La Cámara Colombiana de Bienes y Servicios de Petróleo, Gas y Energía (Campetrol) planteó la discusión sobre qué pasaría, no solo con la industria, sino con la economía de Colombia, si el nivel de precios del petróleo tan favorable comienza a disminuir y se mantiene bajo por meses. Al mismo tiempo, el hecho de prescindir del gas natural no deja de generar polémica y el presidente de Promigas, Juan Manuel Rojas, afirmó que el país pasó de la abundancia a la escasez.
Lo anterior, porque el gremio prevé que sin soluciones de corto plazo la producción de hidrocarburos podría descender en los próximos meses. De acuerdo con la Cámara, en la actualidad, la perspectiva sigue siendo positiva: existen algunos pronósticos de agencias internacionales que le apuntan a que la producción promedio de petróleo en el mundo aumente en 1,5% y que la demanda incremente en 1,7%. Es decir, a mayor demanda, también hay mayores precios, según informó Yennyfer Sandoval en Valora Analitik.
LAS ESTIMACIONES SOBRE EL PRECIO DEL PETRÓLEO
“La Organización de Países Exportadores de Petróleo espera que la demanda incremente en 2,7% y la Agencia Internacional de Energía (IEA) estima que la misma también suba 2,7%”, recordó Campetrol.
Agregó que “vía demanda estamos viendo que los precios pueden incrementar, vía oferta, de acuerdo con la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA), ésta aumentaría en 1,5% lo que bajaría los precios y la IEA le apunta a un alza de 2,1%”.
Las agencias, en promedio, están esperando precios del petróleo entre US$ 79 y US$ 83. “Asimismo, hay analistas que hablan de US$ 100, pero hay otros que ven un escenario menos alentador por lo que los precios podrían disminuir”, precisó el gremio petrolero.
Sin embargo, pese a que aún hay pronósticos alentadores, Campetrol explicó que siempre hay riesgos que pueden afectar la dinámica económica como:
+ Una posible recesión económica (demanda en China e India ha ido cayendo y eso llevaría a una disminución de la demanda que repercutiría en la caída de los precios del petróleo)
+ Una posible crisis económica de Estados Unidos y en las economías del G7
“Adelantarse a hablar de un nivel de precios futuro puede ser riesgoso, pero es importante poner sobre la mesa que una caída en los precios del petróleo puede ser muy fuerte para la economía colombiana”, expuso Campetrol.
PRECIOS DEL CRUDO Y LA ECONOMÍA DE COLOMBIA
Según la Cámara Colombiana de Bienes y Servicios de Petróleo, Gas y Energía, son cuatro los impactos que la economía de Colombia ya está sintiendo por la caída en el nivel de precios y que se acentuarán con una disminución en el nivel de la producción.
+ Impacto económico: La disminución del precio del Brent (con su respectivo ajuste a la canasta de crudo colombiana) entre 2022 y 2023 ha llevado a que la economía del país dejara de percibir cerca de $7 billones en el primer semestre de 2023 en comparación con el mismo periodo del año anterior.
+ Exportaciones: De enero a junio de 2023 se registraron ventas externas de crudo y derivados por valor de US$7.000 millones, inferior en 29,4% al acumulado en el mismo periodo de 2022.
+ Empleo: Entre enero y junio de 2023 la caída en el número de taladros activos totales ha generado una pérdida cercana de 2.000 empleos directos y 11.000 indirectos, junto con afectaciones en los encadenamientos regionales.
+ Regalías recaudadas: Con corte al primer trimestre del año, últimas cifras disponibles, ascendió a los $2,3 billones, un 8,7% menos respecto al mismo trimestre de 2022.
Para Campetrol, es urgente generar políticas públicas que impulsen el incremento en los niveles de producción.
“La competitividad del país en la exploración y explotación de hidrocarburos está en juego, así como la autosuficiencia energética y el sustento de las finanzas públicas”, indicó.
¿Y LAS RESERVAS DE PETRÓLEO Y GAS?
Nelson Castañeda, presidente ejecutivo de Campetrol, afirmó que una eventual caída en el precio del petróleo impactaría la producción del crudo del país y, por consiguiente, las reservas de hidrocarburos (petróleo y gas).
