LUCIANA PAZ
Arminera cerró sus puertas y concluyó la demorada edición del aniversario número 25. Las charlas de negocios estuvieron a la orden del día y el reclamo de reglas claras y previsibilidad económica, fiscal e impositiva fue el leit motiv de los eventos del Hall 2 de La Rural. El último día la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) y ABECEB lanzaron el primer Índice de Costos de la Minería Argentina (ICM).
El índice permitirá conocer la evolución de los principales costos de la minería en el país, medidos en dólares, en un contexto de alta volatilidad de precios de los commodities. "Tener un índice de referencia es también saber un poco cuáles son las ventajas competitivas que tiene el país con respecto a otros países o distritos mineros. Hay muchos países que hoy tienen este índice de referencia y nos pareció muy innovadora la propuesta de ABECEB con CAEM para poder llevarlo adelante", reforzó Franco Mignacco, presidente de CAEM.
Sí en algo coinciden autoridades y empresarios es que Argentina tiene potencial pero debe hacerlo despegar, lo único que falta para que esto suceda, y que Argentina no se pierda una vez más una oportunidad única -esta vez con el litio-, es el turno del gobierno nacional. Para la minería como para otras industrias la previsibilidad y reglas claras son los reclamos más frecuentes.
“El acumulado US$ 2,3% de aumento en el primer trimestre del año implica una pérdida de competitividad. La inflación está bajando en el mundo y en Argentina sucede lo contrario. Es un factor que está presionando en el Opex de cada uno de los proyectos mineros. A partir del 2017, vemos que los ciclos donde hay mayor presión en dólares es cuando el tipo de cambio está atrasado y va detrás de la inflación. En estos últimos dos años hay dos incidencias, el 15% tiene que ver con la macroeconomía y el 6% con el aumento de precios internacionales”, afirmó Natacha Izquierdo, responsable de análisis sectorial de ABECEB.
Para elaborar el Índice se tomó de referencia el IPC de Estados Unidos, no porque sea una referencia directa donde ven que mientras en Argentina da el 0,6% de aumento, en Estados Unidos es el 5% y, en torno a los inventarios de los seguros, el 1, 3% en Estados Unidos es el 1, 8%, y explicó Mignacco que "eso refuerza lo que estamos diciendo de un aumento de los precios en dólares a nivel local, mientras que a nivel internacional, como referencia, esta tendencia está a la baja".
Para llegar a ese nivel acumulado del 2,3%, se registró una suba del 2,1% en enero, una caída del 0,5% en febrero y una nueva alza del 0,7% en marzo, cuando el IPC de Estados Unidos aumentó sólo un 1,8%.
En todo el trimestre, los elementos que más presionaron fueron las categorías otros servicios con un 4,5%, consumibles (4,3%), logística (1,2%), remuneraciones (1,1%), y energía y combustibles (0,9%). En cuanto a las 24 subdivisiones de cada una de las seis categorías principales, las que registraron el mayor aumento en dólares fueron: materiales y repuestos (8,7%), otros servicios (4,5%), químicos (2,8%), logística (2,2%), y otros consumibles (1,9%).
"El índice muestra la evolución a partir del 2017, donde vemos claramente que los ciclos donde hay mayor presión en términos en dólares, tienen que ver cuando la devaluación o el tipo de cambio está atrasado y va por detrás de la inflación. Y esto sucede tanto en el 2017 como en estos últimos dos años. En estos últimos dos años y sobre todo en el 2022, hay dos incidencias. Una es que el 15% de estos métodos, el 21% en términos de dólares de costo, tiene que ver con desequilibrio macro. Y el 6% de incidencia tiene que ver con aumento de precios internacionales", agregó Mignacco.
El director de la consultora ABECEB, Gustavo Pérego, explicó que la elaboración del indicador demandó unos cuatro meses de trabajo y que, a partir de ahora, tendrá una publicación mensual, con un análisis detallado de forma trimestral.
“Hoy, al momento en que la industria habla con los stakeholders, muchas veces no tenés números representativos. Índices como el de la construcción, que son avalados por la industria, sirven como marco referencial. La lógica fundamental es que sea la base de comunicación de la industria, principalmente para que se entienda que la minería tiene sus ventajas y sus dificultades. En esa lógica se nos ocurrió crear este índice que sea comparable a nivel internacional, ver la inflación en dólares, compararnos con Chile y tener un grado de magnitud de las posibilidades del sector de hoy en adelante”, detalló.
"Esto se ve con mucha variabilidad, pero la reacción que tiene el índice de costo respecto a sus aumentos tiene que estar, está más asociado a las tendencias de largo plazo de ciclos económicos mientras que la volatilidad de los commodities puede ser que los saltos sean mes a mes incluso motivados por políticas monetarias de la FED para estabilizar la inflación a nivel global, desaceleración de la actividad en China, aumento de los fletes, etc".
Todo lo que se estima y proyecta de la minería es cierto, Argentina no puede perder, una vez más, el tren del desarrollo. El cobre y el litio van a ser necesarios para la transición y el país lo tiene. Las limitaciones por los obstáculo impositivos, aduaneros, fiscales y cambiarios impacta a mineras, proveedores y una larga cadena de industrias, sí los discursos llegan, si los reclamos son escuchados las determinaciones no deberían tardar en llegar.