El ex gerente general de Metro tiene una larga trayectoria ligada a la cuprífera estatal, donde ascendió hasta ser nombrado gerente general de El Teniente entre 2000 y 2004
Tras un exhaustivo proceso de búsqueda y selección, Codelco informó en un hecho esencial a la CMF que Rubén Alvarado Vigar asumirá como su nuevo presidente ejecutivo, a contar del próximo 1 de septiembre, en reemplazo de André Sougarret Larroquet.
El ingeniero civil Químico de la Universidad de Chile, actual director ejecutivo de la Fundación Cristo Vive, posee un Master Business Administration de la Universidad de Chile y la Universidad de Tulane, Nueva Orleans, Estados Unidos, y tiene una larga experiencia liderando compañías de distintas industrias.
Fue gerente general de Metro entre 2014 y 2022, gerente general corporativo de Alsacia & Express entre 2012 y 2013, director de Ingeniería y Mantenimiento de LAN Airlines entre 2007 y 2012, gerente de proyectos para el joint venture Techint entre 2005 y 2007 en Argentina y gerente general de la Empresa Portuaria de San Antonio entre 2004 y 2005.
Alvarado ha formado parte también de distintos directorios, entre los cuales destacan Metro Emisora de Medios de Pago e Isapre Fusat. Actualmente, es director de Acción Empresas, América Solidaria y la Fundación Cristo Vive Naciente.
TRAYECTORIA MINERA
El próximo presidente ejecutivo es un excodelquiano, con 20 años de trayectoria vinculada a la División El Teniente, donde llegó a ser su gerente general.
Un año después de titularse en la Universidad de Chile, ingresó a Codelco como ingeniero de Fundición, donde se desempeñó durante nueve años, entre 1984 y 1993, participando en desarrollos tecnológicos como el Convertidor Teniente y el Horno de Limpieza, entre otros.
En 1993 ascendió a jefe de Investigación y Transferencia de Tecnología en la misma Gerencia Fundición, para luego ser nombrado gerente del área.
En esta función, entre 1994 y 2000 reorganizó Caletones para migrarla desde una orientación funcional productiva a una de procesos de negocio e implementó proyectos de desarrollo de carrera para los trabajadores, de negocios tecnológicos tanto en Chile como el extranjero (Perú, México, Zambia y Tailandia) y un sistema de gestión de calidad para la mejora continua.
En 2000 fue nombrado gerente general de la División El Teniente, donde ejerció hasta 2004. Durante su período se construyó y puso en marcha el Plan de Desarrollo Teniente, un conjunto de proyectos mineros, tecnológicos y de gestión, que revirtieron la baja de productividad prevista por el agotamiento de algunos sectores, expandieron la capacidad de producción y maximizaron los excedentes divisionales. También implementó el Plan de Descontaminación de Caletones, el primero en cumplir a cabalidad con las normas de la Ley de Bases del Medio Ambiente.
RIGUROSO PROCESO DE SELECCIÓN
Máximo Pacheco aseguró que el directorio que lidera siguió un riguroso proceso de búsqueda y selección del nuevo presidente ejecutivo, que debe liderar la ejecución de la estrategia y el plan de acción que se ha definido como compañía.
“Porque sabemos que somos la empresa más importante de Chile, seremos capaces de asegurar que Codelco continúe siendo líder en la industria global de cobre, comprometida con una minería responsable para sostener y elevar nuestra producción, respetando el medio ambiente siendo amigable con las comunidades y en un entorno innovador, donde trabajemos unidos en un espíritu de colaboración y cooperación con nuestros trabajadores y trabajadoras, supervisores, ejecutivos, colaboradores y dirigentes sindicales”.
Pacheco, en nombre del directorio, asegura que están “muy felices y confiados en que, por su trayectoria minera, experiencia ejecutiva empresarial, conocimientos y competencias personales y humanas, Rubén Alvarado es el conductor que Codelco necesita para enfrentar exitosamente los desafíos y tremendas oportunidades que tiene la empresa. El liderazgo de Rubén será fundamental para acelerar el desarrollo de nuestros proyectos estructurales de inversión, con los que estamos construyendo el Codelco de los próximos 50 años. Por eso, sólo basta decirle: ¡Bienvenido de regreso a casa, Rubén!”.