Situación se refleja en menores transferencias a los gobiernos regionales
ELÍAS GARCÍA OLANO
Los récords en recaudación fiscal de los que gozó el país en forma consecutiva entre el 2021 y 2022, estarían lejos de repetirse el 2023, a juzgar por la tendencia de contracción que viene sufriendo el aporte tributario de la minería, que explica 16% de los impuestos que se recaban.
En abril del 2023, Perú recaudó S/ 261 millones, lo cual comparado con los S/ 3,610 millones de igual mes del 2022, representa una caída de 92.8%, de acuerdo con cifras del Ministerio de Energía y Minas (MINEM).
El MINEM detalló que una de las razones fue la postergación de vencimientos de pago de obligaciones tributarias y los menores pagos de Regularización del Impuesto a la Renta (por parte de las empresas del ramo).
Con el resultado del cuarto mes del año en curso, el acumulado de impuestos recabados a la minería entre enero y abril sumó S/ 3,749 millones, lo que resulta en una reducción de 60.5% comparados con los S/ 9,492 millones de similar periodo del 2022.
Del monto total percibido en el primer cuatrimestre, el mayor aporte lo constituyó el Impuesto a la Renta del Régimen General con S/ 3,027 millones, representando el 80.7% del total recabado.
¿QUÉ EXPLICA LA CAÍDA EN LA RECAUDACIÓN?
Para Marcial García, socio de la División de Tax Services de EY Perú, la menor recaudación minera se explicaría por diversos factores, el primero de ellos, según indicó, es que, al regularizarse en los últimos años los pagos a cuenta de impuestos que debían las empresas, el saldo que les tocaba pagar resultó menor que en años previos.
Otros factores, anotó, habrían sido la caída del tipo de cambio, pues si bien las empresas venden los minerales que exportan en dólares, los convierten en soles para realizar sus pagos y compras locales.
Un tercer elemento que explicaría la merma en la recaudación refirió, sería la caída relativa en los precios de los minerales, cuya cotización este año en promedio estuvo relativamente más baja que el 2022, pues aún los precios resultan atractivos para las empresas. Sobre este punto coincidió Luis Miguel Incháustegui, ex ministro de Energía y Minas.
Ambos señalaron que los primeros factores negativos contra la actividad este año han sido los conflictos sociales y convulsión que paralizaron algunas minas, a lo que le siguió el ciclón Yaku, que llevó a que Sunat difiriera el cobro de algunos impuestos.
García consideró que el menor desempeño de la recaudación minera, podría explicar en parte también la caída de la recaudación fiscal en general este año, que retrocedió en 13% en los primeros cinco meses del 2023.
Estimó que, si continúa esta tendencia (considerando que la minería representa entre el 15% al 16% del pago de impuestos) ya no se vería el 2023 los récords recaudatorios fiscales de los dos años previos; y en vista además que la demanda interna ha caído, y eso afectaría también la recaudación por IGV (que explica en un 50% el pago de tributos en el país).
IMPACTO EN LAS TRANSFERENCIAS A ZONAS MINERAS
La caída en la recaudación a las empresas del sector se reflejó también en menores transferencias por conceptos de canon, regalías y derechos de vigencia y penalidad (que se pagan por la posesión de concesiones mineras).
El canon proviene del 50% de la recaudación correspondiente al Impuesto a la Renta que pagan las empresas mineras.
El MINEM detalló que lo transferido por esos conceptos a los gobiernos regionales y locales (de zonas donde se desarrolla esa industria) sumó S/3,057 millones, lo cual muestra una caída de 19.53% (frente a los S/3,799 millones de igual lapso de 2022).