La petición se da un mes después de que el gobierno, legisladores y activistas ambientales radicaron en el Congreso un proyecto de ley para prohibir el fracking y la explotación de no convencionales
La estatal Ecopetrol de Colombia solicitó a la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) la suspensión temporal por 90 días de los contratos de sus dos proyectos piloto de exploración de petróleo con fracking en el país sudamericano, informaron el martes la empresa y dos fuentes familiarizadas con el asunto.
La petición a la ANH se conoce un mes después de que el gobierno, legisladores y activistas ambientales radicaron en el Congreso un proyecto de ley para prohibir el fracking y la explotación de fuentes no convencionales de hidrocarburos, con la esperanza de que se apruebe la restricción.
"El viernes pasado se le solicitó a la ANH la suspensión temporal de los contratos Kalé y Platero por un plazo de 90 días", dijo un portavoz de Ecopetrol que se abstuvo de revelar las motivaciones que originaron la petición, según informó Reuters.
ExxonMobil y Ecopetrol son socios en los proyectos, pero la petrolera colombiana es el operador.
La ANH, encargada de la administración y regulación del recurso hidrocarburífero de Colombia y que deberá aceptar o negar la solicitud de Ecopetrol, no hizo de inmediato comentarios.
Una segunda fuente familiarizada con los dos proyectos piloto de Ecopetrol, en inmediaciones del municipio de Puerto Wilches, en el departamento de Santander, en el Norte del país, dijo que la solicitud de suspensión de los contratos podría tener relación con las inversiones en el futuro inmediato que podrían perderse si el Congreso prohíbe el fracking.
"Con la suspensión lo que se busca es abrir un compás de espera mientras se define el futuro de los pilotos", explicó la fuente quien aseguró que de ser aprobada la solicitud se suspende la contratación de obras civiles y de mano de obra.
GOBIERNO EN CONTRA DEL FRACKING
El presidente Gustavo Petro, quien asumió en agosto como el primer mandatario de izquierda en la historia de Colombia, busca impulsar una transición hacia energías limpias y renovables.
Petro, un economista de 62 años, es un fuerte crítico del fracking y de la dependencia económica de la producción del petróleo y del carbón.
El mandatario logró consolidar en el Congreso una mayoría entre partidos de izquierda, centro e incluso de derecha, para buscar la aprobación de decisivas reformas económicas y sociales en el país de 50 millones de habitantes.
El debate jurídico y científico en Colombia sobre el desarrollo de fuentes de energía no convencionales y el uso de la fracturación hidráulica o fracking es largo, con defensores argumentando que es vital para la economía del país y la autosuficiencia energética, mientras que los críticos advierten de una catástrofe ambiental.
En julio, el Consejo de Estado, un tribunal administrativo, falló en contra de una demanda que buscaba anular las reglas que permitirían proyectos de fracking en el país, anulando efectivamente una moratoria sobre el desarrollo comercial de yacimientos de petróleo y gas no convencionales.
Los ambientalistas de Puerto Wilches, donde se ubican los proyectos piloto y que es epicentro del debate sobre el fracking en Colombia, denunciaron amenazas de muerte por oponerse a la explotación de hidrocarburos con esa técnica.
Colombia, que alcanzó en 2021 una producción de 736.356 barriles promedio diarios, tiene un potencial de entre 3.000 millones y 9.000 millones de barriles de petróleo equivalentes en yacimientos no convencionales, según el Gobierno.
Las reservas probadas de petróleo del país sudamericano cerraron el 2021 en 2.039 millones de barriles de crudo, equivalentes a 7,6 años de consumo. El petróleo es la principal fuente de ingresos por exportaciones, impuestos y regalías.