Securitas Argentina tiene el desafío de desplegar todo su expertise en seguridad a la hora de prestar el servicio en la construcción del GNK
Securitas Argentina asumió el desafío de la seguridad del Gasoducto Néstor Kirchner, la obra clave para destrabar el potencial de Vaca Muerta. Un tendido de tuberías que se extiende por cuatro provincias en un recorrido de 563 kilómetros entre Neuquén y Saliqueló en la provincia de Buenos Aires, atravesando además La Pampa y Rio Negro.
¿Cuál es la complejidad a la hora de pensar las soluciones para una obra de esta características?¿Cómo articularon con el consorcio SACDE Techint responsables de su construcción? ¿Cómo se prepararon y respondieron en un escenario complejo donde el tiempo y la eficiencia son los valores por cumplir?
Desde que Securitas tomó el servicio la frase "innovamos en la inmediatez" se convirtió en su lema. Partiendo de dos etapas bien diferenciada, la primera vinculada a la perforación del suelo, y la segunda, la custodia de grandes campamentos ubicados en todo el trayecto, con guardias a lo largo de cada uno de los tramos siendo General Hacha el gran punto de encuentro.
Dado que aún no están los campamentos, el servicio se modificó de puestos fijos a puestos móviles, con la ventaja de que no se necesita energía y todos los instrumentos están en la patrulla. Son grandes extensiones con un gran número de maquinarias y herramientas, es lo que denominamos “obra limpia” y tiene la complejidad de que comienza en varios lugares al mismo tiempo.
Actualmente, Securitas cuenta con un servicio de seguridad dinámica con recorridos preventivos y disuasivos por los casos de vandalismo que pueden suceder. Es similar al servicio que la empresa presentó para YPF, en la zona de Vaca Muerta. Son turnos de ocho horas en lugares lejanos, inhóspitos, sin ningún tipo de infraestructura, nuestros guardias llegan a viajar hasta tres horas para tomar el servicio.
Hoy, Securitas cuenta con el 20% de la capacidad probable, necesitando en el momento de mayor demanda 120 guardias para toda esta gran obra. Cumplir con el objetivo de un tendido promedio de 5km por día implica que más de 700 personas convivan a futuro en los campamentos.
Por este motivo, la empresa sugirió utilizar el sistema de control de acceso de openkey, que tiene desde un básico de QR hasta los sistemas biométricos más sofisticaos, ya que se basan en una lectura de las propias características físicas de la persona a identificar.
La seguridad en el Gasoducto Néstor Kirchner es uno de los desafíos más importantes que Securitas ha asumido dentro del sector del Oil & Gas.