Los expertos del mercado de metales prevén que la cotización del metal rojo se mantendrá vigorosa, si bien con algunos matices y temores por las condiciones geopolíticas internacionales
JUAN SALDARRIAGA
Los continuos bloqueos contra operaciones cupríferas en el sur de Perú tienen en jaque al sector minero. De acuerdo a Scotiabank, estos violentos sucesos restarán un punto porcentual al crecimiento de la producción de cobre en el 2023 y desalentarán la construcción de nuevas minas y proyectos este año.
Detrás de estas malas noticias hay, sin embargo, una nota de consuelo, y es que la interrupción del suministro de cobre peruano impulsaría aún más el precio de este commodity, principal producto de exportación de nuestro país.
Así lo indica el diario británico Financial Times en un artículo publicado la semana pasada.
Es más, el medio cita a un analista del Bank of America, Michael Widmer, quien arguye que las protestas en el sur del Perú podrían aumentar la volatilidad del precio del cobre, disparándolo hasta US$ 12.000 por tonelada o US$ 5,4 por libra (hoy se ubica en US$ 9.000 por toneladas o US$ 4 por libra).
Juan Carlos Guajardo, director ejecutivo de la consultora chilena Plusmining, concuerda en que la menor oferta de cobre peruano podría dar más aliento a la trayectoria de este metal en el 2023.
Anota, sin embargo, que más allá de la presión ejercida por las mermas de producción en Perú, Chile y Panamá, subyacen factores geopolíticos y económicos globales que hacen pensar que “el precio del cobre va a estar fuerte este año”.
Dichos factores son la reapertura de la economía China tras el fin de sus draconianas restricciones contra la Covid-19 y el cambio de la actitud beligerante de EE.UU. respecto al coloso asiático, que le permitiría enfrentar mejor sus brotes inflacionarios y una posible recesión.
PREVISIONES PARA EL METAL ROJO
Por estas y otras razones, la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) ha elevado su proyección para el precio promedio del metal rojo, de US$ 3,7 la libra hasta US$ 3,85 la libra, en el 2023.
No obstante, Guajardo se muestra cauto. “Si bien estamos en una situación mejor que la esperada, esta condición puede cambiar si los factores geopolíticos varían”, remarca.
Dicha cautela es compartida por Scotiabank, que mantiene su previsión para el precio del cobre en US$ 3,8 la libra para este año, esto es, un nivel inferior al del 2022.
Katherine Salazar, analista de estudios económicos de la entidad financiera, explica que esta visión se sustenta en la expectativa de una mayor oferta de cobre procedente de Quellaveco y otras minas en Chile y África, la cual contrarrestaría, en el mediano plazo, el efecto que el dólar ejerce sobre el alza del precio del cobre en el corto plazo.
No obstante eso, Scotiabank ve un precio ligeramente superior para el cobre en el 2024, US$ 3,9 en promedio, fundamentado en la sólida demanda de China y de EE.UU.
Cochilco visualiza, por su lado, un precio de US$ 3,65. Se trataría, en todos los casos, de precios inferiores a los del 2022, pero superiores a los de todos los años anteriores , lo cual significa que la producción cuprífera seguiría alimentando el canon para las regiones y los tributos para el Estado.