LUCIANA PAZ
La parte social es un componente importante en el desarrollo minero para generar confianza y compromiso con las comunidades. El proyecto Calcatreu, de Patagonia Gold logró establecer diálogos con instituciones para forjar una Declaración de Compromiso para generar oportunidades y cumplir promesas.
En el panel "Desafíos: marco regulatorio, licencia social y consenso político", en organizado por la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) y el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA), Alberto Carlocchia, Gerente de Relaciones Institucionales y Sustentabilidad de Patagonia Gold
Un efecto sumamente importante en el desarrollo de la minería que es la parte social, un componente que está presente en toda ecuación de desarrollo minero, más allá de cómo generar beneficios, cómo exportar, cómo producir más, cómo impactos sociales, naturales, industriales, sistemas, es muy importante.
"No me gusta el término licencia social, me parece un tanto anacrónico, prefiero hablar de procesos de desarrollo de confianza o de generación de confianza. El entendimiento de que la licencia social es algo demasiado estático, no es como un cuadrito que uno cuelga en la pared y que al final del día lo mira porque lo tuvo, el relacionamiento con la comunidad es permanente, dinámico y esto se tiene que ir renovando día a día", enfatizó Carlocchia.
Calcatreu empezó con una idea de compromiso. La generación de un compromiso desde el proyecto, desde la empresa como un diálogo previo a través de las distintas instituciones de la comunidad. En 2017 Patagonia Gold compró a Pan American Silver el proyecto Calcatreu, ubicado en la línea sur de Río Negro y
"La historia indica que fue donde nació la prohibición de la minería en Río Negro. De ahí su importancia y la importancia de ese diálogo y de, de alguna manera, comprometerlo como un proyecto hacia la comunidad y generar esa confianza", dijo Carlocchia.
Patagonia Gold se volcó al diálogo con las distintas instituciones y organismos intermedios que hay en la comunidad y en la región y de ahí nació la Declaración de Compromiso. "En Argentina han perdido bastante terreno y hoy por hoy es el mejor diálogo que se puede generar desde el punto de vista de que la institución reúne a un grupo de personas o de entidades con intereses comunes y que tiene también la posibilidad de generar soluciones para las inquietudes de esos integrantes".
Esa Declaración fue firmada por el CEO de Patagonia y presentada por la comunidad, el cual marcaba el "como" que incluye una cuestión esencial en el desarrollo local, que es el compromiso y la participación de la comunidad a través de sus instituciones.
Retomando lo planteado por el Executive Director of Government Affairs for South America, Marcelo Álvarez en un panel anterior, Carlocchia afirmó que "Será la sustentabilidad económica la base fundacional de toda la sustentabilidad que viene después. Si no hay proyecto minero, difícilmente podamos cumplir con un montón de objetivos que podemos lograr".
En la definición de compromiso Patagonia Gold plante un concepto importante en la idea de desarrollo, que es el día después. "El día después de un proyecto minero, dando la pauta de que es un ser finito. O sea, un proyecto minero empieza y en algún momento termina. Y cuando empieza es cuando nosotros empezamos a generar, en conjunto con la comunidad, las distintas alternativas que pueden estar orientadas a las potencialidades de las comunidades y que puedan lograr, más allá de la vida útil de la mina, transformar ese crecimiento en un verdadero desarrollo sostenido de las localidades".
"El compromiso es la base de la generación de las oportunidades, no solamente de la participación de la comunidad y de cómo se involucra la comunidad también en el desarrollo conjunto de un proyecto, sino también puede generar un efecto de contagio hacia lo que entendemos que puede venir después".
"En los últimos 20 años, el dilema ambiental en el sector dinero ha contribuido negativamente a la imposibilidad de desarrollo de un gran proyecto, en enorme cantidad incluso a prohibición del desarrollo de una industria totalmente lícita en diferentes provincias de nuestro país. Pero de unos años a esta parte, el tema ambiental no es materia exclusiva de las industrias productivas, de hecho es un tema que ha abordado las dificultades de desarrollo de muchas actividades del sector productivo y distintos sectores económicos".
Entonces, la experiencia que nosotros tenemos de los últimos 20 años, de alguna manera creo que le sirve a las otras actividades económicas y que se den cuenta realmente que el luchar contra el ola verde ha sido fructuoso, sobre todo para el sector minero.
"En ese sentido, creo que tenemos que empezar a apuntar y darnos cuenta de que el tema ambiental no es el único detrimento o crítica que puede tener un centro como la minería o cualquier otra industria activa, que tenemos que apuntar a que darle una vuelta de fuerza a la cuestión y entender que el Estado, su rol de controlador, puede ayudar mucho a generar confianza en aquellos que no la tienen".
Y agregó que "El tema del control público es uno de los principales detenimentos que nosotros podemos encontrar en muchísimas encuestas, mucho más allá en algunas provincias del tema ambiental. Creo que iniciativas que hagan un control transparente, público, que pueda darnos la oportunidad de que la gente entienda o realmente se sienta cuidado por el sector público que está controlando a aquellos que ellos no entienden cómo van a desarrollar su actividad, va a contribuir mucho más al desarrollo de la industria, de manera que se sigue luchando contra no la verdad."