El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió a las empresa de petróleo y gas que no aumenten los precios para los consumidores a medida que el  huracán Ian se acerca a tocar tierra en la costa Suroeste de Florida.

“No, repito, no usen esto como una excusa para subir los precios de la gasolina o estafar al pueblo estadounidense”, dijo Biden al comienzo de una  conferencia sobre el hambre en Estados Unidos.

Biden dijo que el huracán “no es excusa para los aumentos de precios en las gasolineras” y, si sucede, pedirá a los funcionarios federales que determinen “si se están midiendo los precios”.

“Estados Unidos está mirando. La industria debería hacer lo correcto”, agregó, según informó The Associated Press.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos informó que el huracán Ian bajó a categoría 1 rumbo a Orlando. Detrás de sí, dejó grandes destrozos e inundaciones en toda la costa oeste de Florida. Piden a los residentes respetar el toque de queda.

Según informó PowerOutage.us, ya son alrededor de 2,2 millones los clientes sin electricidad en Florida como consecuencia del huracán Ian.

A través de su cuenta oficial de Twitter, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, advirtió a la población: "Después de que pase, tenga cuidado al salir. Asegúrese de evitar las líneas eléctricas caídas, evite el agua estancada, manténgase alejado de los árboles, no conduzca en agua estancada y mantenga los generadores a seis metros de distancia de su hogar".

Hay pocas señales de que los precios promedio de la gasolina hayan subido significativamente en Florida a medida que el huracán comenzó a acercarse. AAA colocó el promedio estatal en poco menos de US$ 3.40 por galón, seis décimas de centavo más que hace una semana.

Recientemente finalizó una racha de 99 días de precios de surtidores a la baja a nivel nacional, y la caída de 14 semanas fue la racha más larga desde 2015.

El precio promedio a nivel nacional había subido a más de US$ 5 por galón, y US$ 6 en California, en junio debido a la recuperación económica y un el aumento de los viajes impulsó la demanda de gasolina y la guerra de Rusia en Ucrania provocó un aumento en los precios del petróleo.

Los precios de la gasolina reflejan principalmente las tendencias en los precios mundiales del petróleo, y el crudo, tanto el índice de referencia de EE.UU. como el Brent, se ha desplomado desde mediados de junio debido a los crecientes temores de una  recesión mundial  que reduciría la demanda de energía.