DAYANNE GONZÁLEZ

El principal aportante a las arcas fiscales de Chile ha sido tradicionalmente el cobre. Pero de un tiempo a esta parte, le ha salido un competidor al camino: el litio. Por esa razón, Pauta revisó los reportes de las empresas, y también los datos de la Tesorería General de la República y del Servicio de Impuestos Internos para saber si es cierto que este mineral no metálico desplazó al mineral rojo como el principal proveedor de impuestos para el Estado.

De acuerdo con la información de SQM -que no solo es la principal empresa explotadora de litio en el país, sino que su acción es la más importante en la Bolsa de Comercio- al primer semestre, su aporte al fisco llegó a los US$ 2.198 millones.

El monto se explica fundamentalmente por los elevados precios del litio en ese período, que superaba los US$ 54.000 por tonelada métrica, y por el pago de los derechos de arrendamiento del Salar de Atacama.

Esto es consistente con el aumento que ha tenido su acción: mientras que al cierre de 2022 se transaba en $43.489, hoy supera los $85.000. Esto es, una rentabilidad de 95%. Y eso que en un momento del año la acción superó los $100.000.

Por otro lado, según estadísticas entregadas por la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda (Dipres), en el período entre enero y septiembre de 2022, el aporte de las empresas de gran minería de cobre, que incluye las 10 empresas privadas más Codelco, alcanzó un monto de US$ 4.000 millones.

Asimismo, si se toman las cifras del año pasado, el aporte al fisco de la gran minería fue de US$ 9.594 millones. 

Eso sí, si se quieren comparar los aportes al fisco de Codelco con los de SQM, la segunda tuvo un mejor desempeño, ya que la minera estatal reportó excedentes (nombre con que se contabilizan los aportes al fisco) por US$1.671 millones entre enero y junio de 2022.

En este período, se produjeron 736 mil toneladas de cobre, un 7,5% menos que el año pasado, afectadas por una menor ley del mineral en la división Ministro Hales y una menor tasa de procesamiento y recuperación de cobre en las divisiones Chuquicamata y El Teniente.

Pese a todo, no debe olvidarse que el cobre ha sido históricamente el mayor aportante al Estado. El director del Programa Investigación y Postgrado en Economía de Minerales UC, Marcos Lima, mencionó en una nota anterior de Watchdog Pauta que en el período 2000-2019 el cobre entregó más de US$ 108.000 millones al Estado, lo que representa un 13,1% de los ingresos fiscales del período.

Para 2023, la Dipres proyecta una disminución real anual de 49,5% en cuanto a ingresos por concepto de Cobre Bruto de Codelco, debido a que prevén una menor producción y ventas totales de la minera estatal, y al descuento del remanente de la capitalización del 30% de las utilidades 2021 que no se hayan alcanzado a descontar en 2022.

En este sentido, el gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Álvaro Merino, dice que la actividad minera tendrá una caída cercana al 4,5% este año, con una menor producción de cobre, molibdeno, oro y plata, lo que será parcialmente contrarrestado por el incremento de la producción de no metálicos, particularmente del litio.

"El factor más relevante en el retroceso es la menor producción de cobre, que pasará de 5,6 millones de toneladas en 2021 a un monto cercano a las 5,3 millones de toneladas en 2022", agrega.

También para 2023, de acuerdo con la información del informe de Finanzas Públicas del tercer trimestre de la Dipres, se proyecta una caída real de 52,6% anual en las rentas, debido a que el resultado de 2022 se explica por un shock transitorio en el precio del litio, lo que elevó los ingresos percibidos por Corfo, originados por los contratos de explotación de litio suscritos con SQM y Albermarle. Además, se espera un aumento en la oferta mundial y una disminución en la demanda mundial por el litio.

Por otro lado, de acuerdo con el informe final de 2021 del Consejo Minero, la combinación de un aumento significativo en los precios de los metales y una leve caída en producción, sobre todo en el cobre, llevó a que las exportaciones mineras mostraran un importante aumento de 46%, para llegar a US$ 58.694 millones. Esto significó que los envíos mineros representaron el 62% de los embarques totales del país, cifra que no se veía desde 2010.

"El próximo año el sector minero crecerá entre 6% y 7%, con una producción de cobre cercana a las 5,7 millones de toneladas. Esto se explica por la baja base de comparación y el relevante incremento en la producción de cobre, especialmente de Quebrada Blanca, Pelambres y Escondida", dijo Merino.