“Recordemos que el precio del año pasado, con el que se evaluaron las reservas, fue de alrededor de US$100 por barril. Hoy estamos cerca de US$80 promedio año y ese 20% menos genera un impacto en las reservas de petróleo”, señaló Castañeda a Valora Analitik.
Añadió que el impacto se da porque los vectores de producción se cortan con el de costos, eso hace que se tenga un límite económico más corto: “va a haber una reducción de reservas vía precio”.
Esto, en línea con las estimaciones de Campetrol, se puede compensar vía incremento de la producción o vía nuevos proyectos que conviertan reservas 2P (probadas y probables) a 1P (probadas).
“El precio sí es una de las variables, junto con la tasa de cambio y los costos de producción, que impactan el cálculo de las reseras de petróleo. En materia de producción, si el precio baja, hay pozos que tienen un límite económico que no paga ni siquiera los costos variables y terminan las operadoras cerrándolos porque no pagan la energía, servicios, ni los variables”, explicó Castañeda.
Recordó que el precio de petróleo estimado en muchos campos está por encima de US$40. “En esta coyuntura de precios, entre US$70 y US$80, cerrar pozos no es una alternativa porque siguen generando un GAP”, completó.
CUÁNTO LE COSTARÍA A COLOMBIA PRESCINDIR DEL GAS NATURAL
El hecho de prescindir del gas natural que se produce en Colombia para depender de gas importado y apostarle a la transición energética no deja de generar polémica.
Más que todo, teniendo en cuenta que el país, según reciente informe de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), tiene reservas de este producto para los próximo siete años, lo que hace que los sectores presionen para saber si el gobierno de Gustavo Petro firmará o no nuevos contratos de exploración y explotación del mismo, según destacó Juan Pablo Escobar en Infobae.
Ahora se conoció un dato que debería tener en cuenta el gobierno. Esto, debido a que representa un alto costo en una época en la que el bolsillo de los colombianos no aguanta para más, debido a la alta inflación (11,78% interanual en julio), así como la alta tasa de interés del Banco de la República (13,25% en la actualidad).
Se trata de $112 billones que le costaría al país dejar de depender de sí mismo de la producción y uso de este producto.
Así lo indicó el presidente de Promigas, Juan Manuel Rojas, en la presentación que hizo de la investigación conjunta con Fedesarrollo denominada “Costos de frenar la exploración de gas natural en dos escenarios de transición energética en Colombia”, en el que se analizó el escenario hipotético y el costo que representaría para Colombia el no contar con el gas natural.
En el mismo se hace especial énfasis en la necesidad de incluir al gas natural en cualquier portafolio de suministro, dado que es un energético firme en generación eléctrica y confiable para la industria y el consumo residencial, con menores costos que los combustibles líquidos, mientras produce menos emisiones de gases de efecto invernadero por unidad.
En este se presentaron dos escenarios analizados. El primero escenario consiste en frenar la nueva exploración, no construir nueva infraestructura de importación, desmantelar y sustituir la generación eléctrica a gas natural por eólica, e impulsar la electrificación, sustituyendo el consumo de gas natural en los sectores residencial e industrial.
El segundo escenario analizado consiste en frenar la nueva exploración, pero ampliando la infraestructura de importación y manteniendo la capacidad de generación eléctrica a gas y el consumo de este energético en industria y hogares.
Al respecto, el informe resalta que una transición energética justa debe minimizar impactos negativos sobre nivel de bienestar de grupos más vulnerables.
Así las cosas, de ahí que se requiere trabajo articulado del sector para sentar las bases para una transición ordenada, responsable y sostenible, que permitan facilitar acceso de más comunidades al gas natural, especialmente a los cerca de dos millones de hogares que aún usan leña.
ALTERNATIVAS DE ABASTECIMIENTO
El presidente de Promigas, Juan Manuel Rojas, también invitó a desarrollar todas las alternativas de abastecimiento, ya que Colombia pasó de la abundancia a la escasez de gas natural.
Anotó que Colombia tiene un mercado estrecho, por lo que debe aumentar la oferta. Así las cosas, llamó la atención sobre el potencial de reservas de gas natural que tiene el país e invitó a desarrollarlas con nuevos contratos de exploración y explotación, al tiempo que se consolidan las alternativas de importación con la ampliación de la planta de regasificación de Cartagena como con la construcción de la de Buenaventura, y no desechó la posibilidad de traer gas de Venezuela.