producida a partir del gas natural, es un fertilizante nitrogenado "de mayor demanda a escala mundial" y su uso en la producción agropecuaria ayuda a mejorar los índices de rentabilidad de diferentes cultivos.
Las ventas de urea boliviana, entre enero y junio de este año, llegaron a 46 millones de dólares por la comercialización de 123.908 toneladas métricas de urea granulada, según la petrolera estatal YPFB, que señala al Estado Mato Grosso del Sur de Brasil como principal comprador de este producto.