La Empresa Nacional de Minería, Enami, avanza en el encargo gubernamental de desarrollar proyectos de exploración y explotación de litio en los salares chilenos, una tarea que asignó también a Codelco en el caso de la estratégica posición en el Salar de Atacama.

La política global, definida en sus trazos gruesos, debe ser ahora estructurada en sus detalles: qué salares serán considerados estratégicos y tendrán, por tanto, control estatal; qué salares serán definidos como no estratégicos; y cuales serán reservados para protección ambiental, lo que será el 30% del total.

Aun con esas definiciones pendientes, Codelco y Enami avanzan en el desarrollo de sus respectivos equipos. Mientras Codelco ya trabaja desde hace meses para la negociación con los operadores del Salar de atacama, el mayor yacimiento de litio chileno; Enami creó una filial en diciembre de 2022, denominada Enami Litio. Y esa filial ya tiene un directorio.

La mesa de la filial está presidida por Nancy Pérez Ojeda, quien está en el directorio de Enami desde abril de 2022, designada por el presidente Gabriel Boric. Ingeniera civil en Informática de la Universidad Técnica Federico Santa María, Nancy Pérez tiene un magister en derecho ambiental, en bioderecho, y otro en innovación.

También fue gerente de excelencia en proyectos en Codelco y desde 2019 había sido directora de Transformación de Ingeniería y Construcción, así como también como gerenta de Cartera de Proyectos.

El directorio de la filial Enami Litio lo integran ocho personas y participan también el vicepresidente ejecutivo de Enami, Jaime Pérez de Arce, y el fiscal de la entidad, Marcelo Rocha.

También participan Carlos Claussen, electo en Enami por la Sociedad Nacional de Minería, Sonami, el gremio empresarial que tiene derecho a nominar dos representantes en la empresa de fomento del sector, y Carlos Espinoza, designado por el Instituto de ingenieros.

También están en la nueva filial otros tres directores de Enami: Juan Carlos Román, director electo por el ministerio de Hacienda, Osvaldo Urzúa, por Corfo, y Leandro Voisin, por presidencia.

Pérez de Arce dice que la designación del directorio de Enami Litio es provisoria. “Este directorio debe trabajar en tres meses una propuesta de directorio definitivo”, cuenta.

La idea, dice Pérez de Arce, es que exista una separación entre los directorios y equipos de Enami y los de su nueva filial del litio. Por ello, podría ocurrir que los integrantes de ambos directorios sean distintos. El directorio de la filial debe definir, además, cómo desarrollar el encargo del gobierno de desarrollar la exploración y explotación del litio, salar por salar. 

“Hay que mirar en cada uno de los casos bajo qué política estarán”, responde De Arce sobre las definiciones aún pendientes relativas a qué yacimientos serán estratégicos y cuales no.

Enami tiene pertenencias en dos salares, Aguilar e Infieles, pero ha pedido al ministerio de Minería que le otorguen un Contrato Especial de Operación de Litio (CEOL) sobre cinco salares del norte. A los dos anteriores sumó La Isla, Las Parinas y Grande.

“Durante el 2021, Enami ejecutó la exploración preliminar en los salares de Aguilar e Infieles con resultados auspiciosos por lo cual durante el año 2022 se dio continuidad con la planificación de una campaña de exploración básica”, dice la empresa en su memoria 2022.

En la prospección hidrogeológica Salares Enami Etapa II, la empresa invirtió en 2022 solo US$ 11 mil, unos $ 9 millones. Enami reveló en que tiene 13 acuerdos de confidencialidad en distintas áreas de negocios, entre los cuales menciona cuatro acuerdos firmados para proyectos de litio.

“Hemos avanzado con un Contrato Especial de Operación de Litio (CEOL), iniciativa con la que se busca que Enami, en su rol de empresa estatal, sea una alternativa concreta para abordar la etapa inicial de exploración de litio de diversos salares, agregando valor a su producción”, decía en la carta de la ministra Marcela Hernando, también presidenta de la empresa, en la memoria 2022 de Enami.